miércoles, 9 de mayo de 2012

La Pareja y sus Parametros

Hola Gracias a la sugerencia de la Srita Sonia R. para hacer un blog sobre la relacion de pareja y sus parametros le escribo este trabajo con un anexo de un texto publicado en la red.  
La convivencia no mata el amor. Pero ciertos parámetros relacionados con el compartir la vida bajo el mismo techo puede dejarlo agonizando. Por eso, hay que estar atentos para que no se activen las cosas negativas que destruyen y desgastan la relacion.
Algunas claves son:

1.- La rutina. ¿Hay algo más aburrido que hacer o recibir siempre exactamente lo mismo? Esto nos acostumbra a no tener sorpresas ni a que suceda nada fuera de lo común, lo que puede generar que nos hartemos o, aún peor, que alguna cosa (o persona) diferente fuera de casa nos parezca un estímulo interesante.

2.- La poca tolerancia. Ampliar los márgenes de tolerancia genera relaciones más duraderas y placenteras. No tienen que aguantar cualquier cosa, sino ponerse en el lugar del otro, entender qué desea o necesita (aunque no se trate de algo que se nos podría haber ocurrido) y acompañar el proceso o dejarlo ser.


3.- La falta de respeto. No son solamente las palabras o acciones fuera de lugar, sino también no permitir que nuestra pareja sea quien es y ocupe el lugar que desea en la vida. Cercenar espacios o posibilidades no aporta a la unidad de la pareja, por el contrario, provoca resentimientos que se van agrandando con el correr del tiempo. Esto también se aplica al revés, si permitís que te limiten a niveles molestos o decididamente intolerables, esto mata al amor, vivan o no bajo el mismo techo.


4.- El ser posesivo (a). Estar siempre pendiente de qué hace o deja de hacer quien acompaña nuestros días, tener celos desmedidos, revisar sus objetos personales (mails y celulares incluidos) son ideas muy poco prolíficas. Una cosa es vivir juntos y, otra muy diferente, invadir la intimidad del otro. Si sufrís de falta de confianza, dedicate a solucionar tus problemas intrapersonales antes de crear una situación desagradable sólo para exteriorizar tu inseguridad interna.

5.- La poca ayuda. Que el peso de todas las responsabilidades de la casa (hijos incluidos) recaiga en una sola persona (en la amplia mayoría de los casos, las mujeres) suele ser un punto de fricción enorme, en especial, cuando ambos trabajan fuera del hogar. El compañerismo es la base más sólida para que una pareja funcione sobre rieles.


Las mujeres tienden a ser pragmáticas y los hombres a ser eróticos. Ellas escogen a su pareja buscando seguridad y estabilidad económica. Por su parte, los hombres tienden a ser sensuales y siempre tienen una idea de las características físicas que desean de su compañera. En ambos casos, al conocer a la persona que se ajuste a su imagen mental, buscarán involucrarse rápidamente. Pero muchas veces hay actitudes que pueden generar incomodidades y actuar de manera poco positiva para el bienestar de ambos. Consejos para identificar estos parámetros y frenarlos a tiempo.
De esta manera se puede observar que las mujeres seleccionan a su pareja de acuerdo a la estabilidad que pueda ofrecerle, tanto a ella como a sus hijos. Los hombres prefieren atributos carnales y fisonómicos.
La hembra humana mantiene relaciones sexuales cuando no está "en celo". Las hembras de la mayoría de las especies animales, solamente tienen relaciones sexuales para procrear. La mujer en tiempos remotos necesitaba que el hombre le acompañara a ella y a sus "cachorros" para sobrevivir el les proporcionaba protección, seguridad y alimentos. Entonces se las ideó para conservar al hombre a su lado. Así, sostuvo las relaciones sexuales más allá del celo y del mandato de procreación y conservación de las especies.

El hombre, con su carga genética ordenándole sembrar la especie, pero teniendo que pelear y arriesgar su vida por cada mujer en celo, prefirió mantenerse al lado de quien le proporcionaba amor y cuidado, amén del sexo, sin tener que fajarse cada vez.
En tiempos modernos, la mujer sigue buscando en primer lugar un buen proveedor, seguridad y alimentos para sus "cachorros", y el hombre procurará buenos genes para su prole que seguramente estarán presentes en las mujeres con juventud, fortaleza y simetría que muestren genes fuertes.
Para el hombre buscar proporción en los senos, las nalgas o los cachetes femeninos no será mayor problema, sin embargo para la mujer ¿Cómo podría responder quién es más el fuerte: un millonario o un fortachón musculoso?
La seguridad, la protección y los alimentos, en la vida presente, no los dan los músculos como en la prehistoria, ni las habilidades para cazar o pescar, sino los recursos que disponga.
Es bueno destacar que surgen otras concepciones que indican que la mujer comenzó a tener sexo con los hombres, aunque no fuera para concebir, simplemente porque le gustó y dado que el ser humano piensa y crea, a diferencia de los animales, pues decidió hacerlo.
Lo cierto es que entre las alteraciones bioquímicas que provoca el enamoramiento, la selección y escogencia siguiendo patrones genéticos y los métodos de clasificación y preferencia, el amor, sin lugar a dudas, es algo más que asuntos del corazón.
¿Cómo te gustaría que fuera tu pareja?
Cada persona es única en sus elecciones y cada pareja en general también decide a qué tipo de pareja desea unirse. No existe una receta de cocina al respecto pero en lo que se conoce como “deseabilidad social”, todo mundo cuando realmente tiene la intención de tener una pareja se porta verdaderamente amable. La deseabilidad social  hace que mostremos nuestra mejor cara a la persona amada e incluso somos muy comprensivos y cooperativos.

En este universo nada está suelto, a nivel de nuestro cerebro en la deseabilidad social, también se empieza a producir una sustancia que se llama feniletilamina , es químicamente un neurotransmisor, que nos hace muy colaboradores  e inhibe el hambre. No solo se mezclan elementos psicológicos sino algunos mitos o falsas creencias relacionadas con la pareja, mismos que a fuerza de repetirse se convierten en una realidad que enturbia las relaciones y terminan convirtiéndose en verdad. Van desde: la vida en común, la sexualidad, el amor, la convivencia con los hijos, etcétera. 

No existe un solo resquicio de nuestras vidas (el dinero, el amor, el cuidado de los hijos, las relaciones sexuales, la distribución de las tareas cotidianas del hogar, las vacaciones, etc.) en donde los mitos estén ausentes, y desafortunadamente nuestra propia ignorancia los fortalece aún más. Algunos ejemplos de ellos: “Si nuestro amor es verdadero, el sexo entre nosotros será siempre maravilloso”, “Yo seré el/la mejor amante que jamás hayas tenido”, “El amor en la pareja lo puede y lo perdona todo”,  “Si no siento celos en mi relación de pareja, es que no amo de verdad a esa persona”,  “La dureza es uno de los rasgos masculinos de mayor valor”, “Los hombres no lloran”.
El mito  de la media naranja
Encontrar verdaderamente a la media naranja, es también un mito y trae consecuencias más negativas que positivas.  Por un lado, al encontrar una media mitad supone que nosotros estamos incompletos y necesitamos de alguien más para ser feliz, esto es, somos seres incompletos y es responsabilidad de la pareja cubrir nuestras expectativas, así es labor del otro completarnos.  Por el otro lado, si nuestra pareja está incompleta nosotros seremos los responsables de hacerle feliz.  Sumando esfuerzos de esta manera somos seres incompletos y la pareja terminará haciéndonos más incompletos aún.
Todo mundo tenemos la pareja que buscamos
Esta afirmación puede ser muy categórica y terrible sobretodo cuando emocionalmente nos sale muy costoso estar conviviendo con alguien en el terreno: sexual, psicológico, social, económico, espiritual, familiar, y más. Pero la vida es de elecciones y muchas veces elegimos quejarnos constantemente por no tener la pareja que tenemos.  De hecho los problemas en la vida tienen un formato muy simple. ¿Piensa en aquellas cosas que para ti en la relación de pareja son un problema?. Ahora voy a adivinar ¿por qué los tienes?. Estos se deben a que “no queremos perder lo que tenemos” o “anhelamos aquellas cosas que no tenemos”.
¿Por qué en ocasiones nos quejamos de no tener a la pareja que deseamos?
El origen de este vacío tiene relación con:

  • Los aprendizajes de nuestra familia de origen, los modelos aprendidos en la propia familia.
  • Nuestras propias carencias afectivas de personalidad.
  • En ser incapaz una vez que estamos en pareja de pensar en pareja predominando el egoísmo de uno de los miembros.
  • Por la forma como nos explicamos las cosas que suceden en nuestra vida, culpando a los demás de nuestras elecciones (locus de control externo ) y difícilmente haciéndonos responsables de nuestras decisiones (locus de control interno).
  • Muchas veces nos da un miedo terrible hacernos responsables de nosotros mismos.
  • Llegamos a depositar nuestras expectativas de felicidad en la pareja, cuando esto es una labor puramente personal.
  • Ninguna persona que se sienta insatisfecha consigo misma, puede ser capaz de convivir en pareja pues aún ofreciéndole condiciones favorables tratará de verle el aspecto negativo a la vida.
  • A veces me siento la última Coca del desierto y siento que nadie me merece, esto es, me siento superior a mi pareja y siento que al estar con e/ella le hago un favor al pobrecito.
  • Los patrones psicológicos, sociales o culturales de belleza hacen crisis en la cabeza me hacen cuestionarme la conveniencia de estar con mi pareja.
  • En ocasiones desde el inicio de la relación no estaba realmente convencido de estar con mi pareja actual, es decir, no tenía realmente un compromiso de pareja.

Si idealizamos  a la pareja, al fracturarse esas expectativas sufriremos verdaderamente. Mientras más alto volamos nos duele más la caída.
"Las parejas reales, de carne y hueso son personas con virtudes y defectos y si existen. Mientra tanto, las pareja ideales son de apariencia, son personas que tratan de ocultar su condición de seres humanos, se refugian en la apariencia".
¿Por qué veo cualidades en mi pareja que realmente no tiene?

  • Porque soy incapaz de reconocer que mi pareja es un ser humano como yo con virtudes y defectos.
  • Porque tengo miedo a enfrentar mi soledad.
  • Porque estoy acostumbrado a quejarme la mayor parte del tiempo (hacer el papel de víctima).
  • Porque interiormente no me respeto yo mismo.
  • Porque tengo un autoestima muy baja.
  • Porque no me conozco como persona interiormente.
  • Porque no estoy consciente que la felicidad es una tarea interior. No es una meta sino un camino, pero deposito mi felicidad en mi pareja.
  • Porque no se establecer relaciones de compromiso.
  • Porque creo que nadie en este mundo podría entenderme.
  • Porque creo que no existe realmente una pareja que se puedan llevar medianamente bien (proyección) conmigo.
  • Porque siempre se me hace normal vivir en el pleito.
  • Porque no se construir mi propia felicidad.
  • Porque más vale malo por conocido que bueno por conocer.
  • Porque supongo que en el sexo nadie más podría entenderme.
  • Porque soy incapaz de reconocer que elegí mal a mi pareja.
  • Porque he construido una imagen social que no voy a destruir solo por cambiar de pareja.
  • Porque ya tenemos hijos y no voy a dejarlos sin su padre/madre.
  • Porque tenemos proyectos materiales que a mi me han costado y no voy a dejarlos en manos de alguien más (un/una amante).
  • Porque pensándolo bien TODOS LOS HOMBRES/TODAS LAS MUEJERES son iguales.
Sugerencias para el cambio

  • Todo lo que se resiste, persiste.
  • Mientras más altas son las expectativas con respecto a la pareja y no se cumplen, mayor es el dolor y frustración que experimentan.
  • La relación es como un jardín que necesita ser cuidado y cultivado por ambos miembros.
  • La felicidad en la relación de pareja, en principio es un trabajo más personal, y en segundo lugar es un trabajo de conjunto.
  • No se puede exigir en la pareja, lo que uno mismo no es capaz de dar. “Nadie da lo que no tiene”.
  • Los problemas de la pareja, dependen en realidad de la personalidad y las carencias de cada uno de sus  miembros.
  • Cuánto más responsables sean cada uno de los miembros de sus propias responsabilidades afectivas, más felices podrán ser.
  • Cualquier pareja puede crecer en las situaciones de crisis más graves si son capaces de verlas como una oportunidad de crecimiento y no como un obstáculo.
  • Si todo esto no funciona, “pedir ayuda profesional”.
Una última opción es cambiar de paradigma “aprender a quererse a si mismo para poder querer a alguien más”, el resultado sería: En vez de preguntarme: ¿Por qué no tengo la pareja que quiero? Sería ¿Por qué no aprender a querer a la pareja que tengo?

lunes, 7 de mayo de 2012

Estar Viejo

Al hablar de viejos, ancianos, personas de la tercera edad o adultos mayores, se hace referencia a todos aquellos que tengan 60 años o más de edad. La sociedad de Geriatría y Gerontología de México A.C. ha denominado las etapas de la vejez como:
1.- De 45 a 59 años Pre vejez
2.- De 60 a 79 años Vejez
3.- De 80 y más años Ancianidad

¿VIEJO YO?

La vida trae consigo el inexorable paso del tiempo, crecer, sin embargo, parece que duele. Todos tememos la llegada de la vejez, demasiado asociada a enfermedad, deterioro, soledad. Me pregunto ¿estamos preparados para envejecer? Sé que nadie está pre-parado para nada, todos tenemos que aprender a tolerar el paso del tiempo, tiempo que viene asociado a la palabra muerte. Nadie nos educa para saber vivir sin huir del final. Si les dijera que tanto jóvenes como viejos estamos igual de cerca o lejos de la muerte. A todos, algún día, nos llegará la hora, mientras tanto hay que vivir con esa intensidad.

La vida de cada uno depende de sus propios pensamientos y deseos, nada de suerte o casualidad. Llegar a mayores para estar en un asilo, maltratados, o en casa de un familiar, como un inútil, dependen de lo que nosotros hayamos hecho para conseguirlo. Tal vez sea el momento de decirles que cada uno tiene que aprender a ocuparse de su vejez. ¿Queremos estar en manos de otros? ¿Queremos pedir una limosna de amor? ¿Queremos ser unos pobres viejos?

Es mejor que cada uno se ocupe de sus cosas y sabemos, una vejez sin dinero no puede ser buena. Con dinero podemos comprar servicios y calidad de vida, entre otras cosas, para no depender de nuestros hijos. Desde jóvenes tenemos que cuidar nuestros deseos para permitirnos una vida menos sufriente. Tener dinero no quiere decir estar por encima de los demás, quiere decir que uno es capaz de trabajar para lo que desea. Decir yo quiero tal cosa y no tener el dinero para ello, es lo mismo que decir yo no quiero.
No todos llegaremos a viejos, sin embargo, un joven puede sentirse más viejo que alguien que le doble en la edad. La vejez es lo de menos, tratar de ocultar el paso de los años es la única vejez. Es muy frecuente ver personas obsesionadas por su aspecto físico, por ocultar sus arrugas, por vestir de forma juvenil, con la intención de permanecer en un tiempo de su vida. Sin embargo, por mucho que queramos escapar de ello, no vamos a poder. Hay que conquistar los años con dignidad, lo que no quiere decir que no tengamos que cuidar el cuerpo que tenemos, sabiendo que cada arruga forma parte de nuestro ser.

Otras personas, parecen más resignadas y sólo nos hablan de sus dolores, padecimientos, pérdidas, como un deprimido cuando habla de sí mismo. Ya lo dice el poeta: Hubo un instante en mi vida que mis arrugas y mis dolores tenían más fuerza que mi pensamiento, en ese instante fue donde envejecí. El envejecimiento es, entonces, sentirse viejo, caduco, inservible. No tener deseos es lo que nos conduce irremediablemente a la muerte y ser mayor no significa “no desear”, significa tener deseos diferentes, nuevos.
Se recomienda a cualquier edad comenzar a aprender una nueva disciplina, ya sea aprender cosas nuevas o mantenerse ocupado en algo, tener medios distractores, comenzar algo, porque más allá de terminarla o no, lo que interesa es la dimensión que le da a una persona ser aprendiz en algo, la energía que se genera y los deseos.
No son las neuronas las que se deterioran, son las relaciones sociales.la vejez es el estado de una persona que, por razón de su crecimiento en edad sufre una decadencia biológica de su organismo y un receso de su participación social”. Justamente una vez que uno se jubila pierde un montón de relaciones, parece que el jubilado no es importante para nadie. Tristemente, la sociedad tal y como está planteada, nos trae una vejez marginal, donde se nos va apartando de los lugares, amores, amistades.
El periodo de envejecimiento se caracteriza psicológicamente por los esfuerzos que debe realizar el individuo para adaptarse a los cambios biológicos y limitaciones físicas y a las nuevas condiciones de vida que supone el envejecimiento.
Los momentos críticos más importantes por los que tiene que pasar todo anciano son: pérdidas de relaciones afectivas significativas, especialmente la pérdida de la pareja, la aparición de una o más enfermedades que constituyen una amenaza para la vida o una limitación de la capacidad de autonomía.
No cabe duda de que a pesar de que la vejez tiene elementos positivos y de que se puede vivir de forma satisfactoria, es una edad de pérdida. El anciano vive con la esperanza de perder lo menos posible, de conservar los logros obtenidos. Un buen aprendizaje en la frustración y en la aceptación de los impedimentos que se van a encontrar a lo largo de la vida supone, indudablemente, la mejor forma para prepararse para la tercera edad.
Los cambios psicológicos los podemos dividir en tres grandes áreas:

1.       Cognitivo, 2. Afectivo, 3. Sexual.


                     “La vejez despierta miedo. Se asocia a ella la idea del deterioro y la muerte”


¡Señores! para vivir hay que desear. Una persona con 50, 60, 70 , 80 años puede emprender un nuevo proyecto de vida, hacer lo que desee.

Ocurre que tendemos a comparar, a decir antes podía hacer esto y ahora no, antes, antes… Uno se olvida que ahora, cada instante, es distinto. No podemos pensar cada tiempo de la vida con las mismas ideas. Por ejemplo, la adolescencia con las ideas infantiles, la vejez con las ideas de cuando uno tenía 30 años. Si pensamos ese tiempo de nuestra vida con las mismas ideas de antes, nos va a ir mal. Lo nuevo hay que pensarlo con nuevas ideas, de esta forma no existe la vejez, es una etapa más de la vida, donde no se acaban los deseos, hay otros deseos. Hay que averiguar cuáles son.

 La vejez es una etapa de la vida y el envejecimiento es un proceso que ocurre a lo largo de la vida. Ambos objetos de conocimiento son multidisciplinares puesto que el ser humano es una realidad bio-psico-social. La psicología como disciplina científica que se ocupa del comportamiento humano a los niveles de complejidad necesarios es una disciplina básica de los cambios psicológicos que se producen en el transcurso de la vida.

¿Joven? ¿Viejo? Lo importante es que no hay edad para comenzar y disfrutar de una nueva vida.

viernes, 4 de mayo de 2012

El síndrome de Diógenes

El síndrome de Diógenes es un trastorno del comportamiento que normalmente afecta a personas de avanzada edad que viven solas. Se caracteriza por el total abandono personal y social y por el aislamiento voluntario en el propio hogar, acompañados en la mayoría de los casos por la acumulación en él de grandes cantidades de basura o de desperdicios domésticos.
Aunque el síndrome de Diógenes “no está reconocido en los manuales diagnósticos internacionales como entidad diagnóstica y además puede aparecer en distintas enfermedades psiquiátricas y neurológicas”
En 1960 se realizó el primer estudio científico de dicho patrón de conducta, bautizándolo en 1975 como síndrome de Diógenes. Este epónimo es según erróneo, pues hace referencia a Diógenes de Sinope, filósofo griego que adoptó y promulgó hasta el extremo los ideales de privación e independencia de las necesidades materiales, otros dicen que fue famoso por preconizar un modo de vida austero y renunciar a todo tipo de comodidades. 

Diógenes era un filósofo griego de la época de Aristóteles y Alejandro Magno, considerado fundador de la escuela del cinismo. Desprendido de toda propiedad y toda norma, en absoluta libertad, siguiendo una vida austera (se cuenta que vivía en un tonel de vino). Vestía harapos y vivía de lo que encontraba tirado. Le tachaban de insolente y altanero.

Tales comportamientos se suelen encontrar en personas de avanzada edad pero también en jóvenes. Por lo general son personas que se sienten solas o no han superado la muerte de un cónyuge o familiar muy cercano o presentan cuadros depresivos. En algunos casos las penurias económicas pueden alentar este comportamiento pero no es un factor clave pues se conocen casos en personas de alto nivel socioeconómico y carreras profesionales brillantes que lo padecen. En definitiva, es la soledad el principal factor que desencadena este trastorno.
Una de las peculiaridades de este síndrome, es que cuando son dos las personas de edad avanzada que conviven juntas, uno de ellos puede arrastrar al otro a esta situación.

Este trastorno esconde importantes alteraciones psiquiátricas.
Mencionemos algunos:

  • Trastornos obsesivos compulsivos
  • Demencias}
  • Esquizofrenias y otros trastornos psicóticos
  • Drogodependencias, especialmente alcoholismo
  • Depresión
  • Trastornos de personalidad
Uno de los factores más importantes en el crecimiento  del número de casos que manifiestan este trastorno es el progresivo aumento del número  de ancianos que viven solos
¿Quiénes son esas personas?
Más mayores que jóvenes (promedio 75 años); más solitarias que acompañadas, casi igual proporción de hombres que mujeres (aunque algo más mujeres por supervivencia por edad); casi la mitad solteras y un tercio viudas. No se encuentra preferencia por estatus social ni por inteligencia.
¿Cómo son?
Suelen ser hurañas, obstinadas, desconfiadas, introvertidas, presentar cierta hostilidad, de temperamento independiente y dominante, no establecen vínculos con las personas (aunque sí con objetos y/o animales), paranoides (piensan que son los demás los que tienen el problema porque se quejan y que por eso le quieren hacer daño o quitarle las cosas), vitalmente inseguras y temerosas. Personas con ciertas vulnerabilidades.
Síntomas
Aislamiento social, reclusión en el propio hogar y abandono de la higiene son las principales pautas de conducta.
Las personas que lo sufren pueden llegar a acumular grandes cantidades de basura en sus domicilios y vivir voluntariamente en condiciones de pobreza extrema. El anciano suele mostrar una absoluta negligencia en su autocuidado y en la limpieza del hogar. Suelen reunir grandes cantidades de dinero en su casa o en el banco sin tener conciencia de lo que poseen. Por el contrario, piensan que su situación es de pobreza extrema, lo que les induce a ahorrar y guardar artículos sin ninguna utilidad. Es frecuente que almacenen cantidades grandísimas de basura y desperdicios sin ninguna utilidad. Incluso se han visto casos de personas que atesoraban billetes antiguos sin curso legal, bombonas de butano o latas de pintura, etc.
Un comportamiento huraño o un aislamiento voluntario son factores de riesgo que le pueden indicar a la familia la presencia de este desorden en uno de sus miembros. Como en muchas ocasiones estas personas rechazan la ayuda de su familia y amigos, se ha llegado a debatir si se trata realmente de una enfermedad o sólo un estilo de vida
Tratamiento
En primera instancia, el tratamiento para estas personas va dirigido a tratar las posibles complicaciones derivadas del mal estado nutricional e higiénico. Sin embargo, acto seguido es necesario instaurar medidas preventivas para que el cuadro no vuelva a repetirse. Para ello se necesita un apoyo social suficiente, a través de una institución geriátrica o de asistencia domiciliaria. El problema es que los propios afectados suelen rechazar la ayuda social. Si no están incapacitados por motivo de alguna patología psiquiátrica de base o una demencia, no pueden ser ingresados en una residencia sin su consentimiento, con lo que termina volviendo a su tipo de vida anterior.
El tratamiento sugiero debe empezar por la detección de los casos de riesgo, el ingreso en un Hospital General o Unidad de Geriatría y abordaje de los trastornos médicos. Es indispensable un diagnóstico para saber cuál es la patología de base que genera este comportamiento.
Se deben adoptar las medidas de protección social pertinentes, evitando el regreso del enfermo a sus condiciones previas de vida. En algunos casos es preciso tratar la patología psiquiátrica asociada (depresión, delirios crónicos). Si no es posible asegurar la convivencia o ubicar al paciente en una institución social, es preciso hacer un seguimiento crónico, visitas domiciliarias y trabajo coordinado de los servicios sanitarios (médico, enfermero) y sociales (trabajador social).
El mayor obstáculo para tratar a estos pacientes es que ellos no tienen plena conciencia de su problema y suelen rechazar la ayuda social. Si no están incapacitados por motivo de alguna enfermedad psiquiátrica de base o una demencia, no pueden ser ingresados en una residencia sin su consentimiento, con lo que termina volviendo a su tipo de vida anterior. Sin embargo, esfuerzos no deben ahorrarse para tratar con terapia a estos pacientes de modo que tomen conciencia de su trastorno y aprendan la importancia de tener no solo una higiene personal adecuada sino un entorno libre de basura y especímenes que les pueden causar muchas enfermedades a ellos mismos, a su familia y vecinos.
Otra principal complicación es la muerte en soledad en sus domicilios. Por otra parte, más del 40 % de los Síndromes de Diógenes sufren patología somática severa y mueren a pesar de ser ingresados en hospitales. Todos presentan grave abandono higiénico y estados carenciales, que implican la presencia de malnutrición, anemia, etc.
Otros datos
Suele darse en ancianos con cierta tendencia al aislamiento, aunque también intervienen otros factores estresantes de la edad tardía como las dificultades económicas o la muerte de un familiar y sobre todo, la soledad. La posición socioeconómica no protege de su aparición, ya que se conocen casos de personas que padecían el síndrome que poseían títulos universitarios, con un alto nivel económico y carreras profesionales brillantes.

Recomendación a las familias: Los familiares deberían vigilar a sus mayores que viven solos especialmente si han observado algún factor de riesgo, como un comportamiento huraño o un aislamiento voluntario. No obstante, con frecuencia resulta difícil ayudarlos ya que son ellos los que evitan todo tipo de atención. Esto hace que a veces llegue incluso a debatirse si se trata realmente de una enfermedad o sólo un estilo de vida.

jueves, 3 de mayo de 2012

La Autoestima

¿Que es la autoestima?
La autoestima es el amor que nos asignamos como personas. Implica nuestros pensamientos, sentimientos y sensaciones o experiencias que vamos introyectando durante nuestra vida, aceptando nuestras virtudes y defectos  Es el amor que nos tenemos a nosotros mismos sin ser egocentristas o narcisistas.Por otro lado, de acuerdo al Diccionario de la Real Academia Española, la autoestima es la valoración generalmente positiva de sí mismo.


Con base en lo anterior, las personas que han desarrollado una alta valoración, aceptación y respeto a sí mismas tienen una autoestima más alta que aquellas que no han logrado esta meta. 

Es el concepto que tenemos de nuestra valía y se basa en todos los pensamientos, sentimientos, sensaciones y experiencias que sobre nosotros mismos hemos ido recogiendo durante nuestra vida; creemos que somos listos o tontos, nos gustamos o no. Los millares de impresiones, evaluaciones y experiencias así reunidos se conjuntan en un sentimiento positivo hacia nosotros mismos o por el contrario, en un incómodo sentimiento de no ser lo que esperábamos.

 ¿Por qué es tan importante?
El auto concepto y la autoestima juegan un importante papel en la vida de las personas. Los éxitos y los fracasos, la satisfacción de uno mismo, el bienestar psíquico y el conjunto de relaciones sociales llevan su sello. Tener un auto concepto y una autoestima positivos es de la mayor importancia para la vida personal, profesional y social. El auto concepto favorece el sentido de la propia identidad, constituye un marco de referencia desde el que interpretar la realidad externa y las propias experiencias, influye en el rendimiento, condiciona las expectativas y la motivación y contribuye a la salud y al equilibrio psíquicos.
¿Cómo pensar de forma positiva sobre usted?
  • Haga lo posible por ser su mejor amigo.
  • Aceptación: Identifique y acepte sus cualidades y defectos.
  • Ayuda: Planee objetivos realistas.
  • Tiempo: Saque tiempo regularmente para estar solo/a con sus pensamientos y sentimientos. Aprenda a didfrutar de su propia compañía.
  • Credibilidad: Preste atención a sus pensamientos y sentimientos. Haga aquello que le hace sentir feliz y satisfecho/a.
  • Animo: Tome una actitud "puedo hacerlo".
  • Respeto: No trate de ser alguien más. Este orgulloso de ser quien es.
  • Aprecio: Prémiese por sus logros, los pequeños y los grandes. Recuerde que sus experiencias son únicamente suyas. Disfrútelas.
  • Amor: Aprenda a querer a la persona tan única que es Ud. Acepte sus éxitos y fallos.
¿Cómo se desarrolla la autoestima?
  • El concepto del Yo y de la autoestima se desarrollan gradualmente durante toda la vida, empezando en la infancia y pasando por diversas etapas de progresiva complejidad. Cada etapa aporta impresiones, sentimientos e incluso, complicados razonamientos sobre el Yo. El resultado es un sentimiento generalizado de valía o de incapacidad.
  • En general, las experiencias positivas y relaciones plenas ayudan a aumentar la autoestima. Las experiencias negativas y las relaciones problemáticas hacen que disminuya la autoestima.
  • La importancia de una autoestima elevada
Sentirse bien con uno mismo facilita:
  • Enriquecer su vida: Tener gente feliz a su alrededor es una cosa apreciada. Siendo feliz podrá encontrar más amigos. Sintiéndose mejor consigo mismo y siendo más abierto, establecerá relaciones más estrechas.
  • Aceptar los retos: Cuando usted tiene una autoestima alta no tendrá miedo de desarrollar sus habilidades. Querrá arriesgarse y probar cosas nuevas. Si no prueba, no podrá madurar.
Algunos efectos comunes de una baja autoestima:
  • Falta de confianza en sí mismo
  • Bajo rendimiento
  • Visión distorsionada de uno mismo y de los demás
  • Una vida personal infeliz
Con una autoestima elevada Ud. podrá:
  • Ser la persona que quiere ser
  • Disfrutar más de los demás
  • Ofrecer más de sí mismo
  • Mantener la confianza en sí mismo
  • Permanecer tolerante
¿Es fácil cambiar la autoestima ?
No. Porque significa darse un vistazo profundo a uno mismo y entonces cambiar las cosas que no le gustan. Esto lleva su tiempo, pero los resultados valen el esfuerzo. Si  usted lo ha intentado pero no ha hecho ningún progreso, considere la posibilidad de pedir ayuda a un profesional.
 ¿Garantiza la autoestima elevada el éxito?
No. Pero garantiza el que usted se sentirá bien consigo mismo y con los demás. No importa lo que pase.
¿Puedo ayudar a otros a sentirse mejor consigo mismos?
Si. Haga que sus actitudes positivas lleguen a los demás ofreciéndoles coraje y animándoles. Ayúdeles a abrirse. No los infravalore. Sea paciente con sus fallos y debilidades (todo el mundo las tiene).
¿La autoestima elevada significa egoísmo?
No, no es egoísmo o esnobismo. Estos son sentimientos falsos de inseguridad y baja autoestima. Tener una autoestima alta es apreciar su individualidad de manera que pueda responder a los demás de una manera positiva y productiva.
Técnicas para cambiar nuestros pensamientos
A continuación se describen algunas formas sencillas para modificar nuestros pensamientos, sentimientos y conductas con el fin de orientarlas hacia acciones positivas:
  • Auto escucha: Escúchate más a ti mismo más que escuchar lo que los demás te dicen sobre la forma como te debes de comportar.
  • Analiza con cuidado las opiniones de los demás sobre ti, tú y solo tú eres quien debe tomar la última decisión acerca de tus planes y proyectos, aunque te equivoques.
  • Transformar lo negativo a lo positivo: Consiste en forzarse a cambiar nuestros propios mensajes fatalistas en alternativas de crecimiento positivas.
  • Arco iris: Si piensas que la vida es de todo o nada, necesitas suponer que vas  más allá de los colores; blanco o es negro. Pensar solo en dos tonalidades te crea ansiedad y frustración si no logras tus metas. Existen muchos más colores. Nadie es perfecto o tonto, para algunas cosas seremos expertos, pero para otras no y eso no nos hace ser inferiores o valer menos.
  • Evitar las comparaciones: Quién constantemente se compara, está destinado al fracaso. Tú eres único e irrepetible y eso te hace ser único en el mundo.
  • Nadie es perfecto: Si crees que nunca te equivocas ya de entradas estas equivocado. Los seres humanos somos imperfectos, pero somos perfectibles sobre todo cuando nos equivocamos podemos aprender de los errores, por eso cuando sientas que te equivoques necesitas pensar; ¿qué debo hacer para lograr los resultados deseados la siguiente vez que lo intente? es convertir la equivocación en aprendizaje.
  • Valora tus triunfos: Cada día por la noche al momento de ir a la cama necesitas reconocerte las cosas que hiciste bien durante el día. Y felicítate por los avances del día aunque hayan sido menores.
  • Levantarse: Es levantarse cada vez que nos caemos en cualquier terreno: amoroso, económico, espiritual, social, etc. y transformarlo como hábito de vida. Significa dejar de ser víctima y ser arquitecto de tu propio destino.
    Algunas sugerencias más para el cambio:
1.- Piense positivamente sobre usted mismo.
2.- Tenga aprecio a si individualidad
3.- Ayúdese a desarrollar su talento y sus habilidades
4.- Dese ánimos cada vez que los necesite
5.- Crea en sus propios juicios
6.- Quiérase a sí mismo
7.- Acéptate tal como eres (con virtudes y defectos)
8.- ¿Quién te metió en la cabeza que eras un …?. Tú eres lo que piensas de ti mismo y actúas inconscientemente en consecuencia.
9.- Pule tu lente de la percepción para verte desde otro ángulo y cambiar tus creencias.
10.- Aprender a reinterpretar el pasado, el cual no se puede cambiar, pero si enfrentarlo de manera más positiva.
11.- Deja de compararte con los demás. ¡Tú eres un ser único e irrepetible.
12.- Conócete a ti mismo es el principio de la verdadera sabiduría.
13.- Empezar a hacerse responsable de la vida propia.
14.- Reconócete a ti mismo cuando has tenido algún logro, iniciando con metas pequeñas.
15.- Haz un inventario de tus virtudes y defectos con el fin de desechar las conductas que no funcionan, mantener las que son funcionales e inventa las que sean necesarias para poder relacionarse contigo mismo y con los demás sanamente.
16.- Reduce el nivel de autocrítica, pensando más en alternativas que en los obstáculos presentes en tu vida.
17.- Analiza tu historia de vida personal y tu origen: ¿quién soy?, ¿a dónde voy? y ¿con quién voy?.
18.- Aprende a expresar tus emociones y sentimiento.
19.- Deja el pasado a donde corresponde: "atrás", por muy doloroso que haya sido.
20.- En el peor de los pronósticos, si no se puede lograr solo, acudir con el especialista.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Divorcio Psicologico

Causantes del divorcio: La disolución de un matrimonio, no se da en el momento de la firma del acta administrativa, sino se gesta, desde las etapas más tempranas del compromiso de la pareja.

Las cosas no se descomponen de la noche a la mañana, sufren un deterioro paulatino e inconsciente que va desgastando la relación, inclusive antes de iniciar. A este desgaste inicial sin soluciones le denomino “divorcio psicológico”.
Algunos indicadores de “divorcio psicológico” y que deberíamos tomar en consideración son: indicios de infidelidad o hechos consumados anteriores a la relación actual, las diferencias en el terreno de los sexual (disfunción, frecuencia incompatibles, el nivel del grado de satisfacción con la pareja, etc.),enfrentarse a los problemas económicos cotidianos relacionados con la distribución del ingreso, la percepción o ilusión de escapar de la vida actual o la posibilidad de rehacer una nueva vida, sin haber solucionado problemas personales anteriores, la diferencia entre los valores sociales de la pareja, tales como; la educación, los ideales o proyectos de vida, etc.
Algunas causas del Divorcio. Estas se pueden dar tanto en el hombre como en la mujer.
    1. Falta de conocimiento de nosotros mismos.
    2. Expectativas personales, no cumplidas.
    3. Intolerancia ante las diferencias de la pareja.
    4. Inmadurez.
    5. Desinterés en mejorar la relación.
    6. Insatisfacción personal.
    7. Celos injustificados.
    8. Baja autoestima.
    9. Una idea equivocada del amor.
    10. Falta de reconocimiento y aceptación de las crisis normales de la pareja.
    11. Dejamos de amar a nuestra pareja.
    12. Falta de compromiso emocional.
    13. Por aprendizaje de experiencias previas, sobre todo durante la niñez.
    14. Situaciones críticas o problemáticas del matrimonio y de la vida.
    15. Problemas importantes de comunicación.
    16. Rutina y aburrimiento.
    17. Violencia intrafamiliar de parte de cualquiera de las dos personas, hacia la pareja o hacia los hijos.
    18. Alcoholismo o drogadicción.
    19. Situaciones críticas. Por ejemplo
    • Un embarazo no deseado.
    • Enfermedades importantes en un miembro de la familia.
    • Problemas sexuales.
    • Infidelidad.
    • Problemas económicos.
    • Intervención constante de la familia de cualquiera de los dos.
    La intensidad de las emociones, el dolor, las ofensas, el rencor y otros sentimientos provocan un daño profundo en la pareja difícil de recuperar. Por otro lado, la victimización de los hijos atrapados en la "batalla conyugal", produce deterioros psicológicos irreparables en la psiquis de los menores. La mayoría de los divorcios están precedidos por meses o años de disputas, ofensas, desamor, peleas, desilusiones y frustraciones.

    En un primer lugar, las parejas comienzan con provocaciones mutuas, con trato y vocabulario hostil y episodios de gritos y de abuso físico verbal.

    Si la pareja no logra manejar los conflictos y comienzan un proceso de divorcio, inician un período de enfrentamiento por distintas razones, sean por rencor, rabia o por la división del patrimonio conyugal. En esta fase se intensifica la hostilidad, el deseo de daño de uno al otro. Surge el odio, la amargura y a veces hasta el deseo de venganza.

    En esta etapa, la mayoría de las parejas piensa que quitándole los hijos el uno al otro ganan la pelea, sin darse cuenta que le están haciendo un gran mal a la psiquis de los muchachos. De manera que, cuando la pareja se plantea un divorcio y no hay más remedio, hay que tomar en cuenta todo lo expresado y procurar el mayor esfuerzo en que no se generen tantos problemas. Aunque parezca difícil, el divorcio o la separación debe ser acordada hasta donde se pueda y negociada.

    ¿Seguimos juntos o nos separamos?.


     El compromiso inicial (Algunos componentes del compromiso)

    Todo buen principio, tiene la probabilidad de tener un buen fin.  Sin embargo, cuando se convierte en el factor más importante, los preparativos para la boda, que el conocimiento personal, un poco del otro y de las familias de origen, la cosa podría ser muy diferente. Lo accesorio se convierte en lo importante, aunque el análisis de los miembros de la pareja podría evitar muchos conflictos seguros hacia delante.

    En ocasiones un simple o intrascendente desacuerdo con el otro, hace pensar en la posibilidad de disolver el vínculo.  De hecho existen parejas psicológicamente divorciadas y que aún no lo saben.  Este es uno de los más fuertes indicadores.  Difícilmente, la pareja analiza los motivos inconscientes que podrían fortalecer o debilitar el compromiso de crecer y vivir juntos.
    Existen diferentes formas de presión personal o social para establecer un compromiso
    El haber invertido una cierta cantidad de tiempo en la relación, el hecho de que ambas familias conocen y en ocasiones aceptan socialmente al otro, certificándolo como un buen candidato a incorporarse a la familia, otro puede ser la presión ejercida veladamente por la familia para que los futuros consortes formalicen su situación, otro más es el sentimiento de agrado que los futuros cónyuges podrían tener para comprometerse en la relación . En este último punto, resulta  frecuente en las parejas desavenidas y que solicitan apoyo terapéutico el encontrar que desde el inicio era más fuerte el deseo de alguno de los dos el casarse, estableciendo una relación desigual o desbalanceada de compromiso desde el principio, con las consecuencias que ello con lleva.

    ¿Por qué y para qué seguimos juntos?

    Generalmente cuando una pareja está en la disyuntiva de saber sí vale la pena seguir juntos, dentro de la terapia es importante conocer ¿por qué? y ¿para qué? continuar con una relación de pareja.  Si la pareja ha llegado a este punto es probable que la esencia del convivir se haya desviado o simplemente nunca la hayan considerado.


    Crecer, junto con  el ser amado, respetar las diferencias, continuar con una relación de compromiso, evolucionar hacia el mismo objetivo, simplemente no existe.  Ello por supuesto no niega ni elimina la presencia del conflicto en la relación, el cuál es inevitable.  Sin embargo, estos son parte de los obstáculos por los que vale la pena “penar” o luchar por la relación de pareja.
    Por otro lado, en ocasiones, la convivencia con el otro, mete a la pareja en un círculo vicioso en donde convivir, se vuelve costumbre o dependencia.
    El convivir juntos en la habitación y separados en lo emocional es otro indicador del divorcio psicológico, en donde lo intrascendente de lo cotidiano, se vuelve el tema de conversación.  En los casos más graves, vivir bajo el mismo techo separados en diferentes habitaciones, pero juntos aún en lo emocional, deja más abierta la posibilidad de buscar fuera de la relación una tercera persona.
    La codependencia, la costumbre o la separación física o emocional con el otro, puede durar toda la vida.
    ¿Nos separamos?
    En las parejas desavenidas, los sentimientos hacia el otro van en proporción a los motivos que les llevaron a separarse.  Cuando el evento ha sido de mucho desgaste, la separación puede ser un elemento liberador.  Sin embargo, cuando ambos miembros suponen estar más o menos bien y se presenta algún evento desencadenante de la separación, el hecho resulta más traumático y doloroso, por lo inesperado del acontecimiento El apoyo terapéutico en estos casos puede ser de gran ayuda, pues implica entre la revisión de la historia personal del paciente y el análisis de los motivos de separación, hacer conscientes aquellos elementos disparadores del divorcio.
    La firma del acta administrativa, es de hecho una fase más del divorcio. Sin embargo, el hecho empezó con el divorcio psicológico, manifiesto a través de los indicadores antes mencionados.
    Durante la fase posterior al hecho legal-administrativo, el estado psicológico del paciente, pasa por varias etapas, reunidas en una sola, a la cual se le denomina “duelo”.
    En el duelo la primera fase es la “negación”, la cual consiste en no creer la consumación del evento (divorcio), sobretodo, porque no se encuentran razones que expliquen cómo la inversión positiva emocional con la pareja haya finalizado.   En ocasiones se confunde con un mal sueño o una pesadilla, con la ilusión de que las cosas son temporales y van a mejorar.
    Posteriormente, se presenta un estado de “frustración” acompañado de sentimientos o acciones agresivas hacia el otro, o hacia uno mismo, o hacia quién perceptualmente propicio la disolución del vínculo.  Este estado sentimental, en ocasiones va acompañado de la pérdida del sentido espiritual o la “fe”, del propio sistema de creencias.
    En seguida, el paciente pasa por la “sustitución”, en esta etapa es capaz de ir adquiriendo nuevas habilidades sociales y ello le prepara para la fase de “aceptación o resolución del conflicto”, en esta última etapa, el paciente es capaz de re-interpretar el pasado y puede adaptarse a vivir una nueva realidad de su situación de pareja.  En ocasiones se plantea de una forma más sana el darse la posibilidad de establecer una nueva relación.
    Todas las rupturas precisan pasar por el proceso antes citado. Y éste tiene una duración que oscila entre los 6 meses y los 2 años, aproximadamente, dependiendo de varios factores:
    • De la personalidad. El rasgo de personalidad (tendencia a comportarse de una manera particular a lo largo de una serie de situaciones) influye enormemente.
    • Sensibilidad. En el aspecto emocional hay personas que sienten las cosas, tanto las alegrías como las tristezas de forma muy profunda, mientras que otras tienen vivencias más superficiales.
    • En el aspecto cognitivo, hay personalidades que entran en una espiral de pensamientos catastróficos que les inmovilizan y no pueden ver con claridad, mientras que otros con más conocimiento de sí mismos y del proceso por el que están pasando saben darse tiempo.
    • Recursos propios. El nivel alto de autoestima o confianza en sí mismo ayudará a no tener pensamientos autodestructivos ni de acontecimientos catastróficos.
    La visión hacia el futuro
    Cuando un paciente has superado la etapa del duelo, es capaz de aceptar la propia responsabilidad en el conflicto de forma sana, pues como en todo compuesto químico, es un elemento de la fórmula con el otro, y es capaz de entenderlo. 
    Lo más importante, es el considerar el acontecimiento como una conducta que trajo sus consecuencias y aprendizajes.  A pesar de todo, brinda la posibilidad de evolucionar y crecer.  De revertir y aprovechar las consecuencias para crecer y adaptarse al cambio de vida.
    Aprender del pasado, es la estrategia para construir nuevas redes sociales (hacer nuevos amigos), o recuperar las más cercanas (amigos anteriores), o plantear la posibilidad de re-organizar nuevamente el entorno familiar. 
    El proceso de recuperación incluye; plantearse nuevos proyectos de vida. A manera de estrategias para el cambio, vale la pena tomar en cuenta lo siguiente:
    • Para reconstruir nuevamente una relación de pareja, “el borrón y cuenta nueva, nunca funciona”, es cómo esperar un arreglo mágico de las cosas, sin haber hecho nada.
    • Mejorar y entender las diferentes formas de comunicación: brinda la posibilidad de ser más concretos y específicos para transmitir una idea y crecer en pareja a pesar de las diferencias.
    • Analizar la forma cómo se originó una pareja, da cuenta de la probabilidad de su posible futuro.  “El origen influye fuertemente en el destino”.
    • Tomar en serio el compromiso inicial de la pareja, puede fortalecer los lazos de unión entre los futuros consortes.
    • Nunca, nunca, pero nunca, suponer que la relación de pareja está bien, solo por el hecho de que “yo me siento bien en la relación".
    • Resolver los problemas cotidianos, es una gran tabla de salvación,  pues cuando se acumulan, de montoncito en montoncito, se crea una enorme montaña de conflictos
    • Analiza cuáles pudieron ser las causas de tu divorcio.Recuerda que generalmente son más de una.
    • Enfócate en ti. En lo que crees que está relacionado con tu actitud de vida, pensamientos, sentimientos y conducta.
    • No busques culpables.
      Responsabilízate por lo que tiene que ver contigo.
    • Recuerda que un matrimonio es de dos y un divorcio también es de dos. Lo importante no es que te sientas culpable o enojado contigo mismo por lo que hiciste o dejaste de hacer, sino que aprendas de tus errores.
    • Aunque en estos momentos no lo veas así, la vida sigue y tienes por delante muchas oportunidades de ser feliz.
    • Pero para ello tenemos que aprender de nuestros errores, corregirlos cuando es posible o evitar volverlos a cometer.
    En lo inevitable.
    El en el peor de los casos, cuando la disolución del vínculo está decidida y es inevitable, más vale llegar a un buen arreglo que a un mal pleito.  Es conveniente pensar con la cabeza y no dejar que las resuelva el corazón o una conducta visceral.
    Cuando los pleitos se alargan, además de perder los consortes, los hijos son los más perjudicados y los abogados los únicos beneficiados.
    Recuerda que tu hijo aprende lo que ve.  Una máxima de los abogados es: “hijos de padres divorciados, divorciados serán en la edad adulta”.

    Palabras Finales
    “El matrimonio es como un pequeño jardín que tienes que cuidar constantemente". Es la única forma de crecer, evolucionar y seguir juntos.