sábado, 12 de mayo de 2012

Marcha por la Paz (1997)

Este es un blog especial para mi, les comparto mi primer articulo publicado  en una revista. Se llama Marcha por la paz publicado en la revista Dialogos  boletin semestral num. 9 de la facultad de Filosofia en marzo del 1997. Recuerdo ese dia, nos congregamos a las afueras de la facultad, en ese entonces estudiaba filosofia y letras en la Universidad Veracruzana. Siendo un espiritu revolucionario y libre hice esta cronica de la marcha y la redacto tal y como se publico.
El lunes 12 de enero de 1997 aproximadamente a las 15:40 hrsy un trafico lento se dejaba ver en el centro de la ciudad de Xalapa. Las personas tenian su movimiento normal ante la vida.

Un nutrido grupo de personas se reunian en la unidad de humanidades. Estudiantes y algunas personas del pueblo clamaban en un solo grito: "queremos justicia". Con brasos firmes y seguros levantaban carteles sobre sus cabezas diciendo: "dialogo SI, masacre No".

Son las 16:00 hrs y el grupo se preparaba para salir con mantas, carteles y pancartas, llevados a un solo destino, la plaza Lerdo. Caminamos baja las miradas perplejas e inciertas d elas personas que giraban a su alrededor. Con rapido avance rompieron el viento  e hicieron sonar los claxon de los automoviles. Personas que sobrepasaban la plaza veian a los lejos la gran pancarta que sobresalia a las demas exclamando "La guerra de baja intensidad y etnocido no debe ser la solucion del gobierno federal al conflicto de Chiapas". Jovenes zapatistas, el frente juvenil, estudiantes de antropologia, historia, sociologia y filosofia, asi como maestro y gente del pueblo, se unian a una misma voz y aun mismo coro proclamando "Justicia y Libertad". Finalmente, la plaza se inundo de personas que compartian un sentimiento de simpatia y apoyo hacia nuestros hermanos indigenas de Chiapas.

Gente que pedia al unisono el desarme de los grupos militares; el cese al avance y cerco militar sobre las posiciones zapatista, el castigo a los autores intelectuales de la masacre a Acteal y el fin de la discriminacion del govierno hacia la comunidad indigena.

Asi pasando la tarde de aquel dia que para algunos quedara en el olvido, pero para otros quedara grabado en nuestras mentes como una de las protestas publicas hechas por el pueblo hacia su govierno en un pais en transicion, quedando asi nuestras ilusiones convertidas en esperanzas.

"El mundo es un monstruo de energia, sin aumento ni ingreso, solo es ansia de PODER".

miércoles, 9 de mayo de 2012

La Pareja y sus Parametros

Hola Gracias a la sugerencia de la Srita Sonia R. para hacer un blog sobre la relacion de pareja y sus parametros le escribo este trabajo con un anexo de un texto publicado en la red.  
La convivencia no mata el amor. Pero ciertos parámetros relacionados con el compartir la vida bajo el mismo techo puede dejarlo agonizando. Por eso, hay que estar atentos para que no se activen las cosas negativas que destruyen y desgastan la relacion.
Algunas claves son:

1.- La rutina. ¿Hay algo más aburrido que hacer o recibir siempre exactamente lo mismo? Esto nos acostumbra a no tener sorpresas ni a que suceda nada fuera de lo común, lo que puede generar que nos hartemos o, aún peor, que alguna cosa (o persona) diferente fuera de casa nos parezca un estímulo interesante.

2.- La poca tolerancia. Ampliar los márgenes de tolerancia genera relaciones más duraderas y placenteras. No tienen que aguantar cualquier cosa, sino ponerse en el lugar del otro, entender qué desea o necesita (aunque no se trate de algo que se nos podría haber ocurrido) y acompañar el proceso o dejarlo ser.


3.- La falta de respeto. No son solamente las palabras o acciones fuera de lugar, sino también no permitir que nuestra pareja sea quien es y ocupe el lugar que desea en la vida. Cercenar espacios o posibilidades no aporta a la unidad de la pareja, por el contrario, provoca resentimientos que se van agrandando con el correr del tiempo. Esto también se aplica al revés, si permitís que te limiten a niveles molestos o decididamente intolerables, esto mata al amor, vivan o no bajo el mismo techo.


4.- El ser posesivo (a). Estar siempre pendiente de qué hace o deja de hacer quien acompaña nuestros días, tener celos desmedidos, revisar sus objetos personales (mails y celulares incluidos) son ideas muy poco prolíficas. Una cosa es vivir juntos y, otra muy diferente, invadir la intimidad del otro. Si sufrís de falta de confianza, dedicate a solucionar tus problemas intrapersonales antes de crear una situación desagradable sólo para exteriorizar tu inseguridad interna.

5.- La poca ayuda. Que el peso de todas las responsabilidades de la casa (hijos incluidos) recaiga en una sola persona (en la amplia mayoría de los casos, las mujeres) suele ser un punto de fricción enorme, en especial, cuando ambos trabajan fuera del hogar. El compañerismo es la base más sólida para que una pareja funcione sobre rieles.


Las mujeres tienden a ser pragmáticas y los hombres a ser eróticos. Ellas escogen a su pareja buscando seguridad y estabilidad económica. Por su parte, los hombres tienden a ser sensuales y siempre tienen una idea de las características físicas que desean de su compañera. En ambos casos, al conocer a la persona que se ajuste a su imagen mental, buscarán involucrarse rápidamente. Pero muchas veces hay actitudes que pueden generar incomodidades y actuar de manera poco positiva para el bienestar de ambos. Consejos para identificar estos parámetros y frenarlos a tiempo.
De esta manera se puede observar que las mujeres seleccionan a su pareja de acuerdo a la estabilidad que pueda ofrecerle, tanto a ella como a sus hijos. Los hombres prefieren atributos carnales y fisonómicos.
La hembra humana mantiene relaciones sexuales cuando no está "en celo". Las hembras de la mayoría de las especies animales, solamente tienen relaciones sexuales para procrear. La mujer en tiempos remotos necesitaba que el hombre le acompañara a ella y a sus "cachorros" para sobrevivir el les proporcionaba protección, seguridad y alimentos. Entonces se las ideó para conservar al hombre a su lado. Así, sostuvo las relaciones sexuales más allá del celo y del mandato de procreación y conservación de las especies.

El hombre, con su carga genética ordenándole sembrar la especie, pero teniendo que pelear y arriesgar su vida por cada mujer en celo, prefirió mantenerse al lado de quien le proporcionaba amor y cuidado, amén del sexo, sin tener que fajarse cada vez.
En tiempos modernos, la mujer sigue buscando en primer lugar un buen proveedor, seguridad y alimentos para sus "cachorros", y el hombre procurará buenos genes para su prole que seguramente estarán presentes en las mujeres con juventud, fortaleza y simetría que muestren genes fuertes.
Para el hombre buscar proporción en los senos, las nalgas o los cachetes femeninos no será mayor problema, sin embargo para la mujer ¿Cómo podría responder quién es más el fuerte: un millonario o un fortachón musculoso?
La seguridad, la protección y los alimentos, en la vida presente, no los dan los músculos como en la prehistoria, ni las habilidades para cazar o pescar, sino los recursos que disponga.
Es bueno destacar que surgen otras concepciones que indican que la mujer comenzó a tener sexo con los hombres, aunque no fuera para concebir, simplemente porque le gustó y dado que el ser humano piensa y crea, a diferencia de los animales, pues decidió hacerlo.
Lo cierto es que entre las alteraciones bioquímicas que provoca el enamoramiento, la selección y escogencia siguiendo patrones genéticos y los métodos de clasificación y preferencia, el amor, sin lugar a dudas, es algo más que asuntos del corazón.
¿Cómo te gustaría que fuera tu pareja?
Cada persona es única en sus elecciones y cada pareja en general también decide a qué tipo de pareja desea unirse. No existe una receta de cocina al respecto pero en lo que se conoce como “deseabilidad social”, todo mundo cuando realmente tiene la intención de tener una pareja se porta verdaderamente amable. La deseabilidad social  hace que mostremos nuestra mejor cara a la persona amada e incluso somos muy comprensivos y cooperativos.

En este universo nada está suelto, a nivel de nuestro cerebro en la deseabilidad social, también se empieza a producir una sustancia que se llama feniletilamina , es químicamente un neurotransmisor, que nos hace muy colaboradores  e inhibe el hambre. No solo se mezclan elementos psicológicos sino algunos mitos o falsas creencias relacionadas con la pareja, mismos que a fuerza de repetirse se convierten en una realidad que enturbia las relaciones y terminan convirtiéndose en verdad. Van desde: la vida en común, la sexualidad, el amor, la convivencia con los hijos, etcétera. 

No existe un solo resquicio de nuestras vidas (el dinero, el amor, el cuidado de los hijos, las relaciones sexuales, la distribución de las tareas cotidianas del hogar, las vacaciones, etc.) en donde los mitos estén ausentes, y desafortunadamente nuestra propia ignorancia los fortalece aún más. Algunos ejemplos de ellos: “Si nuestro amor es verdadero, el sexo entre nosotros será siempre maravilloso”, “Yo seré el/la mejor amante que jamás hayas tenido”, “El amor en la pareja lo puede y lo perdona todo”,  “Si no siento celos en mi relación de pareja, es que no amo de verdad a esa persona”,  “La dureza es uno de los rasgos masculinos de mayor valor”, “Los hombres no lloran”.
El mito  de la media naranja
Encontrar verdaderamente a la media naranja, es también un mito y trae consecuencias más negativas que positivas.  Por un lado, al encontrar una media mitad supone que nosotros estamos incompletos y necesitamos de alguien más para ser feliz, esto es, somos seres incompletos y es responsabilidad de la pareja cubrir nuestras expectativas, así es labor del otro completarnos.  Por el otro lado, si nuestra pareja está incompleta nosotros seremos los responsables de hacerle feliz.  Sumando esfuerzos de esta manera somos seres incompletos y la pareja terminará haciéndonos más incompletos aún.
Todo mundo tenemos la pareja que buscamos
Esta afirmación puede ser muy categórica y terrible sobretodo cuando emocionalmente nos sale muy costoso estar conviviendo con alguien en el terreno: sexual, psicológico, social, económico, espiritual, familiar, y más. Pero la vida es de elecciones y muchas veces elegimos quejarnos constantemente por no tener la pareja que tenemos.  De hecho los problemas en la vida tienen un formato muy simple. ¿Piensa en aquellas cosas que para ti en la relación de pareja son un problema?. Ahora voy a adivinar ¿por qué los tienes?. Estos se deben a que “no queremos perder lo que tenemos” o “anhelamos aquellas cosas que no tenemos”.
¿Por qué en ocasiones nos quejamos de no tener a la pareja que deseamos?
El origen de este vacío tiene relación con:

  • Los aprendizajes de nuestra familia de origen, los modelos aprendidos en la propia familia.
  • Nuestras propias carencias afectivas de personalidad.
  • En ser incapaz una vez que estamos en pareja de pensar en pareja predominando el egoísmo de uno de los miembros.
  • Por la forma como nos explicamos las cosas que suceden en nuestra vida, culpando a los demás de nuestras elecciones (locus de control externo ) y difícilmente haciéndonos responsables de nuestras decisiones (locus de control interno).
  • Muchas veces nos da un miedo terrible hacernos responsables de nosotros mismos.
  • Llegamos a depositar nuestras expectativas de felicidad en la pareja, cuando esto es una labor puramente personal.
  • Ninguna persona que se sienta insatisfecha consigo misma, puede ser capaz de convivir en pareja pues aún ofreciéndole condiciones favorables tratará de verle el aspecto negativo a la vida.
  • A veces me siento la última Coca del desierto y siento que nadie me merece, esto es, me siento superior a mi pareja y siento que al estar con e/ella le hago un favor al pobrecito.
  • Los patrones psicológicos, sociales o culturales de belleza hacen crisis en la cabeza me hacen cuestionarme la conveniencia de estar con mi pareja.
  • En ocasiones desde el inicio de la relación no estaba realmente convencido de estar con mi pareja actual, es decir, no tenía realmente un compromiso de pareja.

Si idealizamos  a la pareja, al fracturarse esas expectativas sufriremos verdaderamente. Mientras más alto volamos nos duele más la caída.
"Las parejas reales, de carne y hueso son personas con virtudes y defectos y si existen. Mientra tanto, las pareja ideales son de apariencia, son personas que tratan de ocultar su condición de seres humanos, se refugian en la apariencia".
¿Por qué veo cualidades en mi pareja que realmente no tiene?

  • Porque soy incapaz de reconocer que mi pareja es un ser humano como yo con virtudes y defectos.
  • Porque tengo miedo a enfrentar mi soledad.
  • Porque estoy acostumbrado a quejarme la mayor parte del tiempo (hacer el papel de víctima).
  • Porque interiormente no me respeto yo mismo.
  • Porque tengo un autoestima muy baja.
  • Porque no me conozco como persona interiormente.
  • Porque no estoy consciente que la felicidad es una tarea interior. No es una meta sino un camino, pero deposito mi felicidad en mi pareja.
  • Porque no se establecer relaciones de compromiso.
  • Porque creo que nadie en este mundo podría entenderme.
  • Porque creo que no existe realmente una pareja que se puedan llevar medianamente bien (proyección) conmigo.
  • Porque siempre se me hace normal vivir en el pleito.
  • Porque no se construir mi propia felicidad.
  • Porque más vale malo por conocido que bueno por conocer.
  • Porque supongo que en el sexo nadie más podría entenderme.
  • Porque soy incapaz de reconocer que elegí mal a mi pareja.
  • Porque he construido una imagen social que no voy a destruir solo por cambiar de pareja.
  • Porque ya tenemos hijos y no voy a dejarlos sin su padre/madre.
  • Porque tenemos proyectos materiales que a mi me han costado y no voy a dejarlos en manos de alguien más (un/una amante).
  • Porque pensándolo bien TODOS LOS HOMBRES/TODAS LAS MUEJERES son iguales.
Sugerencias para el cambio

  • Todo lo que se resiste, persiste.
  • Mientras más altas son las expectativas con respecto a la pareja y no se cumplen, mayor es el dolor y frustración que experimentan.
  • La relación es como un jardín que necesita ser cuidado y cultivado por ambos miembros.
  • La felicidad en la relación de pareja, en principio es un trabajo más personal, y en segundo lugar es un trabajo de conjunto.
  • No se puede exigir en la pareja, lo que uno mismo no es capaz de dar. “Nadie da lo que no tiene”.
  • Los problemas de la pareja, dependen en realidad de la personalidad y las carencias de cada uno de sus  miembros.
  • Cuánto más responsables sean cada uno de los miembros de sus propias responsabilidades afectivas, más felices podrán ser.
  • Cualquier pareja puede crecer en las situaciones de crisis más graves si son capaces de verlas como una oportunidad de crecimiento y no como un obstáculo.
  • Si todo esto no funciona, “pedir ayuda profesional”.
Una última opción es cambiar de paradigma “aprender a quererse a si mismo para poder querer a alguien más”, el resultado sería: En vez de preguntarme: ¿Por qué no tengo la pareja que quiero? Sería ¿Por qué no aprender a querer a la pareja que tengo?

lunes, 7 de mayo de 2012

Estar Viejo

Al hablar de viejos, ancianos, personas de la tercera edad o adultos mayores, se hace referencia a todos aquellos que tengan 60 años o más de edad. La sociedad de Geriatría y Gerontología de México A.C. ha denominado las etapas de la vejez como:
1.- De 45 a 59 años Pre vejez
2.- De 60 a 79 años Vejez
3.- De 80 y más años Ancianidad

¿VIEJO YO?

La vida trae consigo el inexorable paso del tiempo, crecer, sin embargo, parece que duele. Todos tememos la llegada de la vejez, demasiado asociada a enfermedad, deterioro, soledad. Me pregunto ¿estamos preparados para envejecer? Sé que nadie está pre-parado para nada, todos tenemos que aprender a tolerar el paso del tiempo, tiempo que viene asociado a la palabra muerte. Nadie nos educa para saber vivir sin huir del final. Si les dijera que tanto jóvenes como viejos estamos igual de cerca o lejos de la muerte. A todos, algún día, nos llegará la hora, mientras tanto hay que vivir con esa intensidad.

La vida de cada uno depende de sus propios pensamientos y deseos, nada de suerte o casualidad. Llegar a mayores para estar en un asilo, maltratados, o en casa de un familiar, como un inútil, dependen de lo que nosotros hayamos hecho para conseguirlo. Tal vez sea el momento de decirles que cada uno tiene que aprender a ocuparse de su vejez. ¿Queremos estar en manos de otros? ¿Queremos pedir una limosna de amor? ¿Queremos ser unos pobres viejos?

Es mejor que cada uno se ocupe de sus cosas y sabemos, una vejez sin dinero no puede ser buena. Con dinero podemos comprar servicios y calidad de vida, entre otras cosas, para no depender de nuestros hijos. Desde jóvenes tenemos que cuidar nuestros deseos para permitirnos una vida menos sufriente. Tener dinero no quiere decir estar por encima de los demás, quiere decir que uno es capaz de trabajar para lo que desea. Decir yo quiero tal cosa y no tener el dinero para ello, es lo mismo que decir yo no quiero.
No todos llegaremos a viejos, sin embargo, un joven puede sentirse más viejo que alguien que le doble en la edad. La vejez es lo de menos, tratar de ocultar el paso de los años es la única vejez. Es muy frecuente ver personas obsesionadas por su aspecto físico, por ocultar sus arrugas, por vestir de forma juvenil, con la intención de permanecer en un tiempo de su vida. Sin embargo, por mucho que queramos escapar de ello, no vamos a poder. Hay que conquistar los años con dignidad, lo que no quiere decir que no tengamos que cuidar el cuerpo que tenemos, sabiendo que cada arruga forma parte de nuestro ser.

Otras personas, parecen más resignadas y sólo nos hablan de sus dolores, padecimientos, pérdidas, como un deprimido cuando habla de sí mismo. Ya lo dice el poeta: Hubo un instante en mi vida que mis arrugas y mis dolores tenían más fuerza que mi pensamiento, en ese instante fue donde envejecí. El envejecimiento es, entonces, sentirse viejo, caduco, inservible. No tener deseos es lo que nos conduce irremediablemente a la muerte y ser mayor no significa “no desear”, significa tener deseos diferentes, nuevos.
Se recomienda a cualquier edad comenzar a aprender una nueva disciplina, ya sea aprender cosas nuevas o mantenerse ocupado en algo, tener medios distractores, comenzar algo, porque más allá de terminarla o no, lo que interesa es la dimensión que le da a una persona ser aprendiz en algo, la energía que se genera y los deseos.
No son las neuronas las que se deterioran, son las relaciones sociales.la vejez es el estado de una persona que, por razón de su crecimiento en edad sufre una decadencia biológica de su organismo y un receso de su participación social”. Justamente una vez que uno se jubila pierde un montón de relaciones, parece que el jubilado no es importante para nadie. Tristemente, la sociedad tal y como está planteada, nos trae una vejez marginal, donde se nos va apartando de los lugares, amores, amistades.
El periodo de envejecimiento se caracteriza psicológicamente por los esfuerzos que debe realizar el individuo para adaptarse a los cambios biológicos y limitaciones físicas y a las nuevas condiciones de vida que supone el envejecimiento.
Los momentos críticos más importantes por los que tiene que pasar todo anciano son: pérdidas de relaciones afectivas significativas, especialmente la pérdida de la pareja, la aparición de una o más enfermedades que constituyen una amenaza para la vida o una limitación de la capacidad de autonomía.
No cabe duda de que a pesar de que la vejez tiene elementos positivos y de que se puede vivir de forma satisfactoria, es una edad de pérdida. El anciano vive con la esperanza de perder lo menos posible, de conservar los logros obtenidos. Un buen aprendizaje en la frustración y en la aceptación de los impedimentos que se van a encontrar a lo largo de la vida supone, indudablemente, la mejor forma para prepararse para la tercera edad.
Los cambios psicológicos los podemos dividir en tres grandes áreas:

1.       Cognitivo, 2. Afectivo, 3. Sexual.


                     “La vejez despierta miedo. Se asocia a ella la idea del deterioro y la muerte”


¡Señores! para vivir hay que desear. Una persona con 50, 60, 70 , 80 años puede emprender un nuevo proyecto de vida, hacer lo que desee.

Ocurre que tendemos a comparar, a decir antes podía hacer esto y ahora no, antes, antes… Uno se olvida que ahora, cada instante, es distinto. No podemos pensar cada tiempo de la vida con las mismas ideas. Por ejemplo, la adolescencia con las ideas infantiles, la vejez con las ideas de cuando uno tenía 30 años. Si pensamos ese tiempo de nuestra vida con las mismas ideas de antes, nos va a ir mal. Lo nuevo hay que pensarlo con nuevas ideas, de esta forma no existe la vejez, es una etapa más de la vida, donde no se acaban los deseos, hay otros deseos. Hay que averiguar cuáles son.

 La vejez es una etapa de la vida y el envejecimiento es un proceso que ocurre a lo largo de la vida. Ambos objetos de conocimiento son multidisciplinares puesto que el ser humano es una realidad bio-psico-social. La psicología como disciplina científica que se ocupa del comportamiento humano a los niveles de complejidad necesarios es una disciplina básica de los cambios psicológicos que se producen en el transcurso de la vida.

¿Joven? ¿Viejo? Lo importante es que no hay edad para comenzar y disfrutar de una nueva vida.