No solo se trata de
tener al lado a alguien que nos haga compañía o con quien podamos pasar los
ratos de ocio, una relación implica mucho más que eso y finalmente el deseo de
toda pareja es estar juntos en una unión saludable que crezca y se fortalezca con
el tiempo.
1.- Comenzar tu
relación con el pie derecho.
a) Comprende tus
necesidades y deseos. Si quieres tener una relación próspera, es importante
comprender tus propias necesidades emocionales y físicas antes de iniciarla,
porque necesitarás comunicarlas a tu pareja. Es posible que ya tengas una
idea clara de lo que necesitas y deseas en una relación, pero si no estás
seguro, puedes pensar en las siguientes preguntas:
Reflexiona sobre tus
relaciones pasadas para determinar la razón por la que funcionaron o no. ¿Qué
pueden decirte estas experiencias con respecto a tus necesidades? Piensa en la manera en
que reaccionas ante las personas y eventos. Por ejemplo, ¿tienden a reaccionar
de forma emocional, te cuesta confiar en alguien o expresar tus sentimientos?
Puede ser útil tener en cuenta estos rasgos de personalidad antes de entablar
una relación seria.
b) Asegúrate de que las
razones para tener una relación sean saludables en lugar de lo contario. Ten en
cuenta las siguientes indicaciones: Las razones saludables
para tener una relación son un deseo por compartir el amor, la intimidad y el
compañerismo; ansias de experimentar el desarrollo personal; afán de
proporcionar apoyo emocional y físico a la pareja y la esperanza de crear una
familia. Es importante tener en cuenta que estas motivaciones no solo se
enfocan en recibir amor y apoyo, sino también en brindárselos a tu pareja.
Las razones poco
saludables para tener una relación son el temor a estar solo, miedo a la
ruptura y la indisposición a perder tu conexión con los amigos o familiares de
tu pareja. Utilizar a tu pareja para obtener seguridad, sexo, dinero, o
vengarte de una expareja, son razones poco saludables para tener una relación.
Si comienzas una relación y la mantienes por estos motivos, tanto tu pareja
como tú tendrán dificultades para hacer que dure y sea feliz, llegando a
causarse daño en el proceso.
c) Elige sabiamente a
tu pareja. Si quieres forjar una relación feliz y duradera, debes elegir
cuidadosamente a tu pareja. Un error común es pensar que los opuestos se
atraen, pero los investigadores han revelado que las personas que comparten
objetivos, intereses y expectativas en común suelen tener relaciones más
satisfactorias.
No es necesario que tus
rasgos de personalidad sean los mismos que los de tu pareja, pero si ambos
quieren cosas distintas de la relación, tendrán dificultades para hacerla
durar. Determina si sus
diferencias se complementan. Por ejemplo, alguien que es más impulsivo podría
encontrar un equilibrio con alguien que tiende a ser más planificador.
2.- Toma
responsabilidad por tu propia felicidad. Evita varias horas de discusión
recordando lo siguiente: hacerte feliz no depende de nadie más que de ti. En
una relación, tu pareja tratará de complacerte y hacerte feliz, pero al final
tú eres responsable de tu felicidad.
3.- Si tú no estás
bien, nada lo estará. La dedicación y falta de tiempo por el trabajo, el niño,
la casa, las discusiones, etc. es objetivo. Tu actitud hacia esa circunstancia
y todo lo que piensas y sientes es subjetivo, y ahí puedes intervenir desde
ahora mismo.
4.- No cambies al
iniciar una relación. A la persona le vas a gustar como fuiste cuando te
conoció, no pienses que tienes que actuar drásticamente diferente. Solo debes
sentirte cómodo. No sientas prisa. Las personas que entablan una relación
podrían sentir la presión de pasar rápidamente a una fase más avanzada (tener
intimidad, mudarse con la pareja o casarse justo después de conocerse). Si bien
puede ser emocionante pensar en el final feliz que esperas y apresurarte por
cumplirlo, tomarte el tiempo para asegurarte de que tanto tu pareja como tú
estén en la misma página con respecto a la relación solo la solidificará.
Nota: Ten en cuenta que
tu relación cambiará. Al igual que tu pareja y tú podrían cambiar con el paso
del tiempo, la relación también evolucionará. En lugar de mantener una relación
monótona, acepta y aprecia los cambios que surjan con el desarrollo de una más
establecida y duradera.
5.- Identidades
separadas. En una relación sana, es importante que cada uno renuncie a algo.
Pero esto no significa que deberías sentirte como si estuvieras dejando de ser
quien eres. Cuando empiezas a salir, cada uno tenía su propia vida (familias,
amigos, intereses, hobbies, etc.) y esto no debería cambiar. Ninguno de los dos
debería hacer ver que le gusta algo que en realidad le desagrada, ni dejar de
ver a sus amigos o abandonar las actividades que le encantan. Y también deberían sentirse libres para desarrollar nuevos talentos o intereses, hacer
nuevos amigos y seguir evolucionando. No dediques toda tu energía en
preocuparte por tu relación de pareja.
6.- Haz que tus
palabras valgan. Cumple tus promesas. Cuando digas que harás algo, hazlo. No
digas que cocinarás la cena o comprarás un regalo de cumpleaños y luego lo
olvides o directamente no lo hagas. Lo que hace esto es romper la confianza,
algo que las relaciones necesitan para fortalecerse.
7.- Admite tus errores.
Si sabes que has hecho algo que ha lastimado a tu pareja, intencionalmente o
no, reconócelo. Sé humilde y discúlpate sinceramente, sin poner excusas o
justificaciones como "Lo lamento, es que me hiciste enojar".
Es normal cometer errores durante una relación, pero rehusarte a admitir que hiciste algo mal o que lastimaste a alguien no te ayudará a mantener una relación larga y feliz. Si quieres resolver los problemas que puedan surgir y desarrollar la confianza en tu relación, ambos deberán reconocer los momentos en que cometan errores.
Nota: Acepta el conflicto. Si esperas construir una relación a largo plazo, es posible que ocasionalmente existan malos entendidos. Recuerda que una discusión no es el fin de todo y no hay persona sobre la tierra con la que estarás de acuerdo todo el tiempo.
8.- Comprométete a
cambiar tu comportamiento. Si te encuentras disculpándote una y otra vez por el
mismo error, llévalo un paso más allá. Dile a tu pareja que sabes que ese error
se repite y que quieres dejar de cometerlo. Busca ayuda y pídele también a tu
pareja que te señale cada vez que vuelvas a cometer el mismo error.
9.- Sé realista. Iniciar
una relación con la esperanza de que no haya dificultades o desafíos no es realista.
La pasión temprana y la sensación de enamoramiento pueden desvanecerse, pero,
con tiempo y esfuerzo, podrás forjar una relación más profunda y significativa.
En todas las relaciones
hay discusiones y hay días en los que quedarse en la relación no es la opción
más fácil. Pero lo que hace a una relación saludable es elegir enfrentar los
problemas y resolverlos para atravesar esos momentos difíciles, en vez de dejar
que esos malentendidos se transformen en algo más grave.
10.- Reevalúa tus
expectativas. ¿Ves a tu pareja como una persona con sus virtudes y defectos o
como alguien que debería ser perfecta? Si tus expectativas son tan exageradas
que nadie podría cumplirlas al ciento por ciento todo el tiempo, estás llevando
tu relación hacia el fracaso.
También relaja tus
expectativas. Si esperas que tu pareja haga algo, díselo. No esperes que lea tu
mente y no transmitas tus mensajes encriptados. Ser claro acerca de lo que
quieres le da a tu pareja la oportunidad de tener éxito. (en lugar de decir
"Debes sacar la basura a la calle todos los días", dile "Me encantaría
que sacaras la basura a la calle todos los días").
11.- Pregúntate si
estarías mejor en una relación o solo. Si no piensas que estás mejor en la
relación, entonces es hora de sentarte a charlar con tu pareja seriamente. En
una relación donde hay amor, esta pregunta siempre se responde con un
"Sí".
12.- Escucha a tu
pareja. A veces, tu pareja puede necesitar que le prestes un oído y puedas comprender
sus problemas. Otras veces, tu pareja necesitará que le aconsejes algo. Debes
saber qué es lo que está buscando y dale lo que necesita. Ser bueno escuchando
consiste en prestar atención a lo que el otro dice.
Escuchar a tu pareja
potenciará tu relación de muchas formas. Te ayudará a resolver diferencias sin
discutir, a descubrir mejor la personalidad de tu pareja y saber qué comprarle
para las fiestas. No hay contraindicaciones a la hora de escuchar.
Hazle sentir a tu
pareja que puede contarte lo que está sintiendo. Recompensa su confianza
empatizando con ella. No necesitas decir mucho, simplemente escucharla.
13.- Todas las
relaciones buenas están basadas en el respeto mutuo. Si no sientes respeto por
su pareja, o crees que tu pareja está perdiéndole el respeto, piensa en formas
de reconstruirlo de inmediato. El respeto es clave. Si hay respeto recíproco,
nada puede salir mal. Debes aprender a respetar a la otra persona y este
aprendizaje a veces lleva algo de tiempo, pero si se aman llegará.
Los celos excesivos y
la desconfianza son dos grandes enemigos de las relaciones de pareja
saludables. La confianza se gana y si estamos junto a alguien que no la merece
lo mejor es acabar con la relación antes de minar nuestra seguridad y
autoestima, lo que nos conducirá a nunca conseguir mantener una unión
equilibrada.
14.- Expresa tus
sentimientos con respecto a tu pareja. Recuérdale cuánto te significa y todo lo
que representa para ti. Tanto los hombres como las mujeres necesitan
demostraciones de amor y afecto. Demuestra tu cariño de cualquier forma que
puedas. No existen diferencias entre saber que te aman y sentir que te aman. A
veces nos apoyamos en el hecho de que nuestra pareja debe saber que los amamos
incluso cuando no lo demostramos. No dependas demasiado en esto. Las mejores
relaciones utilizan el cariño para demostrar amor.
No temas demostrar
afecto físico de vez en cuando. Las relaciones donde hay amor están hechas de
besos, abrazos y cariño que se demuestra con pequeños gestos.
15.- Haz algo para tu
pareja que valorará. Ya sea que implique levantarse temprano para cortar el
césped, llevar a los chicos a la escuela o preparar el desayuno, los pequeños
gestos son los que más dicen. Demuéstrale a tu pareja que te importa al hacer
algo considerado sin que te lo pida.
Haz cosas inesperadas. Dedica
un pequeño esfuerzo a hacerlo para ver las recompensas.
16.- Sé leal. Asegúrate
de que tu pareja sepa que estarás siempre para lo que necesite. En la medida de
lo posible, ponla por delante de cualquier otra cosa. Esto no significa que
solo debes tener ojos para ella o no hablar con nadie más, pero debe saber que
puede contar contigo siempre que te necesite. De igual manera, puedes esperar
lo mismo de ella. También te mereces ser apreciado en la relación.
17.- Honestidad. La
honestidad va de la mano de la confianza, porque es difícil confiar en alguien
cuando tú no actúas con honestidad.
No le ocultes “nada” a
tu pareja, especialmente tus sentimientos con respecto a ella y su relación,
sea algo bueno o malo. De esta manera podrán superar todas las dificultades y
desafíos juntos. Si cargas con alguna mala experiencia que sigue te sigue
afectando en el presente, ella debe saberlo. Las personas que son
honestas mutuamente tienen más probabilidades de disfrutar una relación
duradera y feliz. La desconfianza que suele surgir de la deshonestidad puede
poner en grave peligro a tu relación.
18.- La importancia de
la tolerancia y la paciencia: No hay nada más desgastante para una relación que
el constante deseo de una de las partes por hacer que el otro cambie. Los
cambios en una relación se producen solo cuando se desea hacerlo genuinamente y
aunque no es tarea sencilla tolerar los defectos de nuestra pareja es necesario
hacerlo de forma paciente. Resulta muy importante aceptar al otro como es y
respirar profundo antes de crear una tormenta en un vaso de agua con pequeños
problemas que no lo merecen.
Ten en cuenta que tu
pareja y tú podrían expresar el amor de manera distinta. Las personas
demuestran su afecto y amor de manera diferente, y tener eso en cuenta puede
ayudarte a establecer una relación más feliz y saludable.
Nota: Esfuérzate por
resolver las diferencias al crear situaciones en las que ambos ganen en lugar
de aquellas donde solo haya un vencedor. Estas últimas no les ayudarán a tener
una relación larga y feliz.
19.- Dale a tu pareja
su propio espacio. Cada uno necesita privacidad y libertad, por lo que es mejor
no estar pendiente de todo lo que hace. A nadie le gusta sentirse observado ni
controlado.
No espíes a tu pareja
(revisar su teléfono, asediarla en las redes sociales, seguirla por la calle,
etc.). Si te está engañando, lo descubrirás. Estas cosas no se pueden mantener
en secreto mucho tiempo. Sin embargo, si la espías y es inocente, perderás su
confianza y su respeto por siempre.
20.- Si tienes un
problema, cuéntaselo, preferentemente con calma y sin gritar. Si tu pareja
pregunta "¿Estás bien?" y respondes "Sí", no esperes que
entienda que lo que quisiste decir fue "No". Sé honesto.
21.- Una relación
sólida debe estar basada en el respeto mutuo. Si constantemente intentas
someter a tu pareja, eso significa que no la respetas lo suficiente para querer
su felicidad. Si te sientes deprimido, acude a un médico o con un colega, no
metas a tu pareja en tus problemas.
22.- Dale ánimo a tu
pareja para que le vaya mejor en el trabajo o en el estudio. Esto le hará notar
cuánto te importa su futuro y que realmente te interesa que se convierta en la
mejor en lo que hace. El saber que cuenta con tu apoyo incondicional también
hará que sus sentimientos hacia ti se vuelvan más fuertes.
23.- Revivan las citas
del comienzo. Hacer una salida especial, incluso cuando llevan años de
relación, es muy importante. De hecho, es fundamental que las parejas que
llevan mucho tiempo juntas se sientan cómodas con el paso del tiempo. Intenten
planear una salida por lo menos una vez al mes. Algunas parejas hacen una
salida cada semana.
Pasar el tiempo junto
frecuentemente sin la interrupción de los niños, las mascotas, los padres o el
trabajo puede ayudar a conectarlos y a formar un vínculo mutuo.
Acuerden invertir
tiempo, energía y esfuerzo en la relación. Para cultivar una relación larga y
feliz, es necesario que ambas personas inviertan tiempo, energía y esfuerzo.
Si tienen problemas
para pensar buenas ideas, intenta recrear una cita que hayan tenido cuando
estaban conociéndose. Hagan exactamente lo mismo, o reinventa la salida de una
manera significativa. Hagan algo nuevo y emocionante
24.- Aprende a
perdonar. Perdonar es la decisión de dejar ir el pasado y concentrarse en el
presente. Consiste en tomar el control de tu realidad actual y vivirla junto a
tu pareja.
Recuerda a quién
realmente beneficia el perdonar. Perdonar a tu pareja también te libera a ti de
cargar con enojo y resentimiento. No lo veas como algo altruista: es algo que
haces para ambos.
Nota: Guardar rencores
y rehusarte a olvidar las heridas del pasado hará que tanto tú pareja como tú
sean infelices. Si bien puede ser difícil aprender a perdonar, hacerlo dará
lugar a una relación duradera y saludable
25.- Ríanse junto. En
una relación, los desafíos son inevitables, pero tener la capacidad para
mantener un sentido del humor y reír con tu pareja les ayudará a superar las
dificultades. Ríanse del otro con la seguridad del amor. La risa ayuda a que el
mundo siga girando. La risa ayuda a tu cuerpo a quemar calorías, acelera la
circulación sanguínea, fortalece el sistema inmune y disminuye los niveles de
azúcar en la sangre. La risa puede ser reconfortante, contagiosa o afrodisíaca.
No olviden reír.
26.- Brinden apoyo
mutuo. Dar apoyo significa hacer de la felicidad y el bienestar de tu pareja tu
prioridad en las grandes cosas tanto como en las pequeñas. Ten en cuenta que
una de las razones principales por la que están juntos es que sienten una
especie de fanatismo por el otro. Demuéstralo de alguna de las siguientes
formas:
- Sé bueno escuchando. Si tu pareja necesita que le prestes un oído, hazlo con ánimo. No siempre debes brindarle una solución, muchas veces basta con tu apoyo.
- Dense ánimo. Si tu pareja está tratando de hacer un cambio positivo, sé su mayor animador.
- Ofrécele un lugar seguro. Permite que tu pareja se abra frente a ti sin temer sentirse juzgada.
- Sean generosos el uno con el otro.
27.- Dediquen tiempo al
otro. Haz que compartir tiempo con tu pareja sea una prioridad, incluso si al
principio resulta un poco difícil de articular. Las relaciones necesitan de
experiencias compartidas para crecer y pasando tiempo junto cuidan su relación
de una de las mejores formas posibles.
Busquen un pasatiempo.
Aprender algo junto les hará crecer a la par, además de ayudarles a descubrir
una actividad que ambos disfrutan. Prueba con deportes, aprender un nuevo
idioma, clases de cocina, baile o cualquier otra cosa que deseen probar.
Encuentra pequeñas
formas de servirle al otro. Hacerle pequeños favores a tu pareja demuestra que
estás atento a lo que ella necesita y que deseas ayudarle. No lo tomes como una molestia ni esperes automáticamente nada a
cambio.
Nota: Tómate un tiempo
para ti. Si bien es importante pasar un tiempo de calidad juntos, tomarte un
tiempo para ti también te ayudará a mantener una relación larga y feliz.
Cualquiera puede irritar a otra persona después de un tiempo, y pasar un rato
alejados o tomarte un tiempo para estar a solas generalmente te permitirá
apreciar aún más a tu pareja.
28.- Desarrolla una
mejor comunicación. La mayoría de las personas no nacen como buenos
comunicadores, es algo en lo que prácticamente todos debemos trabajar. La forma
en que te comunicas con tu pareja puede parecer insignificante, pero lo haces
varias veces al día y tiene un impacto. Considera mejorar estos detalles:
No utilices
imperativos. Intenta dejar fuera de tu relación frases como
"deberías" o "no puedes". Tú y tu pareja son iguales y
ninguno de los dos tiene autoridad sobre el otro.
Di "por
favor" y "gracias". Debes ser capaz de relajarte y dejar de
preocuparte por tus modales todo el tiempo, pero la excepción llega a la hora
de pedir favores y expresar gratitud cuando tu pareja hace algo por ti. No
asumas que ella sabe lo que quisiste decir y no dijiste.
Sé justo. No dejes que
todos estos consejos para comunicarse bien caigan por la borda durante una
discusión. Intenta dejar en claro tu posición de manera amable y respetuosa,
sin querer lastimar a tu pareja al hacerlo. Si ella grita o insulta, pídele con
tranquilidad que se calme.
La mala comunicación
les impedirá a tu pareja y a ti tener una relación larga y feliz. La
comunicación eficaz les ayudará a asegurarse de estar en la misma página y de
confiar mutuamente.
Nota: No intentes ganar
una discusión. En ocasiones, las personas entablan una discusión con la idea de
que necesitan “ganar” y demostrar que están en “lo correcto”. No obstante, esta
actitud limita seriamente tu capacidad para resolver los problemas que tienen.
29.- Desarrolla la
amistad. Si esperas tener una relación duradera y feliz, enfócate en
desarrollar la amistad con tu pareja. Los expertos han revelado que las parejas
que mantienen una amistad son más felices y tienen más probabilidades de
permanecer juntas. Dedica el tiempo a cultivar los intereses en común, pero
también mantén tu disposición a explorar los diferentes intereses.
30.- No permitas que los
demás interfieran en tu relación. Los suegros infelices, los padres
autoritarios y los amigos mandones o abandonados pueden causar estragos en la relación que
ambos tienen. Trabajen en conjunto para mantener al mínimo la interferencia
negativa.
Conclusión ¿Vas a esperar a sentirlo para
empezar a hacerlo o vas a empezar a hacerlo para acabar sintiéndolo?.
Advertencias: Si las reacciones de tu
pareja están comenzando asustarte, o deliberadamente te agrede (física o
emocionalmente), busca ayuda inmediatamente. Ese tipo de comportamiento no es
algo de lo que debas hacerte cargo. En una relación sana, sus integrantes
trabajan juntos para hacer al otro feliz. No debes orientar tus esfuerzos a
evitar que tu pareja te haga sentir miserable.
Quiérete,
sé feliz, cuídate y respétate.
Referencias
http://www.webmd.com/balance/features/give-your-body-boost-with-laughter
www.wikihow.com