viernes, 28 de septiembre de 2012

El Placer de Aprender


Escuelas que piensa, nación que aprende

Algunas consideraciones acerca del "placer de aprender" tiene que ver con disfrutar de la experiencia del aprendizaje. Esto es: vivir el aprendizaje como una experiencia estimulante. Es saborear el proceso. No basta con sentirse bien por haber alcanzado, al final, unos objetivos y constatar, tras una evaluación, que has llegado a la meta. Esto también es agradable pero, para llegar ahí, no es necesario que el camino sea placentero. Puede ser muy doloroso o, como poco, aburrido y un tanto frustrante.
 
 
 
 El ser humano durante su existencia se enfrenta con la búsqueda de la felicidad como fin superior, en ese proceso entra en contacto con una serie de elementos que le permiten lograr este objetivo pero de manera efímera, pasajera, lo que hace posible que este proceso se transforme en una espiral ascendente que va de encuentro tras encuentro con la felicidad, alternando con la desdicha y los estados que pueden llamarse de neutralidad.

Ese estado de logro cada vez que aparece genera en el ser humano un estado al que hemos denominado de placer. Situación esta que establece en el ser una condición de armonía, equilibrio, sinergia con el entorno y que en la medida que se presenta con mayor frecuencia tiende a originar una atmósfera de éxito que refuerza la personalidad triunfadora, entronizando características que en todo momento deben asumirse con cautela, ya que tanto el éxito como el fracaso son dos impostores, nunca se deja de triunfar ni de fracasar, ya que en todo momento se debe mantener la esperanza del logro.

 El éxito y el fracaso están íntimamente relacionados con el aprendizaje y en este sentido el ser humano ha asumido que cuando el proceso es exitoso es placentero y es así como en su continuum del crecimiento, él se desplaza desde el nivel de dependencia, al de independencia y en tercer lugar a la interdependencia, aprendiendo continuamente, sintiendo y disfrutando cada aprendizaje trascendente o no, de acuerdo a su sistema de valores.

 Cuando el proceso de aprendizaje esta adobado con elementos negativos como un ambiente poco agradable, un "mediador" autoritario, con deficiencias en el proceso de comunicación, poco asertivo, reactivo, el nivel de logros para el discente o aprendiz es sumamente traumático y separado del placer. Aspecto este que en los procesos de aprendizaje del sistema educativo actual, minimiza la velocidad y la calidad de lo que se aprende.
 
En la relación entre Neurociencia y Educación hay dos puntos relevantes para un óptimo aprendizaje:
 En primera instancia, el estado de ánimo del alumno ó la predisposición que éste tenga hacia la captación de una información novedosa. Si el alumno está contento, la información recepcionada será aprendida con mayor facilidad, de lo contrario, las horas frente al profesor poco o nada habrán valido la pena.
 En segundo lugar está la metodología empleada muy importante en la enseñanza porque depende en gran parte de la manera cómo el estudiante se predisponga para aprender.
 Asimismo, se sabe que son las emociones las que conducen la memoria, esto significa que si las emociones son placenteras, el rechazo a información novedosa será menor, y por ende, el aprendizaje más efectivo.
 Para la neurociencia al cerebro se le agiliza el aprendizaje mediante esquemas, mapas, gráficos y cualquier otra herramienta que permita la formalidad y el orden. La información mostrada de forma organizada y estructurada incorpora una actitud positiva para captar la atención del alumno. Dicha información se maximiza cuando ésta se relaciona con aprendizajes previos, es decir, vivencias personales que los alumnos tienen y que permiten entender mejor lo aprendido.
 Estrategias para convertir la información en conocimiento. Cómo atravesar los filtros cerebrales que limitan el aprendizaje.
 Todo lo que aprendemos llega a nuestro cerebro a través de los sentidos y es procesado, almacenado y activado a través de una serie de eventos eléctricos y químicos. Sin embargo, el cerebro no está equipado para procesar los millones de bits de información sensorial que lo bombardean por segundo. Hay obstáculos que toman la forma de filtros y protegen al cerebro de una sobrecarga de información, focalizando la atención sólo en la información sensorial crítica para la supervivencia.
 El objetivo de una enseñanza exitosa es controlar el fluido de información que pasa a través del SAR ( el sistema de activación de la atención) de los alumnos para que, de este modo, la información más útil, la que se puede convertir en conocimiento, alcance las redes neuronales cognitivas superiores en los lóbulos prefrontales.
El placer de aprender está ligado también a un conjunto de elementos internos y externos, ambos controlables, sobre todo lo relacionado con la alimentación la cual influye profundamente en la química del cerebro y en consecuencia en su funcionamiento. En la medida que la alimentación es sana e integral de esa manera responderá el cerebro. Igualmente mientras mayor es el porcentaje de alimentos procesados y envasados con sustancias para preservar es menor la posibilidad de un buen rendimiento mental. Es necesario reforzar la alimentación con minerales los cuales son indispensables para la síntesis de neurotransmisores responsables de la comunicación inter-neuronal. De allí que de acuerdo a la exigencia que se pretenda del cerebro habrá un alimentación más adecuada para esa situación no tanto en cantidad sino en calidad. Esta alimentación deberá ser acompañada por buena respiración, pensamiento positivo íntimamente conectado con el manejo de las emociones.
 Se debe entonces, para lograr que el proceso de "aprender sea un placer", buscar por todos los medios posibles, que el ambiente sea agradable, que el trato entre docente y discente sea de respeto, de compromiso con el aprendizaje, de armonía, participativo, con un elevado nivel de comunicación, proactivo, sinérgico, creativo, divertido, flexible, en condiciones que aceleren y califiquen altamente el aprendizaje, donde el placer de aprender no sea lo más importante, sea lo único.
 El proceso aprendizaje está en sintonía con el cerebro límbico (emocional o de los afectos) que propone el modelo TRIUNO. Ese sector del cerebro, es el encargado de filtrar lo que almacenamos o rechazamos como aprendizaje. Es él, responsable de la motivación. Es donde se expresa al máximo el hecho de que algo te guste o no, para aprenderlo. Es el responsable de celebrar permanentemente la acción de aprender.

Las nuevas organizaciones para el aprendizaje deben estar regidas por los principios del aprendizaje y no de la enseñanza y sustentando las características que siguen:
· Ser flexible, personalizada, coherente, pertinente y comprometida con los problemas del entorno, el cual se sentirá comprometido e identificado con ella.
· Formar parte interna y externa de redes y no verse restringida por el espacio físico, geográfico o temporal, fundamentalmente con los demás niveles del sistema educativo.
· Ser inclusivo, debe acoger estudiantes con demostrables méritos, elevado esfuerzo, perseverancia, determinación y capacidad.
· Comprometerse a brindar al estudiante un ambiente institucional adaptable.
· Estar abierto a los conocimientos originales y creativos.
· Ser auto-organizado en torno de principios centrales, creencias y un fin compartido y elaborado entre todos.
· Ser intergeneracional en la configuración de las vivencias educativas.
· Ser flexible, heterogéneo e innovador.
· Estar centrado en la investigación, la cognición compleja, la búsqueda de problemas y sus soluciones altamente vinculadas al entorno.
· Acoger la ambigüedad y la paradoja como elementos importantes para el avance.
· Ser lúdico, responsable y amorosa.
· Ser sustentador de procesos de aprendizaje placenteros
“La motivación, la autonomía, la personalización, la conexión, la practica y lo personal”
Las organizaciones para el aprendizaje del siglo XXI deben ser organismos dinámicos, adaptables y auto-organizados, no sólo capaces de remozarse, crecer y cambiar, sino además  diseñadas para ello, promoviendo al individuo y a la sociedad, la libertad y la responsabilidad, la unicidad y la interdependencia, el misterio y la claridad, la tradición y la innovación, se debe interesar tanto por la naturaleza del aprendizaje como por los métodos de instrucción. Entendiendo que el aprendizaje nos ha acompañado a cada paso de nuestra vida desde la primera respiración; es la transformación que tiene lugar en el cerebro cada vez que se integra en él una información nueva, cada vez que se adquiere el dominio de una nueva habilidad.
Solo será posible el aprendizaje en su justa dimensión holística cuando sea de equidad: que haga de los más marginados a través de los más favorecidos, sean un ejemplo vivo del ganar, ganar sin egoísmos, debe ser de todos y para todos, sera el placer de aprender siempre.

 
 

lunes, 24 de septiembre de 2012

Sexting

El fenómeno de los adolescentes que se exhiben online.


Muy pocos saben qué quiere decir, pero cada vez son más los padres a los que les preocupa eso que hacen sus hijos o los amigos de sus hijos adolescentes y que se denomina con esa nueva y extraña palabra. El 36% de los jóvenes intercambió fotos en poses provocativas.
Es que sexting significa, ni más ni menos, exhibicionismo online. Nació de la conjunción de las palabras inglesas sex y texting (sexo y envío de textos) para referirse a una de las principales vías de difusión de imágenes, a través de celulares, que circulan por la Web.

El sexting, un fenómeno que se ha venido extendiendo en todo los paises durante los últimos cuatro años, es definido por los especialistas como la tendencia de los adolescentes a intercambiar fotos propias con alto contenido erótico por medio de mensajes de texto desde sus celulares, por e-mail o subiéndolas a las redes sociales.

En México como en otros países varios sitios web, recogen las fotos que los adolescentes (mayoritariamente son mujeres) se toman y envían con seudónimos y con ellas arman fotogalerías. Pero las poses provocativas de los jóvenes son también visibles en redes sociales como Facebook. Según  las causas de este fenómeno van desde la desatención familiar hasta el mayor acceso a los medios tecnológicos, sin que los padres hagan un debido control de uso por parte de los chicos, que no poseen criterios para medir lo que implica subir a la Web o enviar por celular fotos o videos íntimos.

El sexting es consecuencia de los avances tecnológicos que facilitan nuevas formas de interacción social. A lo largo de la historia de los sistemas de comunicación, siempre se han intercambiado mensajes con contenido sexual. No obstante, las NTIC permiten la comunicación mediante imágenes y vídeos, los cuales son intrínsecamente más explícitos y tienen un mayor impacto.

El peligro novedoso del sexting es que ese material puede ser difundido de manera muy fácil y amplia, de manera que el remitente inicial pierde totalmente el control sobre la difusión de dichos contenidos. Se ha señalado al sexting como causante de ciertas consecuencias imprevistas y graves. Se ha relacionado con situaciones tan embarazosas, tras haberse pasado fotos a terceros, que han conducido al suicidio del remitente original.

Asimismo, ha sido señalada como una actividad que puede exponer a los menores de edad al grooming y al ciberbullying, como medio de presión y ridiculización contra la persona fotografiada.  

¿Qué puede llevar a un adolescente a enviar una imagen de alto contenido sexual de sí mismo a su pareja o a alguien con quien quiere flirtear usando el internet o celular?


1) Creen que una imagen en un terminal móvil está segura y no son capaces de proyectar, de imaginar, las variadas formas en que esa imagen puede salir del dispositivo. Un robo, un error, una broma, un extravió o la voluntad de su propietario.


2) Confían plenamente en la discreción, sino el amor eterno profesado, por parte del destinatario del envío. Carecen de experiencia vital suficiente que les invite a pensar en que las cosas, en la vida, cambian por muy diversos factores.


3) Sienten cierta presión de grupo que les lleva a ganar notoriedad y aceptación en este contexto, el digital, tan importante para ellos. Este factor, añadido a la plenitud hormonal, puede generar combinaciones poco recomendables.


4) Las influencias y modelos sociales distan del recato. La exhibición de relaciones sexuales o desnudos por personas no profesionales, comunes, abundan en la Red. Si pueden ver a cualquier persona anónima en su intimidad a través de la Red, no parece tan grave que uno aparezca de esta guisa. El “desnudo” es algo común, hasta cierto punto normalizado.


5) Desconocen las consecuencias que para su vida puede llegar a tener el hecho de que esa imagen comprometida sea de dominio público.


6) La natural falta de percepción del riesgo que acompaña a la adolescencia y el espíritu transgresor desencadenan ciertos desafíos. En algunos casos resulta simplemente divertido, en otros, sirve para coquetear o dar otro contenido a una relación.


Aspecto legal e ilegal
  • Dependiendo del entorno jurídico de cada país el sexting puede derivar en problemas legales (incluso penales) de diverso tipo,15 16 incluyendo:
  • Producción, posesión y/o distribución de pornografía infantil.
  • Corrupción de menores.
  • Vulneración del derecho al honor y a la propia imagen.
  • Difusión ilícita de datos personales (la imagen es considerada un dato personal).
  • Acoso.
  • Sextorsión.
En algunos países y /o estados comenzaron a realizar modificaciones legales para evitar que cualquier adolescente implicado/a en casos de sexting fuese acusado/a de producir o distribuir pornografía infantil o para incluso legalizar el envío consentido de este tipo de imágenes entre mayores de 13 años.


Consecuencias


1.- Riesgo de exposición a pederastas y otros acosadores o chantajistas.
Cuando un menor se hace fotografías de carácter sexual puede provocar un deseo de encuentro a las personas a las que las llegue esa foto o video. Esto puede originar un abuso o corrupción del menor exponiéndole a chantajes sexuales. Por tanto, las personas que practican sexting corren riesgo de que las imágenes se usen para una sextorsión.

2.- Aspectos legales
Dependiendo del país, el sexting puede originar problemas legales como corrupción de menores, acoso, sextorsión, vulneración del derecho al honor, difusión de datos personales y producción, posesión y/o distribución de pornografía infantil.

3.- Riesgos psicológicos
Cuando el menor ve que su imagen de carácter sexual se distribuye sin control a todo el mundo, este se siente humillado y puede acabar con problemas de ansiedad, depresión, perdida de autoestima, trauma, exclusión de la sociedad y a veces puede acabar en suicidio. Estos riesgos psicológicos pueden ser mas graves si existe sextorsión a partir del sexting.

4.- Amenazas
A partir del momento en que enviamos la foto o video de contenido sexual perdemos el control sobre ello ya que el receptor de la imagen puede difundirla a su antojo. También existen formas involuntarias de que nuestra imagen se difunda a todo el mundo. Generalmente no nos percatamos de que una imagen no solo se puede difundir cuando se la envías a alguien y este la re envía, sino que también se pueden producir robos, pérdida de móvil o que un tercero acceda a las fotos sin tu consentimiento. 

“Las fotografías o vídeos pueden entrar en el circuito de la pornografía”.

Cuando la fotografía o video llega a manos de una persona inadecuada, puede utilizar las fotos para chantajear al menor. Esto es lo que se conoce como sextorsión. Esta es una situación complicada ya que amenaza con publicar las fotos si no le sigues enviando contenido sexual o si no tienes contacto físico de tipo sexual con él, generalmente.

Les comparto una página amiga de consejos básicos sobre el sexting:

http://www.sexting.es/

Algunas consideraciones

Lidia Grichener, de la asociación civil Missing Children , explicó En los últimos tres años, son cada vez más frecuentes las llamadas de padres con ese tipo de consultas. Este fenómeno se comenzó a ver con el avance de Internet y con el gran acceso que tienen los chicos a las nuevas tecnologías”.

En opinión del director de la Fundación Proyecto Padres, Adrián Dall´Asta, la brecha generacional que plantean las nuevas tecnologías ha producido una paradoja educativa muy particular, según la cual los hijos enseñan a los adultos el manejo de las herramientas informáticas”.

Según Dall´Asta, este desconocimiento por parte de los padres plantea distintas sensaciones en los adultos, que van desde un temor excesivo hasta una falta de interés, producto de la ignorancia, aunque no de la indiferencia. También está el otro extremo: el de la sobrevaloración de las tecnologías. La motivación de los jóvenes tiene más que ver con la exploración y la facilidad de acceder a las cosas que con una patología”.

La postura ideal de los padres es estar abiertos a un nuevo modelo de comunicación que vino para quedarse, pero que debe tener un gran control y seguimiento diario”.

El exhibicionismo de los adolescentes es una tendencia actual. Vivimos en una época en la que todo lo íntimo se expone. El sexo y la violencia se muestran como si fueran espectáculos, afirmo la psicoanalista Diana Litvinoff, autora del libro El sujeto escondido en la realidad virtual señaló:El término « exposición» puede ser tomado en dos acepciones. Una, en el sentido de exhibición y, otra, como quedar expuesto a un peligro. Los adolescentes son conscientes de la exhibición y están orgullosos de eso porque esta es una época en la que se exalta el ser famoso, aparecer en los medios de cualquier forma posible, e Internet es hoy una pantalla más donde mostrarse. Respecto del peligro, muchas veces el adolescente no es consciente. Hay un alto nivel de ingenuidad”.

Ante la consulta de cómo puede reaccionar un adolescente que descubre que sus fotos o videos fueron usadas con otros fines, Litvinoff dijo: Lo primero que siente es vergüenza. El hace una exposición confiando en cierta discreción del que lo recibe, y esto no es así. Eso le produce una sensación de traición y de vergüenza social”. Y recomendó a los padres: Es importante alertar a nuestros hijos de que hay determinadas expresiones fotográficas o fílmicas que quedan reservadas a la intimidad”.

El doctor en psiquiatría y especialista en niños, adolescentes y tecnología, José Sahovaler, explicó: Todo el mundo se expone desde siempre; no sólo los adolescentes. Pero esto es mucho más importante entre los chicos porque hay un reverdecer propio de la edad. Necesitan mostrarse para reafirmar su sexualidad. Por la mirada del otro, uno se construye y define sexualmente. Si soy atractivo o no; si gusto o no; si soy masculino o no. Estas son preguntas que los adolescentes se hacen acerca de su sexualidad”.

Sahovaler agregó: Las poses provocativas de los jóvenes tienen que ver con dos cosas. Los adolescentes saben de la sexualidad y saben para qué sirve el cuerpo. A esto se suma el exhibicionismo impúdico que se ve en los medios”.

 Conclusión

Internet tiene innumerables ventajas y algunos riesgos, y cuando se trata de nuestros hijos, es importante que los conozcamos bien para poder prevenirlos o, en el peor de los casos, saber actuar frente a ellos. Internet crece y si no queremos que se interponga en la relación con nuestros hijos, es preciso que hagamos de la Red un nexo común del que podamos disfrutar.



sábado, 22 de septiembre de 2012

La Psicología de la Homofóbia

Retomando un interesante articulo de mi colega Jorge Horacio  Raíces Montero.
Diferentes autores discuten la posibilidad de incluir la Homofobia dentro de la neurosis de angustia, ahora en la neurosis fóbica. Para una mayor claridad de la temática, creemos que deberíamos dictaminar a la fobia de la neurosis de angustia como una forma neurótica de-formación polimorfa, ya que la angustia  traduce simplemente la tensión interior que resulta de la imposibilidad de descargar adecuadamente la energía pulsional. Por ello, en la clínica, aparece como expresión sin marco de referencia preciso, deslucido, impidiendo imprimir un nombre que lo nombre. Al poder "identificarla", a través de mecanismos defensivos como la racionalización o la intelectualización, acompañada por objetos paranoides introyectados, es cuando podemos definirla como neurosis fóbica. Así el supuesto objeto-sujeto es pasible de ser atacado. De allí el alivio aparente de librarse de él. Es un mecanismo usado no solamente por las personas sino por Instituciones o grupos de franca patología clínica. Entonces, podríamos comenzar a definir la neurosis fóbica como la sistematización de la angustia sobre personas, cosas, situaciones o actos, que se convierten en objetos paranoides por de-mostrar el lugar de la falta, imprimiendo para su control, como patognomónico, la intelectualización y la racionalización como defensa.
En tanto síntoma, la fobia es un medio específico intenso, concreto, cuyo estímulo es proyectado al exterior para disminuir la angustia, por ende este mecanismo debe ser continuo, menguando displacer en tanto descarga. Como mecanismo compulsivo de repetición debemos señalar que también podemos encontrar elementos fóbicos en la neurosis histérica, en la neurosis obsesiva, en la depresión melancólica, en ciertos delirios sistematizados, hipocondría y como hemos señalado anteriormente, en la neurosis de angustia.
Si bien Freud, ha designado a la neurosis fóbica como "histeria de angustia", hemos podido observar a través de las diferentes investigaciones, que las fobias hacia determinados grupos o personas, está tomando característica propia, identificándola plenamente. En el acercamiento a la problemática de la Homofobia deberíamos encauzar el estudio, dentro del cuadro de neurosis fóbica, hasta tanto se distinga en forma clara y se pueda definir nosográficamente lo  dictaminado. Esta  neurosis fóbica no se limita a la expresión de la angustia específica, sino que se asocia a conductas instaladas en el tabú y el mito, con medios de defensas y contracatexias. Estos síntomas y estos medios de defensas constituyen una estructura clara y distinta, que tiende a reemplazar la angustia de un peligro interno real por el miedo de un peligro externo inexistente. Esta complicación depende de la expresión de los complejos, de los mecanismos inconscientes en los síntomas de la neurosis y muchas veces se confunde por sus características, con la neurosis obsesiva. Fue Freud quien se percató de las relaciones existentes entre estas formas de trastornos y otras neurosis estructuradas o semiestructuradas. Es así, que en la literatura psicoanalítica, la neurosis fóbica es llamada indiferentemente con aquel nombre o con el de histeria de angustia. No nos debemos quedar en la singularidad del fenómeno patógeno y sus derivaciones si no estudiamos los fenómenos del entorno y la sociología que la problemática tabú con sus simbolismos, enriquecen esta expresión patológica.
A medida que el ser persona se va socializando aparecen en la clínica expresiones fóbicas más marcadas hacia determinados grupos de pertenencia que hacia elementos menos personalizados como la agorafobia o la claustrofobia. Tenemos ejemplos muy claros en psicoterapias breves. En oportunidades, vemos en la clínica, como una fobia a los espacios cerrados, se corre lentamente a una fobia de encuentro (con un animal en un ascensor, por ejemplo) para instalarse en una zoofobia.  La  fobia  al  realizar  una declaración en público o simplemente conversar delante de más de tres personas, se convierte en un rechazo visceral en aquel que se expresa públicamente, para instalarse en grupos determinados que gritan su lugar en la sociedad, o que se atreven a no quedarse enclaustrados y salen a mostrar su necesidad de interacción social. Nos estamos refiriendo, entonces, a la fobia que se refiere esencialmente al medio social, al espacio "antropológico" que define la fenomenología, a las  relaciones individuales o colectivas con  el prójimo que se constituye en objeto de angustia.
No hemos constatado en la clínica la unicausalidad de la problemática, pero sí contundentemente, debemos declarar la policausalidad de la misma: restos de fobias de la primera infancia generalmente referidas a elementos  de grandes dimensiones en actitudes amenazadoras de persecución o destrucción (ver "el pequeño Hans: Freud); restos de fobias de la segunda infancia, con elementos repulsivos vividos como muy peligrosos para la integridad corporal y que conlleva la posibilidad del no control. Podemos  detenernos  un  momento  en  una de las características de la anterior descripción y debemos estar sumamente atentos por las interpretaciones que conlleva, es decir, la fobia en relación con situaciones visuales alimentadas y distorsionadas por una gran capacidad imaginativa. Podríamos insinuar que en toda fobia social, existe una importante presencia de restos de pensamientos mágicos infantiles. Esto es de suma importancia, porque podría confundirse con situaciones alucinatorias o delirantes, no es así, no se trata de psicosis encubiertas. Los elementos residuales fantaseados, el éxito en la instalación de defensas como la intelectualización y la racionalización nos permitiría definirle dentro del campo de la temática neurótica. Vemos así, la situación neurótica explorando el espacio en busca de un peligro mal definido, pero con una estructura clara y precisa. Asimismo es harto difícil enumerar todas las situaciones fóbicas tan intrincadas, poco claras e imprecisas y describirlas como hacemos ahora. Pero a través de las pautas anteriormente citadas, sumadas a las características que necesariamente deben aparecer (repetición, nuevos argumentos, insistencia, fantasía), la base será la misma: desplazar la angustia. Por ello, los signos serán diversos y es preciso que lo sean, para desorientar al sujeto-objeto y hacerlo soportar, por medio de todo ese cuidado y patológico tramado, la situación de angustia real.
Las conductas fóbicas consisten en recurrir a determinados artilugios, políticas y sofisticados planes para conspirar contra la angustia. En caso de fracaso, se renuevan vívidamente las conductas evitativas. En caso de éxito se reafirma el seudo-alivio. Por ende las conductas fóbicas siempre conducen con fracaso a la resolución de la problemática básica y con éxito a la reinstalación y afirmación de la situación fóbica. Cuando el objeto fóbico real o imaginado aparece en campo de situación, la persona, grupo o  institución enferma, está en camino de proveer una crisis de angustia con todas sus manifestaciones psicológicas y fisiológicas. Asimismo, la conducta tiende permanentemente a evitar el encuentro con el objeto tabú lo que conduce a reiteradas fugas de muy diversa factura, según la forma y la intensidad de la angustia subyacente. En caso de fracaso de la fuga, se alía al objeto fóbico-mítico en un afán omnipotente de poder controlarlo. Una de las fugas características, es "adelantarse" al objeto fóbico en una preocupación paranoide siempre renovada. Por ello, no debemos esperar una respuesta a  un estímulo determinado en este tipo de conductas. Muchas veces observaremos una respuesta específica o inespecífica sin que necesariamente se encuentre el estímulo externo que se supone la originó. Veamos algunos ejemplos: es interesante observar, el prejuicio que surge de algunas personas que participan activamente en Instituciones de Derechos Humanos, rechazando pares que co-participan de su cosmovisión, como así también, autoridades de establecimientos para rehabilitación De o Para personas ciegas o disminuidas visuales,  que no aceptan profesionales ciegos rehabilitados en sus equipos de rehabilitación. Podríamos suponer como hipótesis, que toda conducta prejuiciosa tendrá como base la desinformación, la des-formación  y una neurosis fóbica de importante cronicidad. Otra característica que envuelve al síndrome fóbico es la búsqueda de seguridad que, algunos autores como Laughlin habían caracterizado como otra variedad de neurosis. Todo o nada. El objeto temido y el objeto buscado son la misma cosa, ambos nos permiten observar como la conducta fóbica está perfectamente ligada por intrincadas tramas... El ejemplo más claro son las conductas supersticiosas, la religiosidad, elementos conjuratorios o diferentes determinismos que tranquilicen la aparición o la posible aparición del objeto fóbico representante del tabú en vigencia. Son así claras las declaraciones de parte de la iglesia con respecto a la sexualidad, al control reproductivo, la masturbación o la homosexualidad. Allí se expresan las más amplias singularidades a través de expresiones controvertidas, contradictorias y de alto nivel de confusión, pero  con una atenta lectura, surge simplemente el personaje fóbico cabalgando sobre el tabú, en el desierto de los significantes.
Miedo es una forma de denominar el sentimiento concomitante. Pero no alcanza, ya que no existe una palabra para describir el sentimiento fóbico como expresión. Nos acercamos un poco más si lo describimos como un pavor sostenido de nivel apenas inaceptable, de duración continua y de aparente fácil alivio a través de la proyección. Este estado continuo, es lo que hace que la personalidad fóbica se instale en permanente alerta. Un alerta especializada, selectiva. Este pavor sostenido, fruto de la obscuridad subjetiva a la represión de la demanda instintiva. Es aquí, donde comenzaremos a traducir el lugar de la paradoja. La personalidad fóbica que manifiesta pavor ante situaciones de definición aparentemente poco clara y/o claramente mal definida a su saber, lo único que posee es la sensación de peligro. Peligro que de-viene, según el paciente, del afuera,  en contraposición con su aparente mundo interior, sencillo, límpido y con perfiles claramente estructurados.  Es aquí donde planteamos este lugar como una metonimia derrocando el lugar de la paradoja. Los elementos tanáticos puestos en el afuera, son claramente una mera proyección de los elementos constitutivos internos que el paciente, la persona, el grupo o la institución padecen pero no soportan. Los elementos envidiógenos hacen que se introyecten los elementos eróticos en el adentro, quedando solamente estos elementos disociados en su interior. Es allí donde se instala la metonimia: la claridad y pureza de su "ser yo" en contraposición de todo lo exterior. Ese "ser yo", idealizado se proyecta como un yo ideal, imponiéndose a la realidad externa como un modelo de virtud, templanza y ejemplo a seguir. Tomemos como ejemplo algunas Instituciones Totales: centro militar o religioso. Tienden a proyectar fuera de sí el trauma que viven dentro de sí, negando un mundo del que viven prisioneros, prohibiendo afuera lo practicado adentro pero que no se re-quiere instalar en el discurso, decir, mostrar, reconocer, resinificar. Doble negación que trae aparejado el síntoma, defendiéndose de sus pulsiones,-racionalizando-intelectualizando-negando-prohibiendo.
Tanto las instituciones, los grupos o las personas que son derivadas a la clínica psicológica con estas características, son complejos de tratar por cuanto el discurso se presenta plagado de lógica neurótica en función de un nuevo posible enemigo: el propio analista, por ende, la libre exposición del contenido mental, es vivido con pánico y el "exponerse" como un lugar tanático por excelencia.
Muchos autores discrepan sobre las conductas de carácter fóbico, más coinciden en un punto: la actitud de huida. Suelen señalarse dos de estas actitudes. La actitud  introvertida  y  el  comportamiento  de desafío. La  primera conduce a exposiciones de inhibición que pueden aparecer representadas por inhibiciones sexuales, cierta timidez o indecisión, tales como el rechazo al contacto y el aislamiento. Por otro lado, los autores coinciden en señalar una actitud en el afuera, con disposiciones altivas como señala Mallet y por un comportamiento de desafío. Queremos señalar, que las dos actitudes son correspondientes a una misma conducta fóbica, donde una conducta xenofóbica puesta en acto es coincidente con una prohibición de contacto con el Otro, dominada por la misma patología con expresión de carácter diferente. Una hacia adentro introyectando la proyección, otra hacia afuera, estableciendo la proyección como síntoma clásico, y una misma actitud: la actitud de huida.
La a sexualidad de la personalidad fóbica está alterada por una intensa inhibición. Existe una necesidad de entrega como donación al Otro, pero éste es potencialmente un enemigo encubierto. Se evita así el acercamiento o éste se realiza bajo parámetros en que no se subjetiviza al Otro, sino se lo objetiviza al revestirlo de proyecciones. Las relaciones entonces, se convierten en anónimas o fugaces. Cuando los elementos fóbicos están implicados como características de personalidad, existe una sexualidad aparentemente sin conflictos, en un principio, pero luego y en base a problemáticas superficiales, empezarán a parecer lo que podríamos denominar "boicots fóbicos", pequeñas fugas que terminan minando la relación.
Los síntomas de angustia, pueden instalarse y aparecer egosintónicos a la lectura del paciente y en el caso que aparezcan egodistónicos, son difíciles de detectar para el entorno. Pueden permanecer camuflados a los ojos de los demás durante demasiado tiempo. El paciente, la persona, el grupo o la Institución, tienen demasiados medios y métodos para evitar el displacer de la problemática, por ende, utilizan los mismos mecanismos para ocultar sus terrores, miedos o pavores. El único momento adecuadamente terapéutico es el: "cuadro de agotamiento", que se presenta ocasionalmente. Es el momento,  que bajas las defensas, debemos actuar en la cadena de significantes. En caso contrario, sólo nos resta provocar las proyecciones en el marco terapéutico con el fin de devolverlas contra transferencialmente en introyecciones menos paranoides y angustiantes. No obstante, esto último, es trabajo lento y arduo. Atendiendo sólo los síntomas manifiestos, no nos garantiza el éxito de la terapéutica. Es clave no reforzar la intelectualización o racionalización por medio de interpretaciones o señalamientos que contengan discursos lógicos muy armados. Las mismas, serán de carácter afectivo donde esté claramente el permiso y el  ¿por qué no?, en lo no dicho del decir. En los casos en que obtengamos mínimamente un estado de equilibrio, no debemos esperar la desaparición de todos los síntomas egodistónicos. Si las conductas de tranquilización son suficientemente eficaces y el juego de pulsiones y defensas actúan adecuadamente, la conducta fóbica tenderá hacia sus objetos fóbicos con un seudo permiso, es decir, con angustia, pero con acercamiento. Este es punto clave, porque el contacto con la realidad, el contacto con el objeto fóbico, permitirá la posibilidad de disolución del tabú de base si el paciente, el grupo o la Institución pueden ver que no se trata de un elemento peligroso para su integridad.
La psicoterapia puede dar una buena respuesta ante características de personalidad con elementos fóbicos por la accesibilidad y los elementos ansiógenos que llevan generalmente a la consulta. Por otra parte, en la neurosis obsesiva, se indica una terapéutica psicoanalítica por tener una estructura de defensa-pulsión más intrincada, complicada y sistematizada. No se deberá descartar la posibilidad, en estructuras fóbicas graves, de un estado pre-sicótico y recordar que también, la melancolía presenta como síntoma, fobias sintomáticas.
Como síntesis, podemos enunciar que la fobia se presenta entonces, como una experiencia onírica de autoacusación fantasmagórica en el Otro.
HOMOFOBIA
La Homofobia se presenta como una experiencia onírica de autoacusación en el Otro, reproduciendo los procedimiento de defensa contra el miedo y la culpabilidad (mecanismo de desplazamiento) con la posibilidad de defensas contrafóbicas dirigidas hacia sustitutivos de la situación reprimida. Esta angustia subyacente tiene claramente el valor de sensaciones internas desaprobadas, ya que se trata de pulsiones sexuales, de pulsiones agresivas, o aún de ciertas pulsiones arcaicas, descriptas con el nombre de "instintos parciales". Existen relaciones intra e interdialécticas entre las experiencias individuales y los placeres específicos. Las fobias pondrán en vigencia la movilización de las dudas de elección y rechazo, antiguamente útiles, pero que ya no expresan tal éxito en la experiencia de la persona adulta. La Homofobia constituye una actualización hacia objetos parciales anacrónicos, gracias a fijaciones sobre "trozos" de experiencia. Deberemos entonces, ligar la Homofobia a ciertas fijaciones libidinales como expresión no solamente de regresiones parciales sino como  actualización de la posición, en los referidos instintos parciales. Queda claro, entonces, que este trabajo se establece sobre el análisis de la integración y desintegración de experiencias constitutivas en las relaciones que nos unen, sea por una invencible atracción, sea por una violenta repulsión a los objetos simbólicos constitutivos por la red de significantes que conforman la expresión de nuestros sentimientos. El entorno a través de sus sistemas de valores establece una ampliación de la Ley, imponiendo un orden constitutivo. Este orden puede establecerse desde una legalidad estricta, proyectándose e introyectándose como elemento paranoide. Un claro ejemplo es nuestra sociedad patriarcal con sus estereotipos, vallas que permiten la forclusión de la estructura en la creación plástica de un individuo madurativamente sano, impidiendo el adecuado desenvolvimiento en el corrimiento de los límites, ya que se confunde el desplazamiento de éstos con el derrocamiento de la Ley. Una de estas vallas es la Homofobia como entendimiento del lugar de la prohibición de transponer los límites de la heterosexualidad.
HOMOFOBIA Y SOCIEDAD
La Homofobia  es una obsesión compulsiva en la sociedad actual que se expresa y la violencia en la mujer, como forclusión de toda expresión que se aleje del sistema que se supone establecido. La Homofobia influye en todas las etapas del desarrollo de la persona psicológica y se expresará de acuerdo a las características de personalidad de la misma. Es así que la expresión fóbica restará energía madurativa para la resolución de las demás problemáticas. No será posible que el individuo, el grupo o la Institución,  establezca relaciones estables con sus objetos internos y externos si no quiere lo que desea o no acepta lo que es. No será posible que establezca relaciones estables con sus objetos internos y externos si la persona no respeta lo que el Otro desea y no acepta lo que es. No es posible el crecimiento y la superación a través del rechazo a uno mismo o al Otro. La Homofobia se expresa en la sociedad contra la persona homosexual como sanción a aquellos que, por una elección o no, ponen  en tela de juicio el lugar de agente reproductor, enfatizando el lugar del deseo. Es decir,  se forcluye la posibilidad de señalar el lugar de la sexualidad en favor de una genitalidad inmadura. Desde una factura de poder, es necesario  tratar de limitar, según el ecúmene, a los que por una y otra razón señalan el lugar de la transgresión. Una cultura sexual entonces, que se ha visto convertida,  en exponente del cuestionamiento.
HOMOFOBIA E INSTITUCION TOTAL
La Homofobia  desde las Instituciones Totales, toman un particular énfasis, ya que ponen en juego las viejas prohibiciones. El permiso aún con miedo y con condicionamientos y la expresión de la singularidad, pondría en sendos peligros aquellas Instituciones Totales que se basan en la generalidad: la institución militar por ejemplo, a través de su preparación, va minando la singularidad de sus componentes en una pertenencia a un solo cuerpo. El espíritu global, la pertenencia a la institución, está en clara contradicción con las expresiones individuales, es decir, con el deseo. Por ello sus estamentos y objetivos estarían seriamente afectados si existiesen diferentes formas de ver una misma cosa. La psicología militar necesita uniformar la ropa, los giros de pensamientos, los sentimientos y lo que es peor aún, la sexualidad. Es por ello que verá como potencial enemigo a cualquier persona o institución que pregone los derechos individuales de la persona sintiente. La expresión se hará a través de la proyección de sus miedos y angustias en todo aquel que bregue por establecer sus derechos y que no considere los parámetros establecidos estatutariamente. Así la Institución Total, como la iglesia, no importa a cual nos referimos, claramente intenta doblegar a sus acólitos a través del control de sus pensamientos, sus sentimientos y desde su sexualidad, impulsará las conductas  más sutiles, hasta las más agresivas, con el fin de subrogar a todo lo que se aparte de sus preceptos.
HOMOFOBIA, FAMILIA Y ENTORNO
Todos estos mecanismos se notarán y se marcarán  claramente en la Homofobia expresada en el entorno. Los padres y familiares de una persona homosexual, tratarán de maneras directas o indirectas de "corregir" lo que a la postre es una "forma de ser en el mundo". Por lo impuesto en la educación, tratarán de enfatizar a través de la Homofobia, la dificultad a la propia sexualidad. Es decir, más allá de la elección de objeto, la persona sexuada le está marcando al Otro, el lugar de la posibilidad. Un entorno homofóbico es el lugar de la doble negación, ya que conviven y sufren una situación que reniegan y no quieren ver lo que ven. Negación de negación, particular momento, cuando uno de los miembros de la familia marca el lugar de ser persona sexual. Dicho de otro modo, cuando un miembro de la familia resignifica un lugar, en este caso la sexualidad, obliga directamente, a los demás miembros, a establecer nuevas pautas y valores, es decir, a hacer un corrimiento de significantes en el delicado equilibrio de una situación social, emocional, familiar. Se convierte así, la persona homosexual, en representante, en emergente de una situación como proceso. Aparecerán en el entorno, diferentes defensas, para mantener el viejo equilibrio ya quebrado. Unas de estas serán la conducta homofóbica de sus integrantes y el objeto transicional, la persona lesbiana o gay.
HOMOFOBIA Y PAREJA
Con referencia a la Homofobia en la pareja de una persona lesbiana o gay, podemos observar que muchos pleitos, odios, traiciones o infidelidades son patognomónicos de dudas o permisos internos, respecto a la propia sexualidad.
            Algunas personas homosexuales tienen variadas dificultades para establecer una relación estable. Rompen en sí y para sí varios esquemas y estereotipos establecidos. No obstante necesitan establecer un tipo de relaciones que es copia fiel de aquello que no aceptan y rechazan: necesitan imprimir en sus relaciones de pareja parámetros inculcados y establecidos por esa sociedad patriarcal que de alguna manera con sus prácticas, conscientes o no, están reformulando. A esto se suman dificultades en el permiso de esa sexualidad asumida: viejas culpas, situaciones incómodas, hacen que algunas personas homosexuales,  como  mecanismo  homofóbico,  proyecten en sus parejas esta trabas, secundada por una sociedad y un entorno no permisivo. Esto se confirmará claramente, cuando investigamos parejas de personas lesbianas o gays que mantienen una relación estable. Los miembros sostienen dentro de la pareja, características de individualidad que permiten cierto grado de independencia y acrecienta la expresión del ser persona como prioridad al ser pareja. Su ser homosexual, exclusivo o no, se mantiene bajo equilibrio no estable. Es decir, se elaboran las situaciones conflictivas sin elementos proyectivos, los que les permite entrar en conflicto sin necesariamente desplazar el mismo a la pareja. Ora tienden al aislamiento, resguardándose de los daños que puede causar el entorno,  ora mantienen un entorno marcadamente favorable a la situación que están viviendo. También en mucho menor grado hemos podido observar, pero no es lo habitual, parejas estabilizadas con claras reglas de juego y un entorno adecuado, tanto familiar como de amigos que fomentan el equilibrio creativo casi permanente. Dicho de otro modo, si las relaciones que se con-forman no son tan estables como es de esperar, las causas que aparecen a primera instancia, son consecuencia de la introyección de los aspectos sociales incorporados en la socialización primaria y secundaria, es decir quedarán como expresión la discriminación social y la propia Homofobia internalizada.
HOMOFOBIA DE LA PERSONA HOMOSEXUAL
 Consideremos la Homofobia de la persona homosexual con sus propios pares y con sí mismo. El elemento tabú, que la persona toda expresa, imprimirá a través de diferentes rechazos, tomando en el afuera, los objetos que necesite o cree necesitar para aliviar la angustia culpógena que produce el lugar de la prohibición. Es así, que aparecen defensas que C.A. Tripp denominaría:
 Defensa del "rol de género", en que muchos varones y mujeres se sienten libres para responder a parejas del mismo sexo si pueden mantener el rol que el género le asigna ante sí mismos, ya que es una forma de racionalizar que lo que están haciendo "no es realmente homosexual". Estos aspectos se han extendido al saber popular a tal punto que el arte erótico de todo el mundo suele representar la actividad sexual entre dos mujeres de modos exentos de cualquier con-notación lésbica. No hay comprensión,  entre la mayoría de los mismos gays, de la temática lésbica, imaginando que las mujeres que se responden sexualmente, están demostrando su excitabilidad y disposición a responder ante un varón, si él estuviera  allí. La realidad  es  que  todas estas actitudes son respuestas homofóbicas.
En los contactos sexuales entre varones o mujeres, ambos elementos  homosexuales están extensivamente motivados ya que nadie responde fácilmente a un compañero/a que no tenga significado sexual.
 Defensa de la "inocencia personal", una expresión homofóbica. En ocasiones, estas mujeres o estos varones, se convierten en expertos en el arte de seducir al Otro para que se adelanten, o mejor "accidentalmente" pueden tener el tipo de personalidad que comunica una fácil accesibilidad. La otra parte de la racionalización (que la culpa es del que inicia las cosas) tiene una larga tradición social.  Los antiguos teólogos sostenían que las mujeres eran responsables respecto a los pecados sexuales, porque ellas eran las tentadoras, la iniciadoras y premeditadas, capaces de excitar a los  varones  inocentes. Es así, que el lugar de la inocencia, mengua la culpa de decidir determinado objeto de deseo, convirtiendo el acto propiciador en un acto meramente homofóbico hacia la propia persona que lo emite. Algunas taxis boys son representativos clásicos de la Homofobia ya que establecen el mismo tipo de defensas psicológicas. Al ser elegidos y pagados se sienten libres de hacer sin complejo de culpa lo que por el impulso del deseo propio, les resultaría atormentador.
 Defensa del "sólo ahora", de carácter transitorio, permite la temporalidad de la expresión del deseo sin la culpa del compromiso o la repetición del acto. La racionalización de la homosexualidad como fase temporal, es tan poderosa, que puede seguir siendo convincente, en ausencia total de actividades heterosexuales. Pero si una persona también está implicada en actividades heterosexuales, puede explicar fácilmente su homosexualidad como incidental.
 Defensa de la "amistad especial", que está relacionada homofóbicamente con poderosas preocupaciones de orden moral. Algunos contactos homosexuales son totalmente permisibles siempre que sean promiscuos, oportunistas o carezcan por otras causas de emoción, porque entonces "no significan nada". Al volver a considerar los diversos modos que la gente ha descubierto para negar la homosexualidad que están practicando, surgen algunos temas centrales. Todas  las racionalizaciones o intelectualizaciones, evitan las temidas implicaciones sociales y morales de la homosexualidad. Todas niegan la homosexualidad como una preferencia (si no de modo total, afirmándola entonces en un sentido oportunista o relegándola a los estrechos confines de una situación particular). Todas llevan al menos, la afirmación implícita de la heterosexualidad de la persona como primaria. Todas suelen ser auto engañosas en cuanto que son defensivas. Cada uno de esos sistemas de re-negación, pueden aparecer aislados o en combinación, pero siempre encuentran el modo de evitar comprometerse en la homosexualidad definiéndose como un miembro regular de la sociedad que no se encuentra apartado de ella por nada esencial.
La psicología homofóbica de algunas personas homosexuales puede ser muy compleja. Motivada por un simple deseo de proteger a los de su propia posición, es frecuente que construya una complicada moralidad, según la cual justifique sus preferencias mediante el ataque público a las variaciones de su propia actividad, y puede hacerlo pensando que mantiene una cierta honestidad. El sacerdote que ha mantenido desde hace mucho tiempo una única y continuada relación homosexual, puede unirse a las voces de otros para perseguir las relaciones múltiples en la homosexualidad. Otras que se sientan atraídas por mujeres adultas, pueden tranquilamente menospreciar y prejuiciar el lesbianismo que implique la elección de jóvenes adolescentes.
Esto es un muy somero análisis de los elementos homofóbicos en la sociedad. No solamente socava la personalidad de todos sino la vida del ser lesbiana o gay en particular, por ende, constituye un elemento disociador fundamental, en las relaciones de todos los seres. Es por ello que debemos combatir este flagelo a través de los grupos de reflexión, estudios profundos para erradicar la Homofobia en algunos psiquiatras y psicoanalistas, la elaboración de la temática en análisis y sobre todo, la modificación de los conceptos sociales de convivencia. Si no modificamos los valores de interacción social, se mantendrán los elementos tabús que nos discriminan a todos y atendiendo la Homofobia.