La ausencia de apetito
sexual puede tener causas orgánicas o psicológicas. Identificar los motivos que
influyen en esa falta de deseo puede ser el primer paso, según los expertos,
para mitigarlos y así recuperar las ganas de mantener relaciones sexuales.
Muchas personas que ven
su deseo sexual por los suelos, tienden a preocuparse más de la cuenta, lo que
los ciega para poder observar posibles soluciones y entierra aún más ese
erotismo que quedó tirado algún tiempo atrás.
La
falta de deseo sexual puede estar desencadenada por muchos factores diferentes.
Entre ellos cabe mencionar:
Problemas
físicos: Trastornos
hormonales. Infecciones vaginales. Diabetes. Parto reciente. Disfunciones sexuales. Menopausia.
Problemas
Psicológicos: Episodios
traumáticos como una violación, un abandono, un desengaño amoroso. Baja
autoestima. Ansiedad. Angustia. Depresión. Estrés. Cansancio.
Problemas
relacionados con la relación de pareja: Falta
de atención. Falta
de comunicación. Monotonía. Desinterés. Terceros.
¿Por
qué es necesario recuperar el deseo sexual?
La
vida sexual es necesaria en toda relación de pareja. Además, dejar al sexo en el olvido es el error
número uno que conlleva al aburrimiento y acaba con el bienestar de la vida en
pareja. La falta de sexo, por periodos largos, hace que se destruya la ilusión
hacia la otra persona, y crea una montaña enorme de desinterés hacia el otro. El
sexo juega un papel importante en tu salud mental y física. Los beneficios del
sexo son tantos y tan importantes que no deberías terminar de disfrutar de
ellos.
Recuperar el deseo sexual
El sexo es
una gran benefactor de la vida personal de cada quien y mucho más de la pareja
como tal, por lo cual, vale la pena realizar todo aquello que nos sea necesario
para traer el deseo de vuelta a la cama y que nos esforcemos en volver a
despertar el erotismo en nuestra vida para vivir una sexualidad plena y sana.
Algunas
sugerencias que te serán útiles para recuperar el deseo sexual, ponlos en
práctica para que vuelvas a ser una persona sexualmente satisfecha:
1.- Una
cita: Planeen una cita y actúen como si fuera la primera vez que van a salir
juntos. Compórtense de manera que tengan que conquistar al otro, muestren sus
mejores cualidades, coqueteen entre sí, conozcanse y ríanse como si estuvieran
conociéndose por primera vez. Seduzcan, pero no lleguen al coito. O bien,
encuentren formas distintas de hacer las mismas cosas. Para recuperar el deseo
sexual es muy importante que busquen y encuentren en cada actividad que
realicen algo nuevo y diferente que los anime a seguir haciéndola, es una gran
herramienta para la unión de la pareja.
2.- Tómense
unos minutos al final del día solo para conversar: Hablen sobre cómo estuvo el
trabajo, cómo se sintieron, si pasó algo inusual, algo cómico, no importa cuál
sea el tema, pero conversen solos (sin niños, sin teléfono, sin
interrupciones).
Nota:
Si hay algún problema entre ustedes, no lo saquen a relucir, dejen que este sea
un rato para hablar amena e íntimamente con la pareja.
3.- Contacto:
El contacto con la piel de la persona que te atrae produce la liberación de
oxitocina, una hormona relacionada a la excitación y el apetito sexual. Por
ello, es importante que siempre mantengas el contacto físico con tu ser
querido. Eso sí, debe ser algo espontáneo, cuanto más inesperado sea el
contacto, más fuertes serán los estímulos.
4.- Una
buena salud integral: en la que se controla la obesidad y los hábitos nocivos,
como el exceso de alcohol y el cigarrillo, es fundamental para mejorar el
estado anímico y físico, lo que provocará una sexualidad mucho más placentera.
Nota:
Si bien beber una copa de vino puede servir para relajar a las personas y
sentirse más dispuestas a tener un encuentro íntimo, el exceso de alcohol puede
afectar la capacidad de tener una erección y de alcanzar el clímax.
5.- Nuestra
sexualidad está en nuestra cabeza: Malas experiencias pueden generarnos
malestar al recordarlas, en lugar de excitación, condicionando nuestra vida
sexual. Asimismo, la falta de educación sexual o las connotaciones negativas
que tengamos en torno al sexo o incluso aquellas historias que puedan
relacionar el sexo con algo sucio o tabú puede afectar al deseo.
6.- Practiquen
ejercicio y aliméntese bien: Este consejo es vital para recuperar el deseo o
si no lo ha perdido, para mantenerlo en buenos niveles. La actividad física y
la alimentación adecuada son los principales encargados de que nuestro
organismo funcionen correctamente y de darnos las energías necesarias para
cumplir como se debe con el día a día.
Nota:
El ejercicio moderado, practicado regularmente, ayuda a mejorar el flujo
sanguíneo a los órganos sexuales. Además, la obesidad y la grasa abdominal
disminuye la producción de testosterona.
7.- Mantén
una buena autoestima: De acuerdo a como se encuentre la autoestima depende en
gran medida la libido. Es esencial querernos y respetarnos para recuperar el
deseo sexual. Busca
algunos libros de autoayuda para apreciarte más, mírate en el espejo
diariamente y saca a relucir tus mejores cualidades.
8.- Relajación:
En casos de estrés y angustia, nada mejor que entregarse a la relajación. Toma
un baño caliente, escucha música suave, lee un libro en compañía de una copa de
vino, date un masaje, las opciones son infinitas. Este consejo de seguro
ayudará a recuperar el deseo sexual caído.
9.- Dormir
lo suficiente: Un estudio demostró que después de una semana de dormir tan solo
5 horas por la noche, los niveles de testosterona se redujeron entre un 10% y
un 15%. Es importante tener en cuenta que respetar las necesidades del cuerpo y
descansar lo suficiente aumenta el rendimiento físico y la libido.
10.- Lleva
la creatividad y la novedad a tu vida sexual: Habla con tu pareja y practiquen
cosas nuevas. Traten con nuevas posiciones sexuales, sexo oral, sexo anal,
juguetes o juegos sexuales. Nunca sabes donde podrás encontrar eso que te lleve
a gozar de un gran placer y que de paso recupere el deseo sexual en tu vida. Utiliza
tu imaginación.
11.- Fomentar
la relación de pareja: Para desear, hay que estar disponible. En otras
palabras, hay que disponer de cierto tiempo en la vida cotidiana para desear.
Si vuelves a casa con la cabeza llena de preocupaciones laborales o dejas que
los quehaceres caseros ocupe todo tu tiempo libre, es imposible desear. Encuentra
un momento y dedícatelo solo a ti, a ustedes. Esta disponibilidad recíproca
permite, en la mayoría de casos, recuperar el deseo perdido.
Nota:
Sorprende! Espera a tu pareja con una rica cena, crea en el dormitorio una
ambiente romántico, hazle una llamada para recordarle lo que le quieres y deseas, etc. Esto es bueno para recuperar el ánimo y
el deseo entre ambos.
La
pérdida de la libido generalmente tiene entre sus causas un elemento psicológico.
Es posible que la ansiedad, la depresión o el estrés estén jugando un papel
importante en la situación y es por ello que sería aconsejable realizar
determinadas actividades para mejorar el estado anímico tales como:
- Control del estrés: Este desencadena la producción excesiva de una hormona llamada cortisol, que provoca un desequilibrio de todas las demás hormonas, incluyendo las sexuales. Es por ello que para recuperar el apetito sexual es sumamente importante realizar actividades que ayuden a poner el estrés bajo control, como la meditación, el yoga, caminatas, etc. El estrés es un enemigo del deseo.
- Aprender algunas técnicas para el manejo de la ansiedad: Entre estas técnicas se incluyen aprender a respirar profundamente, leer libros de autoayuda, consultar con un profesional para iniciar una terapia o acudir a un grupo de apoyo.
- Tratar la depresión: En el caso de que la pérdida del deseo sexual se deba a una depresión es aconsejable recurrir a un profesional para que determine los mejores tratamientos a seguir, ya que en ocasiones, basta con una terapia y algunos cambios en el comportamiento, como realizar más ejercicio (ya que libera endorfinas), mejorar la alimentación, los patrones de sueño y exponerse más a la luz del sol. En otros casos más agudos será necesario recurrir a determinados medicamentos.
- Modificar las actitudes y comportamientos negativos: También es posible comenzar una Terapia Cognitiva Conductual que puede resultar útil a la hora de modificar los pensamientos negativos y las actitudes que llevan a que se pierda el interés en la intimidad o en cualquier otro tipo de actividad recreativa o deportiva.
- Aprende a expresar tus deseos sexuales: Sugiere a tu pareja qué posiciones sexuales y qué situaciones te gustan, las caricias que más te excitan o los lugares donde te gustaría hacer el amor. Mujeres, recuerden que eres responsable de tu propio placer y, aunque para muchas mujeres puede resultar incómodo hablar de lo que les gusta o no, es la única manera de alcanzar una relación sexual satisfactoria. No será fácil para tu pareja satisfaceros mutuamente si no conoce tus necesidades. Nota: Dile lo que te gusta y lo que quieres en la cama, sin exigencias ni reproches. Puedes guiar su mano suavemente y expresar lo que te gusta y durante cuánto tiempo. No te quedes muda, ni tampoco pases al otro extremo de guiarle en exceso.
- Realizar una terapia sexual con la pareja: Otra opción es comenzar una terapia sexual en pareja para resolver determinados conflictos que pueden estar presentes en la convivencia y para acordar juntos las actividades a realizar para tratar de despertar el deseo nuevamente.
Recuerda que las
mujeres y los hombres no desean de la misma manera, no presiones, no te enojes, no hagas cosas que afecten tu relación, ten mejor comunicación con tu pareja y lleguen a acuerdos flexibles, sanos y placenteros para ambos. Son pocas las mujeres actualmente que tienen problemas de inhibición del deseo sexual. Entiende, que para la mujer, la sexualidad es un tema que puede
pasar a segundo plano y por lo tanto, se adaptan más fácilmente que sus
parejas a los problemas relacionados con el deseo. Saben encontrar otras
satisfacciones y de forma inconsciente, anteponen, por ejemplo, la relación
que mantienen con sus hijos.
Es
mucho mejor prevenir que curar: Si se quiere evitar este tipo de
problema se debe empezar por una actitud positiva y abierta sobre la
sexualidad, cuidar la salud en general, esforzarse por mantener una vida sexual
activa y placentera, un buen conocimiento del cuerpo y las sensaciones, dedicar
tiempo a la intimidad y comunicación con la pareja, además de momentos de ocio, saber dar y recibir muestras de cariño y afecto, sin tener que ir más allá, y si es necesario, buscar nuevos estímulos en libros eróticos, películas, juguetes sexuales,
aceites para dar masajes, y todo tipo de elementos que puedan enriquecer la
vida sexual de la pareja.
Consultar
a un profesional de la salud
En
ocasiones es necesario consultar con un sexólogo/ psicólogo clínico, para
recuperar el deseo sexual y salir del problema con estrategias y técnicas en
especificas individuales y de pareja. No dudes en hacerlo si lo necesitas,
puede ser la ayuda que buscabas para terminar con esta difícil situación. Si
luego de probar con todos los métodos anteriores no se obtienen resultados
positivos lo aconsejable es acudir a un médico para descartar alguna enfermedad
subyacente o para obtener una prescripción para corregir algunas condiciones.
Es
necesario saber que, en cualquier pareja, el deseo sexual tiende a disminuir
con el tiempo. Sin embargo, no todos actuamos igual ante el deseo; algunas
parejas mantienen viva la llama de la pasión durante muchos años mientras que
otras la extinguen enseguida. Así pues, quizá lo importante es aprender a
estimular el deseo.
No dejemos que nuestra relación se convierta en algo automático y carente de sentido. Hagámonos algo de tiempo para regocijarnos en la intimidad.
No dejemos que nuestra relación se convierta en algo automático y carente de sentido. Hagámonos algo de tiempo para regocijarnos en la intimidad.
Fuentes: