Personaje que llamo la atención por su increíble capacidad de argumentación, de defensa de sus
ideales “por más que fueran retorcidos y negativos” sobre todo su facultad de convencimiento, de
elocuencia, como su capacidad intelectual y discursiva.
Historial
El padre de Hitler fue
un apasionado por el alcohol y las mujeres, de carácter rígido, violento, lleno
de autoridad, por esta razón, Hitler desarrollo un odio y a la vez respeto a la
figura de su padre. En cambio su madre, era una mujer débil, controlada al
antojo de su marido y madre supe protectora de Adolfo, lo cual encaja
perfectamente en el caso de que de los 6 hijos que tuvo, solo dos se
encontraban vivos. Así como la madre era el pilar de la dulzura. Hitler
desarrollo un gran apego a esta. Cuando su madre murió, es evidente que no pudo
superar del todo la pérdida, fue un conflictivo que se reflejan en
algunos aspectos de su personalidad.
Durante su infancia,
era un chico con una gran inteligencia, pero le era muy difícil entablar
amistades con sus compañeros de clase, se encerraba en sí mismo. Rasgos de este
comportamiento continúo hasta su independencia. Una vez muerto su
padre, llevo una vida miserable en Viena (según en su libro “mi lucha” fue
porque quería no por incapacidad): no lograba tener un empleo fijo, no
entablaba una relación con alguien del sexo opuesto, su aspecto físico era
descuidado, y por este conjunto de cosas era motivo de burla por sus compañeros
de trabajo. Hitler sufría un problema de adaptación
social, afectado y lastimandolo psicológicamente. Esto
se refleja porque cuando al tomar Austria una de sus prioridades fue tomar
represalia de aquellas personas que lo rechazaron y se burlaron de él. No
olvido ningún episodio, desde profesores hasta simples
personas que en alguna ocasión se rieron de él. De ahí su
gran resentimiento. Claro es necesario ir más allá y penetrar en
su infancia para descubrir las raíces del mal.
Una vez en el poder con
el tiempo desarrollo una fuerte megalomanía (delirios de riqueza, poder, u
omnipotencia y obsesión por tener control de todo) por lo que incremento su
necesidad de dominio.
Hitler poseía un
extraordinario carisma capaz de envolver no sólo a las personas, sino también a
las masas, además de poseer una gran oratoria gesticular muy estudiada y una
capacidad de liderazgo notable. Era en sí un individuo muy auto-suficiente y
solitario, era muy poco proclive a demostrar algún rasgo emocional o demostrar
afinidad hacía alguien cuando se tomaba fotografías en presencia de personas de
su confianza y aceptación; en cambio sí demostraba una faceta muy humana en
presencia de niños. Una de las características más relevantes de la
personalidad de Hitler era la capacidad de impresionar, encantar, manipular y
subyugar a quienes lo rodearan, había personas que podían ser muy fuertes y
seguras en sus campos de acción, pero en presencia de Hitler estas
personalidades se veían disminuidas y manipuladas hasta el servilismo. Demostraba
además insensibilidad y falta de escrúpulos cuando se trataba de deshacerse de
enemigos o sacrificar soldados, se puede citar como ejemplo la destrucción
del 6º Ejército alemán en Stalingrado. Otro rasgo que caracterizaba a Adolf Hitler era
la agresividad y el deseo constante de venganza. Su inconmensurable odio se
remontaba a la experiencia de relativa certeza de insulto, humillación y
orgullo herido en su infancia. Hitler era muy celoso y no permitía a
casi nadie inmiscuirse en esos temas. Albert Speer en sus memorias señaló que
Hitler proporcionaba un trato desconsiderado, opresivo y vejatorio hacia Eva
Braun. Tenía un claro desprecio por la debilidad ante el enemigo y por éste,
sobre todo al judaísmo y en segundo grado al comunismo, su impulsividad y su
obcecación por las metas sin importar el costo que tuvieran. Era Autodidacta y
lector empedernido y por supuesto Antisemita.
Perfil Psicológico
Adolf Hitler era no
fumador, abstemio, vegetariano, ecologista
y amante de los animales. Gustaba pintar ruinas de castillos y templos,
con graves problemas de identidad sexual, con terribles pesadillas, se
consideraba un héroe y autor de su propia historia épica. Su estructura yoica
es débil, por lo que tiene una tendencia compensatoria a crear un yo “inflado”,
que exhibe el alto grado de integración que no posee en realidad. Es el reflejo
del deseo de seguridad, que lo lleva a la necesidad de autoafirmación y
superioridad. Rencoroso, con baja tolerancia a la crítica, con tendencia
homosexual e inclinado a menospreciar a las personas y a buscar venganza, incapaz
de aceptar una broma, se describe la personalidad de Hitler como la de un
criminal compulsivo y que se mostraba perseverante frente a la derrota, junto con
una fuerte obstinación y confianza en sí mismo. Las capas de su personalidad
revelan ambivalencia, en la capa profunda se encuentran tendencias inmorales,
antisociales, anárquicas, e inseguridad, pero en la capa superior (la que
muestra en el exterior) se ven los opuestos como rigidez moral, preocupación
por el orden, actitudes sociales y modelo de seguridad. Desarrollo un fuerte
egocentrismo, sentía la necesidad de ser objeto de atención de ser amado. Sin
embargo, carecía de otras cualidades para una personalidad equilibrada, tenía
un gran componente femenino en la constitución de Hitler, que tenía muchas
debilidades, nunca hizo trabajos manuales o practicó deportes y que de soldado
era "desagradablemente sumiso". Sexualmente, se describe como un
masoquista pasivo, aunque no era el único modelo y también se caracterizaba por
su homosexualidad reprimida siendo su principal mecanismo de defensa utilizado
desarrollado por el gran sufrimiento y privación que padeció. Sufría fuertes delirios
de características paranoicas. Su necesidad de autoafirmación se descarga en
forma violenta. "Hitler desarrolló una personalidad
primitiva, incapaz de experimentar empatía, sedienta de odio".
Según un perfil
psicológico elaborado en 1943 por el psiquiatra Henry Murray, quien afirmaba y
quien anticipó que si Alemania perdía la II Guerra Mundial, Hitler podría
suicidarse de forma dramática y explosiva, pero si le mataban podría
convertirse en un mártir. Informe que desgranó en 250 páginas la mente del
sanguinario y despiadado dictador alemán. El título: «Análisis de la personalidad
de Adolf Hitler: con las predicciones de su comportamiento futuro y sugerencias
para tratar con él ahora y después de la rendición de Alemania».
El diagnóstico de
Murray era que Hitler sufría neurosis, paranoia, histeria y esquizofrenia,
entre otros males. Sugirió que lo más probable era que él acabaría con su vida,
cosa que finalmente sucedió. Aunque nunca tuvo en mente capitular, su salud,
sin embargo, era delicada: padecía jaquecas, crisis cardiacas y posiblemente
ictericia. Y es que para entonces, el dictador era una ruina humana. En 1931, a
raíz del suicidio de su sobrina Geli Raubal, de la que estaba profundamente
enamorado, dejó de comer carne. Su dieta, por el contrario, incluía grandes
cantidades de anfetamina pura que le provocó irritabilidad y alucinaciones.
Las circunstancias
obligaron a Murray a psicoanalizar al dictador desde la distancia, para lo que
reunió información de segunda mano, como su genealogía, su historial escolar y
militar, informes públicos de acontecimientos en la prensa y filmados, la
información de la OSS y los propios escritos del dictador y de sus biógrafos. Los expertos
contemporáneos explican que su estudio posee una serie de mal interpretaciones y
prejuicios propios de la psiquiatría de esos años, mientras ignoran factores
genéticos de descubrimiento reciente.
Existe otro diagnóstico
de Hitler que habla de neurosis, histeria, paranoia, tendencia edipico,
esquizofrenia, "humillación infinita" y "sifilofobia", mal
que describe como el temor a contaminarse la sangre a través del contacto con
una mujer. Pero menciona en forma vaga sus fuentes y no ofrece ninguna prueba.
En otro diagnostico se
reporta que Hitler fue diagnosticado "peligrosamente psicótico" con histeria y ceguera no orgánica (un
trastorno bastante usual en las personas que sufren la histeria pero que ahora
se catalogaría como un trastorno de conversión, dando paso a un trastorno
antisocial de la personalidad) algunos fragmentos de la historia clínica perdida
de Hitler después de haber sobrevivido a un ataque de gas mostaza.
El informe de Langer
también concluyó que Hitler amaba a la pornografía y el sexo masoquista, y en
particular que tenía "tendencias coprófagos o sus manifestaciones más
leves" en sus relaciones heterosexuales y masoquista deriva
"gratificación sexual del acto de que una mujer orinar o defecar en él". Langer llegó a la conclusión de que Hitler fue "probablemente un
psicópata neurótico al borde de la esquizofrenia."
La BBC rodó un
documental titulado: “Inside the mind of Adolf Hitler” donde el principal
problema de Hitler giraría entorno a lo que hoy denominamos el “Complejo de
Mesías” en la cual la persona cree firmemente que su misión es salvar el mundo
(aunque a veces lo destruya ya que asume el papel del "Mesías
luchador" y no el Mesías que se sacrifica por la humanidad). Según los
especialistas esta creencia delirante proviene del hecho de que la mayoría de
los hermanos de Hitler murieron cuando éste era pequeño, así, para lidiar con
el dolor de la pérdida, Hitler pensaba que él había sobrevivido por un motivo
particular: salvar Alemania y después al mundo entero. La personalidad de
Hitler está basada además en la acción mesiánica en todos los aspectos de la
vida. Se considera a sí mismo salvador de su pueblo, portador de sus ideales y
esperanzas, el único capaz de cumplirlas.
Las conductas impropias para un chico normal de clase media austríaca y horribles pesadillas nocturnas que se repetían cada noche llevaron al médico de la familia Hitler, el doctor Ernest Bloch, a consultar con un especialista para saber qué hacer con el paciente que soñaba con monstruos malignos, caídas hacia abismos profundos y negros como la noche y persecuciones en las que invariablemente era capturado y azotado hasta desear la muerte.
Las conductas impropias para un chico normal de clase media austríaca y horribles pesadillas nocturnas que se repetían cada noche llevaron al médico de la familia Hitler, el doctor Ernest Bloch, a consultar con un especialista para saber qué hacer con el paciente que soñaba con monstruos malignos, caídas hacia abismos profundos y negros como la noche y persecuciones en las que invariablemente era capturado y azotado hasta desear la muerte.
El doctor Bloch, de origen judío, dejó constancia
en varios escritos hallados por Marks, de la consulta realizada a otro judío,
el propio Freud, que fue terminante en el diagnóstico: “internación y
tratamiento”. Según en 1895 Sigmund Freud habría recomendado que el futuro
führer, entonces con 6 años, fuera internado en un instituto de salud mental
para ser tratado por su conducta patológica. Monstruos y abismos invadían cada
noche los sueños del pequeño Adolf.
Adolf Hitler ni fue
internado ni recibió tratamiento alguno y años después revelaría, en el reflejo
escrito más fiel de su pensamiento político y de la forma en que él
interpretaba su propia biografía, Mi lucha (Mein Kampf).
Marks está convencido de que Alois (padre) se negó a seguir el consejo dado por Freud, esto es, internar a Adolf para un tratamiento psiquiátrico, sólo para evitar que cualquier examen médico pudiese delatar el maltrato, que también era físico. Fue una decisión que cambiaría el futuro.
Conclusión
Los estudios posteriores a la personalidad de Hitler son una prueba de fuego para la interpretación del nazismo, concepción de mundo y de la política, en la mente de Hitler, personaje que arrasó multitudes y justificó la muerte de millones de seres "diferentes" entre los que incluyó principalmente a judíos (a quienes aplicó lo que se llamaba la solución o exterminio), pero que también condenó a idéntica suerte a católicos, gitanos y opositores políticos o ideológicos. Un vendaval de locura que afectó a Europa durante casi una década, con picos de frenesí, hasta el desastre final. Aunque todo está muy mezclado con las manías persecutorias y la desmesura de sus crímenes. La mentalidad del dictador se encontraba exclusivamente enfocada a la reivindicación del poder absoluto. El Führer parece encarnar la misma esencia de la brutalidad, la encarnación del mal.
La vida íntima de Hitler ha dado lugar a muchas especulaciones. Aunque algunos
indicios llevan a considerarlo un sadomasoquista que sometía a sus amantes a
crudas experiencias. Producido por un trauma infantil al sorprender Hitler a sus padres teniendo relaciones. Erich From decía que los
deseos sexuales de Hitler eran más en medida voyeuristas, sádico anales, con el
tipo inferior de mujeres y masoquista
con mujeres admiradas.
Aquel individuo tan repugnante, bizarro, un "hombrecillo insignificante" según sus críticos logró extrañamente, sin embargo, sobrepujar algunas de las mayores hazañas políticas y militares de la historia. La personalidad de Hitler se puede cualificar de una personalidad contrarrestada, contraproducente, basada en sus esfuerzos para superar rápidamente sus discapacidades, sus debilidades y sus humillaciones, para vengar las lesiones del pasado. Lo que es evidente e incontestable, es que Hitler fue durante la mayor parte de su vida un psicópata y un manipulador psicológico a tiempo completo. ¿fue Hitler realmente un enfermo mental, y en caso de que lo haya sido, qué lo hizo capaz de acumular semejante poder, a pesar de ello? Los crímenes que cometió pudieron deberse en parte al desprecio ante sus propias debilidades y como venganza por los abusos sufridos durante su infancia...
Se cuestiona que quien padece una incapacidad mental no hubiera podido actuar con tanta habilidad para ascender al poder y luego consolidándose en el poder en sí mismo mediante un cálculo y una auto-disciplina extremadamente brillantes y cuidadosa. La idea principal y popular es que se basa su locura a su enormidad de sus crímenes.
Aunque Hitler era claramente un psicópata en el sentido estricto del término, que involucra tendencias obsesivas, histriónicas, narcisistas y hasta paranoides, pero no era un esquizofrénico. Como diagnostico habitualmente confundida en ese entonces era depresión maníaca ahora denominada trastorno bipolar, era un neurótico.
Aquel individuo tan repugnante, bizarro, un "hombrecillo insignificante" según sus críticos logró extrañamente, sin embargo, sobrepujar algunas de las mayores hazañas políticas y militares de la historia. La personalidad de Hitler se puede cualificar de una personalidad contrarrestada, contraproducente, basada en sus esfuerzos para superar rápidamente sus discapacidades, sus debilidades y sus humillaciones, para vengar las lesiones del pasado. Lo que es evidente e incontestable, es que Hitler fue durante la mayor parte de su vida un psicópata y un manipulador psicológico a tiempo completo.
Se cuestiona que quien padece una incapacidad mental no hubiera podido actuar con tanta habilidad para ascender al poder y luego consolidándose en el poder en sí mismo mediante un cálculo y una auto-disciplina extremadamente brillantes y cuidadosa. La idea principal y popular es que se basa su locura a su enormidad de sus crímenes.
Aunque Hitler era claramente un psicópata en el sentido estricto del término, que involucra tendencias obsesivas, histriónicas, narcisistas y hasta paranoides, pero no era un esquizofrénico. Como diagnostico habitualmente confundida en ese entonces era depresión maníaca ahora denominada trastorno bipolar, era un neurótico.
En la madrugada del 29
de abril de 1945, dictó su testamento y contrajo matrimonio con Eva Braun. Un
día después, ambos se suicidaron. Sus cadáveres fueron sacados al jardín de la
cancillería, rociados con gasolina e incinerados.
Extra: TEPT, TLP, TAP, TAB, THP, TNP, histeria, esquizofrenia, paranoia, etc... o no hay evidencia de una enfermedad mental objetivamente médica pero si su carácter autodestructivo.
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