Mojar la cama puede ser
estresante a cualquier edad. Pero ¿qué pasa si eres un joven adulto que se lo
oculta a sus amigos?
En la adolescencia,
solo el 4 por ciento de los chicos y el 2 por ciento de las chicas mojan la
cama; la cifra disminuye al 1.5 por ciento y 0.5 por ciento a los dieciocho
años. Así que puede apreciar cuán alarmante es ser uno de esos adolescentes que
aún experimentan incontinencia urinaria en la noche. En la mayoría de los casos
la falta de control de la vejiga ha sido un problema desde el nacimiento, a
diferencia de que haya vuelto a surgir después de los seis meses o más de
continencia. La primera condición se llama enuresis primaria nocturna; la
segunda, enuresis secundaria nocturna.
En la enuresis
voluntaria, se da un comportamiento muy diferente al niño/joven que se orina
sin darse cuenta, ya que lo hace de manera voluntaria, no padece un problema de
eliminación teniendo lugar un exceso de conducta y estaría ligada a
desobediencia u oposición. Y en el segundo caso, en la enuresis involuntaria,
estaríamos en un déficit de habilidades, relacionada más con factores
fisiológicos y de aprendizaje. Por tanto es importante especificar el concepto
de enuresis ya como un acto voluntario o involuntario, para establecer los
criterios de diagnóstico y de investigación de los trastornos mentales y de comportamiento.
Además de ello, es conveniente indicar el tipo de enuresis al que nos referimos
Cómo se evalúa la
incontinencia
La causa para la
enuresis nocturna depende de muchos factores. Los factores que contribuyen
pueden incluir mal control alimenticio con excesivo consumo de cafeína, un
patrón de sueño profundo que puede ser parte del desarrollo normal del
adolescente, horario inconsistente de sueño y horas limitadas de sueño. Otros
factores que influyen pueden ser:
- Medicamentos
- Problemas hormonales
- Problemas de sueño
- Problemas en la vejiga
- Cafeína
- Infecciones de las vías
urinarias
- Diabetes y otros
problemas médicos crónicos
- Historial familiar (Genética)
- Problemas psicológicos
- Estrés social
- Consecuencia de abuso
sexual
La enuresis primaria
nocturna a menudo sigue un patrón similar. Es útil identificar la edad de la
continencia nocturna de ambos padres. Si uno de los padres fue incontinente
hasta cierta edad, sus hijos pueden tener un problema similar aproximadamente
40 por ciento de las veces. Si ambos padres tuvieron enuresis primaria nocturna
hasta cierta edad, sus hijos pueden tener un 70 por ciento de probabilidad de
seguir un patrón similar. La enuresis secundaria en niños mayores o en
adolescentes debe sugerir una revisión para determinar si hay infecciones de
las vías urinarias, enfermedades médicas importantes, factores de estrés social
y el potencial de abuso sexual.
Los médicos no saben
exactamente por qué, pero la enuresis afecta al doble de niños y chicos que de
niñas y chicas. Se suele dar junto con el trastorno por déficit de atención con
hiperactividad (TDAH).
Qué pueden hacer los
padres para manejar la incontinencia nocturna en adolescentes?
Es muy probable que un
adolescente con enuresis nocturna no sufra esta afección para siempre. "La
mayoría de los adolescentes 'superan' naturalmente la incontinencia nocturna
(también conocida como mojar la cama) y solo un porcentaje muy pequeño sigue
teniendo problemas en edades posteriores", Pero, entretanto, la autoestima
de tu hijo está en juego; mientras más tiempo tenga que lidiar con la vergüenza
de mojar la cama durante la noche, es más probable que comience a sentirse mal
consigo mismo. Ponte en contacto con un médico tan pronto como tu hijo te
cuente sobre el problema. Es importante que los
padres ayuden al adolescente con este problema para que lo acepte y entonces
pueda resolverlo, ya que seguramente se sentirá avergonzado y esto altera sus
relaciones sociales. Nunca los padres deben
reprocharles o gritarles a sus hijos por este problema ya que es una afección
que no pueden controlar y necesitan ayuda médica para poder superarlo.
¿Cómo se puede ayudar a
un adolescente?
Si eres un adolescente
que moja la cama, primero asegúrate de hablar con alguien sobre eso. Puede ser
difícil revelarlo, pero no eres la única persona de tu edad que experimenta la
incontinencia nocturna.
En primer lugar,
intenta pedirles ayuda a tus padres: hay muchos niños que mojan la cama cuyos
padres tuvieron el mismo problema en su infancia, por lo que tu mamá o tu papá
puede haber pasado por lo mismo cuando tenía tu edad. Aunque no tengan un
historial de incontinencia nocturna, un padre u otro adulto de confianza estará
más preocupado por ayudarte que por hacerte sentir cohibido.
Guardarte el problema
impide que obtengas atención médica si es necesaria (la causa puede ser algo
tan simple como una infección urinaria). Además, si un médico no puede
encontrar un motivo físico para tu afección, puede darte consejos sobre cómo
superar la incontinencia nocturna.
Nota: Si sientes que no
puedes compartir tu "secreto" con tus amigos o tienes miedo de que
ellos se sientan incómodos con tu afección, habla con tu médico y tus padres
sobre estrategias que ayudan a evitar la incontinencia nocturna. Evita tomar
bebidas con cafeína antes de acostarte y no te olvides de orinar varias veces
antes de irte a dormir. "No le des tanta importancia a mojar la cama" "Enséñale a tu adolescente a cambiar las sábanas y a lavar una carga de ropa". Se aconseja a los padres que se guarden el problema para sí mismos. "Compartir este problema con otros miembros de la familia o con los amigos solo servirá para avergonzar a tu adolescente."
¿Cómo se diagnostica la
enuresis?
Si tienes problemas
para controlar la orina por la noche, habla con tu médico para aprender sobre
la enuresis nocturna y para descartar posibles problemas médicos.
Aparte de hacerte una exploración
física, el médico te hará preguntas sobre lo que te preocupa, los síntomas que
tienes, tus antecedentes médicos y los de tu familia, los medicamentos que
estás tomando y si tienes alergias u otras afecciones. Esto es lo que se conoce
como tu historial médico. Es posible que el médico te pregunte por tus patrones
de sueño, tus hábitos intestinales y tus síntomas urinarios (como la necesidad
urgente de hacer pis o el dolor o ardor al orinar). También es posible que tu
médico hable contigo sobre cualquier situación estresante que pueda estar
contribuyendo al problema.
La evaluación incluirá
probablemente un análisis de orina y un cultivo de orina. En estos análisis, se
examina la orina para detectar posibles signos de enfermedades. En la mayoría
de las personas con enuresis nocturna, estos análisis son completamente
normales.
Cómo se trata la
incontinencia nocturna
El tratamiento de la
enuresis nocturna se basa en diferenciar la enuresis primaria de la enuresis
secundaria nocturna. Cualquier factor que cause una enuresis secundaria
nocturna se debe resolver antes de concentrarse en el evento enurético. Un niño/joven
que participa activamente en su tratamiento tiene más probabilidades de mejorar
su resultado.
Enfoque práctico
Primero es importante
educar al niño o joven y a la familia sobre una ingesta alimenticia adecuada.
Aunque la restricción total de líquidos no es práctica, es esencial eliminar
productos con cafeína y es adecuado recomendar la moderación en el consumo. El
niño debe utilizar el baño rutinariamente antes de irse a la cama e
inmediatamente después de despertar en la mañana. Puede despertar al
adolescente una vez durante la noche para que orine si fuera necesario, pero
despertarlo más de una vez en la noche puede alterar su patrón de sueño, lo que
puede causar una disminución en el rendimiento escolar del siguiente día.
Modificación del
comportamiento
La modificación del
comportamiento mediante el uso de una alarma enurética es efectiva en
aproximadamente el 70 por ciento de los niños motivados. El dispositivo
contiene sensores sensibles a la humedad que causan un zumbido o una vibración.
Esta forma de terapia requiere la participación activa de un adulto y el
compromiso a largo plazo. La clínica debe proporcionar un fuerte apoyo durante el
seguimiento.
Medicamentos
Sólo existen dos
medicamentos aprobados para la enuresis nocturna: la imipramina y la
desmopresina. La acción exacta de la imipramina no se comprende completamente,
pero se ha demostrado su eficiencia en aproximadamente 50 por ciento de los
niños enuréticos. La dosis de la imipramina es un poco arbitraria y se debe
advertir a la familia sobre la posible toxicidad por sobredosis del
medicamento. Se recomienda un ECG de línea de base antes de iniciar la terapia
aunque no se han reportado efectos secundarios del corazón con las dosis
utilizadas para tratar orinarse en la cama. Además, la familia debe mantener
control estricto de la administración del medicamento debido al potencial de
una sobredosis.
La desmopresina (DDAVP)
es una hormona antidiurética sintética (ADH). Su mecanismo de acción es similar
a la ADH y es efectiva para mejorar la enuresis nocturna en aproximadamente 40
a 60 por ciento de los niños. La DDAVP está disponible en aerosol nasal y en
píldoras. Cuando se utiliza a largo plazo, el gasto puede ser un problema.
Fuente: Red