La
depresión es una enfermedad que afecta, hace sufrir e incapacita, tanto al
hombre como a la mujer. Sin embargo, la manera de vivirla y manifestarla, puede
ser diferente para ambos sexos.
La Depresión en las Mujeres
A pesar de que los síntomas
internos de la depresión, son los mismos para los hombres que para las mujeres,
cada uno de ellos puede vivirlos y manifestarlos, de una manera diferente.
Existen determinados factores que contribuyen a la aparición de
ciertos tipos de depresión específicos de las mujeres, como las fluctuaciones
hormonales o presiones sociales y culturales que recaen especialmente en el
sexo femenino.
Además, la forma de reaccionar
antes el estrés y los problemas puede ser diferente en ambos sexos y dar lugar
también a diferentes trastornos psicológicos cuando esas reacciones no son
adaptativas.
La mujer deprimida:
Se pone triste y apática, tiende a culparse a sí misma de todo, su
autoestima disminuye, evita cualquier conflicto, aun aquellos que son
necesarios, generalmente tiende a dormir mucho, puede refugiarse en la comida.
La mujer es más propensa a
deprimirse, porque: Los cambios hormonales pueden contribuir a la depresión
y culturalmente las mujeres se enfrentan a factores como: mayor discriminación, abuso físico y
emocional, exceso de responsabilidades y de roles, al tener que atender el
hogar y el trabajo fuera de casa, etc.
Causas biológicas y hormonales
de depresión en mujeres
Depresión premenstrual. Las fluctuaciones hormonales durante el
ciclo menstrual pueden dar lugar a problemas de depresión en algunas mujeres,
con síntomas como irritabilidad, fatiga, tristeza, labilidad emocional.
Depresión postparto. Muchas mujeres experimentan un “bajón” tras el
parto. Por lo general, es una respuesta normal, debido al estrés al que han
sido sometidas, pero en algunas los síntomas son lo bastante severos como para
considerarse un trastorno del estado de ánimo.
Embarazo. Los numerosos cambios hormonales
que se producen durante el embarazo pueden contribuir a la aparición de una
depresión, sobre todo en mujeres con cierta predisposición. Otros problemas,
como los abortos, embarazos no deseados o infertilidad, pueden acabar
desencadenando también depresión en algunos casos.
Menopausia. Durante la menopausia y la etapa anterior a la ella,
llamada peri menopausia se producen fuertes fluctuaciones hormonales en las
mujeres. Las mujeres que han padecido depresión en el pasado, tienen un mayor
riesgo de deprimirse durante esta etapa de sus vidas.
Causas psicológicas y
psicosociales de depresión en mujeres
Estrés. Hombres y mujeres reaccionan ante el estrés de formas
diferentes. Las mujeres tienden a buscar el apoyo de los demás; este apoyo hace
que generen una mayor cantidad de oxitocina, una hormona que las protege del
estrés y la depresión. No obstante, cuando no encuentran el apoyo que
necesitan, pueden sentirse aún más deprimidas. En las mujeres, además, se
activa más el sistema límbico (centro de las emociones) cuando están sometidas
a estrés y permanece activado más tiempo que en los hombres. Es decir, su forma
de reaccionar ante el estrés es más emocional, lo que puede contribuir a la
depresión. Por otra parte, según las investigaciones realizadas, las mujeres
padecen mayores niveles de estrés que los hombres debido a que, además de sus
responsabilidades laborales, suelen tener mayores responsabilidades familiares
que los hombres.
Rumiación. Cuando las mujeres están estresadas, tienen una mayor
predisposición a darle vueltas mentalmente a sus problemas, pensamientos
negativos, causas de su depresión, etc. lo cual contribuye a mantener la
depresión. Los hombres, por el contrario, tienden más a intentar distraerse y
no pensar en sus problemas. Lo ideal sería una postura intermedia, en la que
pensaras lo suficiente en tus problemas como para tener claro qué está pasando
y qué puedes hacer para remediarlo, y luego intentaras distraerte y no darle
vueltas a las cosas de manera excesiva o cuando no te llevan a ninguna parte.
La imagen corporal. Las fuertes presiones sociales sobre las
mujeres y la importancia que la sociedad concede a la belleza física, la
apariencia corporal, la delgadez, la juventud, etc., es motivo de descontento,
frustración e incluso odio hacia sí mismas para muchas mujeres, llegando
incluso a poder desencadenar síntomas depresivos. Desgraciadamente, esta
presión no solo no está disminuyendo, sino que se está extendiendo también
hacia los hombres.
La Depresión en los Hombres
Normalmente tiende a considerarse que la depresión es más frecuente en
las mujeres. No obstante, si tenemos en cuenta que los criterios para definir
la depresión se han centrado más en las mujeres y que los hombres tienden a
reaccionar de formas diferentes, es posible que no esté tan claro que la
depresión sea más frecuente en el sexo femenino.
Cuando están deprimidos, muchos
hombres tienden a negar sus sentimientos de impotencia y tristeza y a
reaccionar con ira, enfado, frustración o agitación, beben más de la cuenta,
trabajan de forma compulsiva, realizan conductas de riesgo o tienen estallidos
de ira. Esto hace que la depresión en los hombres se pase por alto con
frecuencia, sobre todo cuando se trata de hombres que no suelen expresar lo que
sienten con facilidad, sobre todo sus sentimientos de depresión.
Tampoco es raro que los hombres
se centren más en los síntomas físicos que acompañan a la depresión, como
problemas para dormir, dolores de espalda o de cabeza o problemas sexuales, lo
que hace que ni ellos mismos reconozcan que están deprimidos. No obstante, los
hombres deprimidos tienen 4 veces más probabilidades de suicidarse que las
mujeres deprimidas. Por este motivo es muy importante reconocer y tratar la
depresión.
Síntomas de depresión en
hombres
A pesar de que los síntomas
internos de la depresión, son los mismos para los hombres que para las mujeres,
cada uno de ellos puede vivirlos y manifestarlos, de una manera diferente.
Aunque el hombre, cuando está deprimido, también puede estar triste y
decaído, con frecuencia:
Se pone irritable, se enoja con facilidad, tiende a culpar a los demás
de sus problemas, crea conflictos con facilidad, duerme poco, no buscan ayuda, tienden
a recurrir:
Al alcohol, las drogas, la Tv o el trabajo como una manera de
"auto-medicarse" y enmascarar la depresión y no acepta que está
deprimido. Porque ve la depresión como una debilidad y se avergüenza, teme que
haya repercusiones en su trabajo, si sus jefes o compañeros se enteran.
Un hombre puede desarrollar los síntomas
más típicos de la depresión, con tristeza, falta de energía y pérdida de
interés en amigos, familiares o actividades que antes le agradaban. No
obstante, entre los hombres se da con más frecuencia que entre las mujeres un
patrón de depresión caracterizado por lo siguiente:
Esconder sus emociones. Tiende a ocultar, incluso ante sí mismo,
sus sentimientos de tristeza, impotencia o baja autoestima, enmascarándolos con
otras conductas, como conductas de riesgo, beber alcohol, etc y mostrar un
ego inflado para contrarrestar su baja autoestima.
Síntomas físicos. En los
hombres puede darse con más frecuencia un tipo de depresión en la que
predominan los síntomas físicos, como dolor de cabeza, dolor de espalda,
problemas digestivos, disfunciones sexuales, problemas de sueño, que no
responden a los tratamientos típicos para estos trastornos.
Ira. Se sienten inquietos,
agitados, enfadados, agresivos, se irritan con facilidad, pueden tener
estallidos agresivos, se ven muy afectados por la crítica de los demás y están
malhumorados y sin sentido del humor. Algunos hombres se vuelven excesivamente
controladores con sus seres queridos. También tienden a culpar a los demás de
sus problemas y crear conflictos.
Conducta imprudente. Pueden empezar a
mostrar conductas de riesgo como un modo de escape, como realizar deportes
especialmente peligrosos, conducir a demasiada velocidad, implicarse en sexo no
seguro, beber demasiado, recurrir a las drogas, o al juego compulsivo.
Principales causas de depresión
en hombres
Las causas de depresión en
hombres pueden ser muy variadas y no necesariamente diferentes de las causas de
depresión en mujeres. No obstante, al igual que entre las mujeres existen
ciertas causas específicas de ellas (como las causas hormonales o ciertas
presiones sociales), entre los hombres, existe una causa de depresión que es
específica de su sexo: la disfunción eréctil.
Disfunción eréctil como causa
de depresión en hombres
La disfunción eréctil o
impotencia en los hombres no solo puede ser una causa de depresión, sino que
también puede producirse como efecto secundario de los fármacos antidepresivos
o en algunos casos, puede ser una consecuencia del estado de ánimo deprimido.
Los hombres con problemas
sexuales tienen el doble de probabilidades de estar deprimidos que los hombres
sin este tipo de problemas. Además, cuando un hombre tiene algún tipo de
problema sexual suele sentirse avergonzado, no habla del tema y no busca ayuda,
porque tiende a pensar que es un reflejo de su falta de masculinidad en vez de
verlo sencillamente como un problema que puede tratarse y solucionarse.
No obstante, si no hace nada,
puede acabar con dos problemas en vez de uno: la disfunción sexual y la
depresión que aparece como consecuencia.