La ansiedad también puede manifestarse como un mecanismo de defensa del cuerpo para estar alerta frente a amenazas externas; pero es importante mantener la calma y el autocontrol.
1. Practica la
respiración profunda, pausada y consciente
Cuenta hasta 4 mientras
el aire llena tus pulmones y cuenta hasta 4 mientras sacas el aire. Haz series
de 3 respiraciones (en la última respiración retén el aire por 3 segundos antes
de exhalar).
2. Habla sobre lo
sucedido
No calles tu dolor.
Expresa tus preocupaciones y miedos. Pinta, canta, baila, escribe tu dolor.
3. Vuelve a tu rutina
Vuelve a tu rutina de
siempre porque te aporta seguridad o crea una nueva y apégate a ella; sé
disciplinada/o (necesitas sentir que hay áreas estables en tu vida).
4. Descansa
Duerme cuando te
sientas cansada/o), hidrátate, lleva una dieta adecuada y haz ejercicio. Sé
constante, inclúyelo en tu rutina diaria. Trata bien a tu cuerpo para que se
recupere pronto.
5. Prepara un protocolo
de seguridad
Identifica los puntos
estratégicos protegidos en caso de emergencia, conversa con las personas que
viven contigo sobre lo que hay que hacer y qué pasos seguir en caso de
emergencia.
6. Maleta de emergencia
Prepara y ten a la mano
una maleta de emergencia (que incluya lámpara de pilas, pilas, manta ligera,
barras energéticas / chocolate, botellas de agua, duplicado de las llaves de tu
casa y auto, radio de pilas, bolsas plásticas, cerillos y velas, documentos
personales de los miembros de la familia y casa, una muda de ropa abrigadora,
alcohol sanitizante, un botiquín básico de primeros auxilios).
7. Tus contactos
Actualiza y ten en un
lugar seguro la información de tus contactos de emergencia, así podrás
localizar fácilmente a tus seres queridos y personas importantes.
8. Deja las sustancias
estimulantes
Evita consumir drogas y
abusar de sustancias que produzcan estados alterados de consciencia. El exceso
de café o de cigarrillos puede alterarte mucho.
9. Abraza a tus seres
queridos
¡Abraza! Hazlo durante
14 segundos, panza con panza, mientras respiras profundamente y de preferencia
en silencio.
10. Aprende a meditar
Medita diariamente; de
ser posible una vez por la mañana y otra por la noche, antes de dormir.
Actualmente hay apps que te ayudan a meditar de forma guiada y sencilla, todas
disponibles en celulares y muchas gratuitas.
Sentir ansiedad en
momentos de crisis personal o de problemas en el entorno es una manera de
ajuste del cuerpo para procesar la amenaza percibida y mantenerse a salvo. No
creas que haya algo mal en ti, acéptalo como parte de la resolución natural a
una situación que se salió de control en su momento y ayuda a tu mente, cuerpo
y emociones para no extender el proceso más tiempo del necesario con las
herramientas mencionadas en este artículo.
Por supuesto, si
consideras que tus reacciones son muy intensas, están fuera de control o se han
extendido por más tiempo del razonable, pide ayuda, acude a un profesional de
la salud emocional experto en el tema.