La
pequeña muerte es un término que se usa para referirse al periodo refractario
que se experimenta después del orgasmo femenino. Específicamente hace alusión al momento en el cual algunas
féminas sufren un desvanecimiento o pérdida de conciencia post orgásmico. La
Petite Mort es ese pequeño instante, ese momento glorioso donde la mujer puede decir
“Me vine”.
Si
bien muchas personas se centran en el halo romántico de los orgasmos, lo cierto
es que estos son un proceso fisiológico extremadamente complejo. El orgasmo
femenino puede extenderse durante más de 30 segundos y en ocasiones alcanza
hasta un minuto. En este periodo la mujer experimenta una serie de cambios
fisiológicos muy fuertes como el aumento de la presión arterial y la frecuencia
cardiaca, las contracciones secuenciales de los músculos de diferentes zonas
del cuerpo y la liberación de una enorme cantidad de hormonas como la oxitocina
y la prolactina.
De
hecho, el orgasmo es una sensación tan fuerte que algunos especialistas lo han
descrito como: “una descarga explosiva de tensiones neuromusculares” o “un
placer intenso que genera un estado alterado de la conciencia”. Así, no sería
del todo extraño que, debido al esfuerzo al cual se somete nuestro organismo,
algunas mujeres podrían perder la conciencia inmediatamente después de
vivenciar el orgasmo.
Los
especialistas afirman que el desvanecimiento post orgásmico en realidad se debe
a una serie de cambios respiratorios particularmente fuertes que actúan
contrayendo la aorta. Como consecuencia de esto, ocurre una hiperventilación
(exceso de oxígeno en sangre) o tiene lugar una pequeñísima isquemia (falta de
riego sanguíneo al cerebro).
Para
arrojar nuevas luces sobre la pequeña muerte y el orgasmo femenino,
recientemente se ha escaneado el cerebro de las mujeres mientras vivencia un
orgasmo. En este estudio se utilizó la tomografía por
emisión de positrones en 12 mujeres sanas.
Al
finalizar se halló que la estimulación sexual del clítoris aumenta
significativamente la activación de las zonas de ambos hemisferios de la
corteza primaria somatosensorial dorsal (zonas de la neocorteza). Sin embargo,
al contrario de lo que se pensaba, el orgasmo provoca una disminución en la
actividad de estas zonas neocorticales; particularmente en algunas regiones del
lóbulo temporal (relacionado con el equilibrio por lo cual, quedan explicadas
las pérdidas de equilibrio que sufren algunas mujeres inmediatamente después
del orgasmo). “hay una disminución del flujo sanguíneo en la
corteza orbitofrontal lateral izquierda durante el orgasmo femenino, lo cual
-aunado a la dopamina- puede generar este efecto momentáneo. Una especie de
estado de coma de segundos”.
En
resumen, esta investigación reafirma que durante el orgasmo femenino se
evidencia una falta de riego sanguíneo al cerebro que sería la causante de: una
conducta totalmente desinhibida, la pérdida de equilibrio, los mareos e
incluso, la pérdida total de la conciencia.
El análisis científico
de la actividad sexual femenina está dando sus primeros pasos, por
ende, no existen muchas investigaciones donde se hayan
analizado los afectos a largo plazo de la Pequeña Muerte, tal ves debido a que la
magnitud de la isquemia es realmente pequeñísima.
Podrían compartir el articulo bibliográfico?
ResponderEliminar