Cuadro clínico
La persona
"border" se caracteriza por narcisismo, hipersensibilidad al rechazo
y al abandono, sentimientos de inferioridad, relaciones infantiles que
afectaron el desarrollo narcisista del sujeto (Stolorow). Es una afección mental
por la cual una persona tiene patrones prolongados de emociones turbulentas o
inestables. Estas experiencias interiores a menudo los llevan a tener acciones
impulsivas y relaciones caóticas con otras personas.
En
general este tipo de pacientes responde a los siguientes esquemas cognitivos:
- Son muy inseguros de sí mismos. Tienen una mala autoimagen.
- Tienden a abandonarse en exceso.
- Nada puede compensarles su gran vacío interior. Manifiestan casi obsesivamente deseos por una gran variedad de objetos. Una vez conseguidos ya están buscando otro nuevo objetivo a lograr.
- Son muy dependientes de las personas con las que conviven.
- La posibilidad de sufrir un abandono real o imaginario de las personas de las que dependen, o de enfrentarse a responsabilidades importantes, les puede crear situaciones de extrema tensión y violencia.
- Están en un casi constante estado de ansiedad.
- Dificultad para el estudio y la concentración.
- En ocasiones su cólera domina su conducta.
- Descontrol en la alimentación. Anorexia y/o Bulimia.
- Abuso del alcohol, drogas, etc.
- No pueden controlar sus sentimientos y emociones. Pasan de estados eufóricos a depresivos en cuestión de minutos.
- No suelen cumplir sus compromisos. Abandonan terapias, estudios, trabajos, etc.
- Son terriblemente receptivos y tienen una gran capacidad para la manipulación. En general culpan de todos sus problemas a las personas con las que conviven.
- Degradan o ensalzan a las personas muy rápidamente.
- Algunas veces sufren crisis de pánico.
- Algunos tienen una gran dificultad para retener los mensajes verbales o escritos que acaban de recibir. "Parece que no nos escuchan"....
- En muchos casos estos px han tenido muchos problemas en su niñez. Hiperactividad, agresividad, etc. Su educación y relación social y familiar ha sido muy problemática. No han podido recibir un diagnóstico claro, hasta que coincidiendo con un cambio hormonal el síndrome TLP se ha manifestado en toda su magnitud.
- En muchos casos hay antecedentes familiares por parte de alguno o ambos padres, con problemas mentales, drogas o alcoholismo.
- Ante situaciones extremas a veces buscan el suicidio. El 10% de los que lo intentan, lo consiguen.
Rasgo
al modelo psicoanalítico
- Pacientes difíciles de tratar, no encajan en categorías diagnósticas existentes. Experimentan a sus analistas como peligrosos.
- Inestabilidad del humor, de las relaciones interpersonales y de la imagen del self.
- Debilidad yoica (self desestrucurado, fracturado), vuelven a los procesos de pensamientos primarios.
- Dificultades en separarse y diferenciarse de un objeto primario. En tests de personalidad, el núcleo de los conflictos de separación se expresa en respuestas que reflejan los temas interpersonales de unión, fusión, separación e individuación.
- Funcionan adecuadamente en contextos bien estructurados y rinden insatisfactoriamente en la ausencia de estructuración.
- Organización estructural de la personalidad basada en mecanismos de defensas primitivos: Disociación/Escisión (resuelve la ambivalencia hacia el objeto o hacia el self), Denigración (denigrando al obj minimiza los deseos de que sus necesidades sean colmadas), Omnipotencia (remarca en sí mismo aspectos de poder irreal como un intento de arreglarse con el miedo a la impotencia o a la desvaloraización), Idealización (se exalta el poder de determinados objetos de una forma poco realista como una defensa para proteger al sujeto de los objetos malos), Proyección, Identificación proyectiva, Negación.
- Sus rasgos más característicos son:
- Impulsividad e impredectibilidad del comportamiento, (“conducta impulsiva autodestructiva”).
- Relaciones personales intensas e inestables.
- Relaciones Interpersonales primitivas (dependencia, madre simbiótica. Dificultad en la separación-individuación).
- Falta de control emocional, inestabilidad afectiva, se desplazan desde un humor normal hasta a la depresión, irritabilidad o ansiedad.
- Marcada alteración de la identidad.
- Sentimientos de vacío y/o aburrimiento.
- Alto potencial para actos de daño físico y conductas suicidas.
- Dificultades para controlar el estrés.
- Tendencia hacia un nivel de hostilidad y de dependencia. Presencia de rabia y cólera, confrontaciones físicas e incapacidad de tolerar la soledad (dependencia excesiva del objeto externo, que puede ser atacado).
La formación de la
organización limítrofe implica:
- Sostén vincular insuficiente.
- Situaciones traumáticas escalonadas.
- Psicosis infantil con restitución incompleta (no se produce una psicosis porque la fractura del yo hace que la parte psicótica se separe).
- Falta de control impulsivo y de la individuación.
- No resolución del complejo de Edipo.
- Fracaso en la organización de un sentimiento de identidad.
- Sexualidad infantil perversa polimorfa. Búsqueda de descarga e intolerancia a la frustración.
- Es producto de traumas infantiles, el + frecuente es abuso. (No solo sexual).
- Faltan las identificaciones profundas, simbólicas o introyectivas.
Con
respecto al tratamiento y al trastorno, Stolorow sostiene:
- Intervenciones afirmativas, de contención, de “calma”. Dependen mucho de la conducta real, humana del analista. No toleran las fallas.
- Transferencia masiva, el vínculo se vuelve real.
- Pueden lograr casarse con alguien que cumpla un rol contenedor. El pronóstico depende del “contexto vincular contenedor”.
- Siempre quieren saber si son importantes para los demás, si los quieren, si los admiran, si hacen las cosas bien.
- Base de la patología: la falla del amor de obj. primario. Necesidad de búsqueda de amor del objeto primario.
Prevalencia
Se estima que la
prevalencia del trastorno límite de la personalidad es de alrededor del 2% de
la población general, aproximadamente del 10% entre los sujetos vistos en los
centros ambulatorios de salud mental y en torno al 20% entre los pacientes
psiquiátricos ingresados.
Curso
Hay una considerable
variedad en el curso de los trastornos límite de personalidad. El patrón más
habitual es una inestabilidad crónica en el principio de la edad adulta, con
episodios de grave descontrol afectivo e impulsivo y altos niveles de
utilización de de los recursos de salud mental y general. El deterioro causado
por el trastorno y el riesgo de suicidio son mayores en los primeros años de la
edad adulta y van desapareciendo gradualmente con la edad. Durante la cuarta y
quinta décadas de la vida, la mayoría de los sujetos con este trastorno logran
una mayor estabilidad en sus relaciones y su actividad profesional.
La
causa del trastorno límite de la personalidad (TLP) se desconoce. Se cree se
relaciona con factores genéticos, familiares y sociales
Diagnóstico
diferencial
Este trastorno se
diferencia de la psicosis, en el principio de realidad y en la demanda de apego
(por sí solos no logran estabilidad, solo si se han apegado a alguien). Los
comportamientos psicóticos no le permiten el desarrollo de apego, un elemento
necesario para fomentar la dependencia.
Este trastorno se
distingue del trastorno narcisista, pues esta última es una estructura más
estable: mejor funcionamiento cognitivo perceptual, niveles más elevados de
representación de objeto, menor identificación proyectiva y disociación. También de los sig. tras.
- Trastornos del estado de ánimo
- Trastorno por estrés postraumático
- Trastornos de pánico y ansiedad
- Abuso de sustancias
- Trastornos de la alimentación
- Trastorno obsesivo-Compulsivo
- Trastorno por déficit de atención
O a otros trastornos de
personalidad (esquizotípica, histriónico, dependiente...). En algunos casos se
deberán diagnosticar los dos trastornos si se cumplen los criterios necesarios
pero en otros casos se deberá hacer un buen diagnóstico diferencial con
respecto a los trastornos más parecidos porque esto tendrá efectos a la hora de
aplicar el tratamiento adecuado, tanto psicoterapéutico como farmacológico. Hay
que tener en cuenta que muchos de los síntomas propios de este Trastorno se
solapan con los de los Trastornos arriba citados pero adquieren características
diferentes cuando están encuadrados dentro del Trastorno base de personalidad. Ej.
Un borderline que además es adicto a las drogas presenta otras características
que un drogadicto; así como un depresivo se diferencia de un borderline que
presenta sintomatología depresiva. En ambos casos se requerirá un tratamiento
diferenciado, incluso a nivel de medicación.
Observación:
Actualmente en consultas de medicina general, servicios de urgencias de los
hospitales y clínicas privadas de psicología acuden personas desesperadas o
familiares que acuden buscando una
solución a un caos que no saben cómo manejar. En muchos casos se trata de
personas con un amplio historial médico de ingresos hospitalarios con síntomas
de ansiedad y crisis de pánico, así como intentos de suicidio o numerosas
autolesiones hechas por cortes o quemaduras. La causa por la que piden ayuda
puede ser en ocasiones trastornos de la conducta alimenticia (anorexia,
bulimia) o problemas de drogas (abuso del alcohol u otras drogas), depresión y
trastorno bipolar. En otras ocasiones son ingresados de urgencia y diagnosticados erróneamente, ej tras por adaptación
por su malestar tras una ruptura de pareja ante el clínico. En todas estas
ocasiones pueden ser medicados con
ansiolíticos y antidepresivo dado el cuadro que presentan, o también puede ser tratado
en unidades para trastornos de la alimentación con un trastorno de la conducta
alimentaria. Todas estas soluciones no hacen otra cosa que propiciar un círculo
vicioso en el que la persona se enreda una y otra vez. Las personas con un
trastorno límite de la personalidad pueden pasar años en manos de diferentes
profesionales, a veces participando en terapias de grupo donde parecen “encajar
bien” (téngase en cuenta el mimetismo de las personas con TLP, es decir, es
fácil que se identifique con las pacientes anoréxicas o con personas con un
trastorno bipolar dado que pueden compartir síntomas con estos y sobre todo
porque prefieren “ser anoréxicas a no ser nada”). El tema se complica cuando
desde la medicina general se le prescriben fármacos ansiolítico o antidepresivos
para el cuadro que presentan. Ninguna medida parece terminar con el problema, y
en un corto espacio de tiempo vuelven los problemas desesperanzando más aún a
la persona y a quien la rodea. Los medios de comunicación tampoco favorecen a
solucionar el problema, la falta de información sobre los trastornos de la
personalidad son obvios. Si la solución que nos planteamos es la búsqueda de
apoyo psicológico, también se corre un riesgo: que el terapeuta no conozca la
problemática, e igualmente trabaje cuestiones como el problema de juego, la
depresión, etc pero no realice un buen diagnóstico del TL.
Fuentes
http://psicologosoviedo.com/problemas-que-tratamos/trastornos/hacer-trastorno-limitehttp://usuarios.discapnet.es/border/tlpdiag.html
https://www.trastornolimite.com/tlp/test-trastorno-limite-de-la-personalidad-tlp