jueves, 21 de mayo de 2020

Trastorno de Inestabilidad Emocional de la Personalidad

TIE

El trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad (TIE), o borderline, como también se le denomina, describe los problemas que tienes si eres emocionalmente inestable, estás lleno de ansiedad y muestras un patrón de comportamiento autodestructivo. Si tienes TIE podrías llegar a un estado al límite de lo psicótico, en donde dudas de todo, tanto de ti mismo como de otros. Alternas rápidamente entre distintas emociones y puedes pasar de la desesperación a la alegría eufórica en un lapso muy breve.

Es habitual que te sientas muy mal y sientas mucha vergüenza al tener estos problemas. Pero no estás solo y existen tratamientos específicos para el TIE. También hay muchas cosas que puedes hacer por tu cuenta para sentirte mejor.

Cuando tienes un TIE se te dificulta manejar emociones de abandono, ansiedad o ira, y es habitual que te dañes a ti mismo de distintas maneras, ya sea física o psicológicamente. A veces puedes sentir una autoestima aceptable y, al momento, descender a un profundo odio propio. Muchas personas con TIE describen una sensación de vacío y problemas de identidad.

Si tienes un TIE puede que tengas dificultad para sentir confianza y seguridad en relaciones cercanas, y a menudo oscilas entre la admiración a y el repudio de las personas más cercanas a ti. Esto puede dificultar que las relaciones se prolonguen en el tiempo.

Es habitual que te «automediques» con alcohol o drogas, o que desarrolles trastornos de la alimentación o te provoques daño a ti mismo.

¿Cómo saber si tengo un TIE?

Según los criterios establecidos, deben cumplir con mínimo cinco de los siguientes síntomas:

  1. Un miedo profundo a ser abandonado.
  2. Una sensación recurrente de vacío.
  3. Una autoimagen confusa o inestable.
  4. Fuertes oscilaciones entre distintos estados emocionales: Fuerte irritabilidad, ansiedad o depresión que dura por horas, incluso días.
  5. Relaciones tormentosas que oscilan entre admiración profunda y desprecio extremo.
  6. Cólera intensa y enérgica que no dice relación con aquello que la gatilla.
  7. Ideas breves, exageradamente maliciosas, o vivencias emocionales transitorias de estar fuera de la realidad.
  8. Impulsividad que resulta en, por ejemplo, el abuso de drogas, sexo, comida o dinero.
  9. Daño a sí mismo, ideas suicidas, discurso o planes de quitarse la vida.

Aun cuando te sientas identificado con estos síntomas, no es seguro que tengas un TIE. Para saber si sufres de un TIE, es necesario someterse a una evaluación profesional. Es importante descartar que los síntomas se deban a otras razones.

Nota: Todos los sujetos con un trastorno límite de la personalidad se desviven para impedir un abandono real o imaginado de algún amigo, familiar, o de un conocido. En general, este miedo guarda relación con la incapacidad para estar solos. Por eso, la percepción de una inminente separación o rechazo pueden llevarles a cambios profundos en la sus actitudes, en sus pensamientos y en sus acciones. Son sujetos muy sensibles a todo lo que sucede y su forma de reaccionar es exagerada, incluso ante pequeños avatares. Su temor al abandono les lleva a exhibir una gran rabia o desasosiego ante separaciones lógicas o breves (por ejemplo, pueden exigir a su pareja que no les deje solos ni un instante o enfadarse terriblemente porque unos amigos cambian un plan de un fin de semana para el siguiente). Es frecuente que se achaquen a sí mismos esos falsos abandonos por haber sido "malos" o haber actuado "incorrectamente". Por supuesto, esta forma de ser tan invasiva acaba, en muchas ocasiones, provocando lo que se teme, y sus amigos van distanciándose realmente de ellos porque no aguantan su inestabilidad, sus exigencias o su presencia permanente. A veces, para detener a la persona que puede abandonarles son capaces de actos auto-agresivos (cortes, quemaduras, caídas, intentos de suicidio, etc.).

Es frecuente que estas personas idealicen, en un primer momento, a quienes se ocupan de ellos o a sus amantes. Pronto les parecen las personas más buenas y comprensivas del mundo, y comparten con ellos los más íntimos detalles. Sin embargo, al poco tiempo los denostan y los tachan de traidores. A mayor idealización, mayor sentimiento de desilusión posterior”

¿A qué se debe esto?

Muchas personas con trastorno borderline han vivido una crianza muy traumática o caótica. Algunos han sufrido abuso. Pero también podrías desarrollar un TIE a pesar de haber vivido una crianza sana, sin traumas aparentes.

Causas 

Las principales causas que pueden llevar a una persona a padecer inestabilidad emocional son las siguientes:

Sobreprotección: Cuando desde la niñez se protege en exceso a un niño, se está creando un caldo de cultivo para la que desarrolle inestabilidad emocional. El niño aprende a gestionar sus decisiones y sus emociones bajo el seno de una familia que hará todo por él, no asimilará las emociones como una parte adaptativa de su personalidad, porque no las gestionará, todo le vendrá dado por parte de los suyos.

Adolescencia difícil: En la adolescencia es cuando realmente nos conformamos nuestra identidad como persona, cuando nos ubicamos a nivel emocional y conductual dentro de nuestro entorno y de la sociedad, para pasar a la edad adulta. Cuando esta etapa del desarrollo es conflictiva a nivel emocional, el adolescente puede no aprender a gestionar sus emociones e incluso a adoptar la inestabilidad emocional como su manera de comunicación con los demás, generándole esto numerosos conflictos.

Perfeccionismo: Igual que ocurre con la sobreprotección, el perfeccionismo será inculcado desde el seno de la familia, de una manera directa o indirecta, buscará la perfección en cualquier actividad que realice, descuidando aspectos emocionales muy importantes como son por ejemplo, la tolerancia a la frustración, algo generalmente ausente en la inestabilidad emocional. Cuando estas personas se enfrentan a algo tan natural, como que no son perfectos, no son capaces de moverse emocionalmente en dirección a la aceptación, habitualmente se frustran y arremeten contra quienes están más cerca e intentan apoyarlos.

Niveles elevados de estrés: Cuando una situación es estresante y se prolonga en el tiempo ya sea a nivel personal o laboral, la capacidad de la persona para gestionar sus actividades rutinarias se verá mermada, afectándole tanto a nivel cognitivo como emocional.

Dificultad para tomar decisiones: Cuando una persona es indecisa, le cuesta generar alternativas convincentes para sí misma y valorar cada una de ellas, sus emociones oscilarán de un extremo a otro con cada una de ellas, no será capaz de poder ver cada una de ellas desde un punto de vista objetivo y valorarlas de manera realista, sintiendo emociones muy intensas, en un momento positivas y en el otro negativas, que serán las que tomen la decisión final, a veces de forma desorganizada, confusa y mediante impulsos no reflexionados.

Cuando una persona padece inestabilidad emocional sufrirá una serie de síntomas y características como las siguientes:

Dependencia de los demás: Necesitan muchos pilares en los que apoyarse para poder gestionar sus emociones de manera adaptiva en función de las de los demás o de lo que demás les digan que es correcto, aunque en muchas ocasiones esto no les funcione y les lleve a la confrontación con sus seres queridos y por lo tanto con las personas de las que dependen.

Baja tolerancia a la frustración: Cuando una persona padece inestabilidad emocional, no podrá tolerar que algo no salga como espera, o que algo pueda sufrir algún contratiempo, no estará preparado emocionalmente para que algo no salga como lo tiene previsto, porque la persona no tolera a nivel emocional que haya ningún contratiempo, descontrolándose sus emociones negativas y generalizándose a todos los ámbitos de su vida.

Sentimiento de inseguridad: La seguridad en sí mismos es otra característica que se verá muy perjudicada, ya que el no poder controlar sus emociones,  tendrá consecuencias en sus actos y le traerá muchos conflictos, tanto externos como internos y situarán a la persona en una condición en la que dudarán incluso de ellos mismos.

Conflictiva: Cuando una persona no puede controlar sus emociones, esto se generalizará como hemos comentado anteriormente, pudiendo pasar de la alegría a la tristeza o a la ira en un intervalo corto de tiempo y sin importar si está en el trabajo o en el hogar.

Problemas de apego en la infancia: Las dificultades en las relaciones de apego temprano, determinan en gran medida cómo manejaremos las emociones y las relaciones en la etapa de adulto, los problemas de apego ansioso ambivalente y desorganizado están en la base de la inestabilidad emocional.

Consecuencias de sufrir inestabilidad emocional

Las principales consecuencias a las que se ven sometidas las personas que padecen inestabilidad emocional son las siguientes:

Baja autoestima: La autoestima se ve muy afectada, la inseguridad que sienten acerca de si mismos, mermará la capacidad de valorarse, de sentirse capaz de realizar actividades de manera satisfactoria, de poder conseguir las metas que se marquen y de valorar sus capacidades. La inestabilidad emocional les conducirá a verse desde un punto de vista negativo, como personas que no pueden llevar a cabo las actividades igual que los demás porque en cualquier momento sus emociones se apoderan de ellos, los que les hará sentirse débiles e inferiores con respecto a los demás.

Juicios negativos sobre sí mismos: Se enjuiciarán constantemente, por su imposibilidad de controlar sus emociones, se criticarán y desaprobarán sus decisiones porque realmente no son suyas, no deciden desde un punto de vista racional, sino solamente emocional.

Control de impulsos: La persona carecerá de voluntad para decidir en cualquier situación, por insignificante que parezca, por lo tanto lo hará mediante sus impulsos, mediante sus emociones, tomando en muchas ocasiones decisiones desacertadas.

Ansiedad: Los elevados niveles de activación emocional que sufrirá, principalmente cuando tomen consciencia de que sus emociones no están siendo adaptativas, le conducirá al agravamiento de sus síntomas, elevando sus niveles de ansiedad, pudiendo llegar a padecer un trastorno del estado de ánimo severo.

Depresión: Cuando la inestabilidad emocional comienza a afectar gravemente a las relaciones personales, pudiendo perder personas importantes, su puesto de trabajo, etc., la falta de motivación, la apatía, pensamientos como que no sirve, que no va a poder nunca hacer las cosas bien, se apoderarán de la persona, pudiendo llegar a desarrollar un trastorno depresivo, a partir de dicha sintomatología.

Limitación de su vida cotidiana: Todas las consecuencias comentadas anteriormente, en conjunto o por separado, se pueden dar en una persona con inestabilidad emocional, lo que provocará poco a poco la reducción de las actividades cotidianas de la persona, pudiendo llegar al aislamiento social y/o laboral.

¿Qué tipo de ayuda se puede recibir?

Si tienes un TIE puedes recibir tratamiento psicoterapéutico, grupal o individual. Existen varias terapias que han demostrado buenos resultados en el TIE. Algunos ejemplos son la terapia dialéctica conductual, la terapia basada en la mentalización y la terapia de esquemas. También podrías recibir tratamiento farmacológico.

También tienes derecho a recibir información sobre las alternativas de tratamiento existentes y a participar activamente del tratamiento. Es importante que te sientas motivado y tengas confianza en el tratante.

Si anteriormente has buscado asistencia, pero consideras que no funcionó, no debes rendirte, debes buscar ayuda nuevamente. Investigaciones han demostrado que lo que determina el éxito del tratamiento no es el tipo de terapia, sino la relación de confianza que se establece con el tratante.

¿Cuál es el tratamiento psicológico de la inestabilidad emocional?

Requiere habitualmente psicoterapia de larga duración. En mi experiencia puede ayudar considerablemente la aplicación de técnicas como el EMDR, EFT, BRAINSPOTTING, FOCUSING. Es frecuente que la base de este trastorno se encuentre un estado emocional disociado, fruto de experiencias o accidentes traumáticos. Igualmente es muy útil en casos de una condición extrema el control médico, coadyudante con la medicación para estabilizar los estados de ánimo en conjunción con la psicoterapia.

Suele ser muy complicado para cualquier persona identificar y reconocer que padece inestabilidad emocional, y algo que no desaparece sin más cuando uno toma consciencia. A veces es necesario leerlo para saber y poder comprender lo que nos ocurre y ese es el momento de iniciar un tratamiento psicológico para superar la inestabilidad emocional, donde se pueda trabajar para conseguir:

  • Recuperar la autoestima
  • Solución de problemas, para poder afrontar los conflictos
  • Reducción de la sintomatología ansiosa y/o depresiva
  • Educación emocional
  • Control de impulsos
  • Gestión del estrés

 A menudo mejora

No es poco común que tengas otros diagnósticos además del TIE, por ejemplo, TDAH o trastorno bipolar. Igual que con los otros diagnósticos, la vida va mejorando con el tiempo, a medida que te comprendas mejor y te atrevas a contarle a tu entorno qué es lo que necesitas para sentirte mejor.

Afortunadamente, en la mayoría de los casos la inestabilidad suele ir decreciendo con la edad, y muchos de los sujetos que a los veinte años estaban muy perturbados muestran, hacia los cuarenta, un estado de ánimo más templado y menos síntomas psicopatológicos, siempre y cuando no estén sometidos a un gran estrés y gocen de un buen apoyo social y profesional.

 

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jueves, 14 de mayo de 2020

Niñ@s Distraídos o Despistados

Una pequeña guía para padres. En este artículo tratare las posibles causas a este problema tan común en niños, así como soluciones prácticas y efectivas para ellos.

Desarrollar las habilidades y los conocimientos de cada niño es una tarea fundamental que debe aplicarse tanto en casa como en la escuela, pero en muchas ocasiones puede ocurrir que el niño se distraiga o se despiste con facilidad. Esto puede acarrear problemas de atención y concentración, y eso puede verse reflejado en sus notas escolares aun siendo un niño muy inteligente.

Si su hijo es despistado, existen factores que llevan a que la distracción sea una tendencia muy frecuente en su hijo. Quienes tienen niños más activos sabrán a ciencia muy cierta que educar a estos niños suele ser una tarea titánica. Los niños activos y que no pueden estar quietos por un momento son los más propensos a tener más distracción, son más despistados y eso le acarrea dificultades a la hora del aprendizaje.

Causas por las que un niño puede ser despistado o distraído

Los niños que suelen tener un nivel alto de actividad, no pueden estar quietos en ningún instante y mucho menos prestar atención durante los 45 minutos o una 1 hora que suele durar cada clase y/o cada explicación del profesor en la misma. Estos niños son más propensos a distraerse con facilidad y desconectar su mente por completo de la clase, dificultándose así, gravemente, su aprendizaje diario.

Las causas más comunes suelen ser:

Un trastorno por déficit de atención (TDA). Puede estar unido a la hiperactividad (TDAH).

El cansancio o el estrés: Si el niño tiene problemas de sueño o tiene cada día demasiadas actividades o clases extraescolares, esto puede influir negativamente en su concentración y/o atención. Descansar es una parte fundamental para que nuestro cerebro este siempre al 100%. Bien por dormir poco o por un exceso de actividades, disminuye la capacidad de concentración y se dificulta la memoria.

Problemas de visión o de audición: En muchas ocasiones puede ocurrir que nuestro hijo tenga algún problema visual o auditivo, impidiéndole concentrarse en las explicaciones del profesor. Cada año suelen hacerse revisiones en los colegios, pero si no es el caso, siempre podemos llevarle a un especialista por si el problema de su falta de atención radica ahí. Un defecto visual o auditivo no diagnosticado ni tratado puede hacer pensar en una falsa falta de atención.

El nerviosismo: Cualquier situación que nos produzca estrés o nerviosismo, influye en nuestra memoria y en la capacidad de almacenar nueva información. Cuando estamos nerviosos segregamos corticotesona una hormona que interfiere en el recuerdo.

Una mala alimentación: Una buena alimentación es fundamental para rendir bien, tanto mental como físicamente. En la actualidad existen multitud de suplementos para suplir estas deficiencias, pero lo mejor siempre es hacer una dieta variada y saludable. La falta de algunos nutrientes esenciales en su dieta puede interferir en la calidad de la memoria.

La buena noticia es que la distracción de los niños tiene solución. Existen algunas técnicas que pueden ayudar a los niños a superar sus problemas atencionales y desarrollar una mayor concentración.

Como mejorar la atención de los niños despistados

Cuando no exista evidencia de que su falta de atención se deba a algo patológico, puedes ayudar a tu hijo siguiendo los siguientes consejos:

Utiliza la motivación: Es muy importante el encontrar las actividades que le gustan al niño y motivar sus ganas de avanzar para que adquiera interés por superarse a sí mismo cada día. Una vez logrado este paso, será importante aplicar la misma táctica con el resto de actividades diarias. Hay que buscar aquello que le gusta mucho hacer y fomentarlo, a la par que lo utilizamos como forma de motivación para otras actividades.

Refuerzo positivo: Refuerza las actividades bien hechas y la dedicación con constantes felicitaciones y, de vez en cuando, con premios como jugar quince minutos más con la Tablet o regalarle un cuento, jugando con él, llevándole el fin de semana a ver una película o comprándole un libro.

Juegos de atención y concentración: Existen numerosos juegos para trabajar la atención y la concentración, como las secuencias temporales, emparejar figuras iguales, colorear dibujos con sumas y restas, láminas de trazos donde se deben seguir los números, etc. memorias de parejas, buscar un dibujo en una lámina, colorear mandalas o dibujos abstractos complejos, elegir una respuesta correcta entre varias, hacer una silueta siguiendo los puntos numerados, colorear según un código de color señalado por números, ordenar tarjetas según una secuencia temporal o buscar un objeto escondido siguiendo instrucciones o interpretando pistas.

No agobiar con varias cosas a la vez: Siempre es más fácil realizar las tareas de una en una. Así, no se distraerá al recibir varias órdenes al mismo tiempo.

Memoria visual: Utilizar con dibujos o fichas para que el niño/a recuerde sus obligaciones y tareas, como recoger el cuarto, lavarse los dientes, etc., o incluso temarios de asignaturas utilizando varios colores.

Métodos de relajación: Si el niño sufre de ansiedad y/o de nerviosismo.

Extra

Ayuda a los niños distraídos o despistados

Asegúrate de que tu hijo duerme y descansa lo suficiente: La falta de sueño y el agotamiento físico son unas de las causas más comunes de la falta de atención y las constantes distracciones en el niño. Si tu hijo no descansa lo suficiente o duerme mal por la noche es normal que al día siguiente se sienta cansado y que no logre concentrarse al 100%.

Instaura rutinas en su vida cotidiana: Las rutinas son una herramienta excelente para que tu hijo se implique más en las tareas cotidianas y no olvide lo que tiene que hacer. De hecho, cuando las rutinas se conviertan en hábitos, el niño realizará determinadas tareas de forma prácticamente automática, lo cual te evitará tener que recordárselas constantemente.

Explícale detalladamente cada orden o instrucción: Los niños con déficit de atención suelen ser despistados y olvidadizos, por lo que es importante que le expliques detalladamente qué deseas de él. Cuando le vayas a pedir algo, asegúrate de que te esté prestando atención y, al terminar, puedes pedirle que te repita las instrucciones, para asegurarte de que las ha comprendido y memorizado.

Evita las distracciones en su entorno: Si tu hijo se distrae con facilidad, evita exponerlo a distracciones adicionales: mantén su habitación lo más organizada posible, guarda los juguetes en un sitio donde no se puedan ver a simple vista, no enciendas el televisor mientras hace los deberes y mantén los dispositivos electrónicos fuera de su alcance, al menos hasta que llegue el momento del juego.

Comienza siempre por las tareas más complejas: A medida que el día avanza, es normal que el niño se sienta más agotado, que pierda más rápido el interés y que se distraiga con mayor facilidad. Por eso, es conveniente que comience por las tareas más complicadas ya que así podrá prestarles mayor atención. Asegúrate de que tu hijo lo comprenda y que comience siempre los deberes escolares por las materias más complejas.

 

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miércoles, 13 de mayo de 2020

TLP Clasificación CIE-10 y DSM-5

El Trastorno de Personalidad Límite se relaciona principalmente con una profunda problemática narcisista y con una dimensión afectiva “enojada y hambrienta de atención”, que se expresa a través de una búsqueda continua de confirmación externa, para “rellenar” y apoyar unas “insaciables necesidades afectivas” así como una baja autoestima.

En el pasado este trastorno también ha sido definido como: «esquizofrenia pseudoneurótica» (Binswanger), «esquizofrenia afectiva» (Kansanin), «psicosis marginales» (Pankow), «personalidad como si” (Winnicott) o «carácter psicótico» (Frosch).

Está relacionado con defensas psicóticas, en particular con la escisión, que opera a través de la idealización y de la devaluación (tanto del Ego como del otro). Suele estar presente una dimensión agresiva importante, que puede dirigirse tanto hacia los demás como hacia uno mismo (conductas de riesgo, abuso de sustancias, conductas autolesivas y suicidas, por lo general acompañadas de amenazas y chantaje con fines manipulativos). Hay poca capacidad para identificarse con los demás (a los que se utiliza y manipula), hacia los cuales no hay sentimientos de amor verdadero y altruista. Puede derivar en un Trastorno Depresivo Mayor.

Parece que las experiencias traumáticas de la infancia (pérdida, separación temprana de los padres, abusos físicos, etc.) puedan jugar un papel decisivo en el desarrollo de este trastorno. Debido a estas experiencias, el niño no sería capaz de adquirir la capacidad de integrar, en una sola representación coherente, los aspectos positivos y negativos de sí mismo y de los demás. Como consecuencia, en la etapa adulta, oscilará entre estas dos posiciones (exageradamente positivo y exageradamente negativo), colocándose en el límite entre conductas adaptativas y muy patológicas.

Materson y Rinsley (1975) han conjeturado que en la base del Trastorno de Personalidad Límite pueda haber una alteración en la sub-etapa de acercamiento en el proceso de separación-individuación del niño. Estos autores encontraron que las madres de los «pacientes límite» eran altamente conflictivas en cuanto al crecimiento de su hijo (debe crecer pero también debe seguir siendo pequeño). Como resultado, el niño recibiría el mensaje de que el hecho de madurar y convertirse en una persona independiente puede dar lugar a la pérdida del amor y del apoyo materno. De esta manera, seguir siendo dependiente constituye la única posibilidad de conservar el vínculo maternal. Este poderoso mensaje causaría una «depresión abandónica» cada vez que se abre la perspectiva de la separación y de la autonomía del niño. Esto conduciría a una escisión del otro como: a) amor gratificante, que apoya y da confirmaciones (asociándose con una representación del niño bueno, obediente y pasivo); b) crítico, malo, blanco de la ira, fuente de depresión, abandono y desesperación (asociándose con la representación del niño malo, culpable y desagradable). De esta manera el paciente con Trastorno Límite de Personalidad permanecería fragmentado y convencido de que sólo hay dos opciones en la vida: sentirse abandonado y malo o bueno (cuando decide no crecer nunca)

Clasificación DSM V & CIE 10

El Trastorno de Personalidad Límite (DSM V) se caracteriza por un patrón dominante de inestabilidad en las relaciones interpersonales, de la autoimagen y de los afectos, e impulsividad  intensa, que comienza al principio de la edad adulta y se manifiesta en diferentes contextos, por 5 o más de los hechos siguientes:

  1. Esfuerzos desesperados para evitar el desamparo real o imaginado (no incluye el comportamiento suicida ni de automutilación que figura en criterio 5).
  2. Patrón de relaciones interpersonales inestables e intensas que se caracteriza por una alternancia entre los extremos de idealización y devaluación.
  3. Alteración de la identidad: inestabilidad intensa y persistente de la autoimagen y del sentido del yo.
  4. Impulsividad en dos o más áreas que son potencialmente autolesivas (e.g. gastos, sexo, drogas, conducción temeraria, atracones alimentarios).
  5. Comportamientos, actitud o amenazas recurrentes de suicidio, o comportamiento de automutilación.
  6. Inestabilidad afectiva debida a una reactividad notable del estado de ánimo (e.g. episodios intensos de disforia, irritabilidad o ansiedad que generalmente duran unas horas y, rara vez, más de unos días).
  7. Sensación crónica de vacío.
  8. Enfado inapropiado e intenso, o dificultad para controlar la ira (e.g. exhibición frecuente de genio, enfado constante, peleas físicas recurrentes).
  9. Ideas paranoides transitorias relacionadas con el estrés o síntomas disociativos graves.

Según la Clasificación Internacional de los Trastornos Mentales y del Comportamiento (CIE-10),  se considera bajo la etiqueta de (F60.3) Trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad. «Se trata de un trastorno de personalidad en el que existe una marcada predisposición a actuar de un modo impulsivo sin tener en cuenta las consecuencias, junto a un ánimo inestable y caprichoso. La capacidad de planificación es mínima y es frecuente que intensos arrebatos de ira conduzcan a actitudes violentas o a manifestaciones explosivas; éstas son fácilmente provocadas al recibir críticas o al ser frustrados en sus actos impulsivos. Se diferencian dos variantes de este trastorno de personalidad que comparten estos aspectos generales de impulsividad y falta de control de sí mismo».

F60.30 Trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad de tipo impulsivo. «Las características predominantes son la inestabilidad emocional y la ausencia de control de impulsos. Son frecuentes las explosiones de violencia o un comportamiento amenazante, en especial ante las críticas de terceros.» Se incluyen: Personalidad explosiva y agresiva; El trastorno explosivo y agresivo de la personalidad. Se excluye el Trastorno disocial de la personalidad (F60.2).

F60.31 Trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad de tipo límite. «Se presentan varias de las características de inestabilidad emocional. Además, la imagen de sí mismo, los objetivos y preferencias internas (incluyendo las sexuales) a menudo son confusas o están alteradas. La facilidad para verse implicado en relaciones intensas e inestables puede causar crisis emocionales repetidas y acompañarse de una sucesión de amenazas suicidas o de actos autoagresivos (aunque éstos pueden presentarse también sin claros factores precipitantes)». Se incluye: La Personalidad «borderline»; El Trastorno «borderline» de la personalidad.

Los cuatro subtipos de pacientes con Trastorno Límite de Personalidad (Grinker, Werble, & Drye, 1968).

Tipo I – Lado Psicótico

  •     Comportamiento inapropiado y desadaptativo.
  •     Problemas con el examen de la realidad y el sentido de identidad.
  •     Comportamiento negativo y enojo expresado abiertamente.

Tipo II – Núcleo de la Síndrome Límite de Personalidad

  •    Afectividad negativa generalizada.
  •    Implicación relacional inestable con los demás.
  •    Acción agresiva.
  •    Identidad de sí mismo inconsciente

Tipo III – Grupo «Como sí”

    Tendencia a imitar la identidad de los demás.

  •    Anafectividad.
  •    Comportamiento más adaptativo.
  •    Relaciones carentes de espontaneidad y autenticidad.

Tipo IV – Lado neurótico

  •    Depresión anaclítica.
  •    Ansiedad.
  •    Aspectos neuróticos y narcisistas.

Características diferenciales del Trastorno Límite de la Personalidad (Zannarini, Gunderson, & Frankenburg, 1990)

  •    Pensamiento casi-psicótico.
  •    Automutilaciones.
  •    Intentos de manipulación a través del suicidio.
  •    Miedo a ser abandonado o aniquilado.
  •    Severidad/Indulgencia.
  •    Regresiones terapéuticas.
  •    Dificultades en la contratransferencia.

Criterios de Kernberg para la organización Límite de la Personalidad (Kernberg, 1975)

I. Manifestaciones no específicas de debilidad del Ego:

  •    Falta de tolerancia de la angustia.
  •    Falta de control de impulsos.
  •    Falta de canales sublimatorios maduros.

II. Deslizamiento hacia procesos de pensamiento primario.

III. Operaciones defensivas específicas de la organización del Trastorno de Personalidad Límite:

  •     Escisión.
  •     Idealización primitiva.
  •     Formas primitivas de proyección, presencia en particular de la identificación proyectiva.
  •     Negación.
  •     Omnipotencia y devaluación.

IV. Relaciones de objeto patológicas internalizadas

Características diferenciales del Trastorno Límite de Personalidad respecto al Trastorno de Personalidad Narcisista

Mientras en el Trastorno de Personalidad Narcisista estaría presente un “yo grandioso” y la incapacidad de aceptar la dependencia, en el Trastorno de Personalidad Límite el concepto de “sí mismo” sería más estable, con tendencia a instaurar relaciones de dependencia (anaclitismo). Según Rinsley (1980, 1989), mientras que la persona con Trastorno de Personalidad Límite habría sufrido, durante la niñez, un paro en ambas fases del proceso de separación-individuación (acercamiento y separación), el paciente narcisista habría sufrido una disociación entre la fase de acercamiento (que se ha podido desarrollar) y la fase de separación, que se ha quedado bloqueada.


Fuente: PSISE


jueves, 7 de mayo de 2020

Adicciones. ¿Cómo identificar una adicción?

Hablamos de adicción para referirnos a una conducta concreta que se caracteriza por la relación que una persona establece y sostiene en el tiempo con un  determinado objeto. Al decir objeto no solo nos referimos a drogas, es decir a las adicciones por consumo de sustancias, sino que un objeto de adicción puede ser un comportamiento, una situación u otra persona.

Entonces, para hablar de adicción, necesitamos una persona que por determinadas variables bio-psico-sociales encara un vínculo cargado de dependencia hacia su objeto de adicción y esto se conserva de forma progresiva en el tiempo. Es necesaria la repetición para empezar a hablar de adicción: Una  conducta que se repite de forma excesiva, dependiente, compulsiva, con daños en diferentes áreas de la vida de la persona. La persona siente que no puede parar y cuando no realiza dicha conducta siente gran malestar, mediante los síntomas de la abstinencia: necesita volver a repetir esa conducta una y otra vez, por cierta gratificación (inicial y momentánea) que le brinda esa conducta particular y para evitar lo insoportable que es la abstinencia.

Una conducta adictiva pareciera esclavizar a la persona. Para sí mismo es vista como más fuerte que él. Como si la voluntad hubiera sido vulnerada. Como si el sentido de la vida estuviera limitado y remitido a esa conducta. Toda la vida de la persona adicta termina organizándose alrededor de esta conducta.

Las señales por lo general, se presentan desde que inicia el consumo o cuando éste se encuentra en la primer etapa, así que desde este momento presta mucha atención a las señales de alerta, identifica si la persona que consideras está ingiriendo sustancias adictivas cumple con la mayoría de estas señales y si lo permite, brindarle tu apoyo y busquen ayuda.

Síntomas de personas adictas

  • Falta de autocontrol
  • Recuerdo selectivo sobre las consecuencias agradables del consumo
  • Auto-engaño
  • Deseo automático
  • Conductas autolesivas o destructivas
  • Cambios en la relación el entorno
  • Modificación de los intereses, actividades, motivaciones o cuidado personal de la persona
  • Deterioro de las principales áreas vitales del individuo
  • Cambios en el estado de ánimo.
  • Falta de concentración y problemas de memoria

 Comportamientos más frecuentes que aparecen en personas adictas y la repercusión que tienen en su vida diaria:

  • Pérdida de control sobre el objeto de la adicción o la conducta adictiva.
  • Aumenta el tiempo y la inversión que se realiza para satisfacer la adicción.
  • La adicción afecta negativamente a otros aspectos de la vida cotidiana como las relaciones sociales y familiares, el ámbito laboral y económico, la salud, etc.
  • La persona trata de justificar su conducta, se auto engaña y niega la existencia del problema.
  • El pensamiento se distorsiona influenciado por la conducta adictiva y se crea una espiral de consumo o actos. Además, también pueden aparecer distorsiones afectivas ya que dejan de tolerarse determinadas emociones y se crean dificultades para poder identificar o interpretar los propios sentimientos.
  • Se producen nuevas relaciones o hábitos estrictamente relacionados con la adicción, lo que aumenta el deseo de consumir o de llevar a cabo determinadas conductas. Además, si no se logra alcanzar aquello que es necesario para alimentar esa adicción, se pueden manifestar estados de ansiedad y estrés.

20 señales de alerta

  1. Su comportamiento y/o carácter ha cambiado.
  2. Ha disminuido su rendimiento escolar o laboral.
  3. Gasta mucho dinero y constantemente pide prestado.
  4. Maneja o tiene boquillas, pipas y jeringas.
  5. Sufre de insomnio y en el día está somnoliento o atontado.
  6. Está eufórico sin razón alguna.
  7. Usa en exceso chicles y pastillas.
  8. En todo momento usa lentes obscuros, aún en lugares cerrados.
  9. Tiene congestión de ojos, nariz y garganta.
  10. Ha cambiado a su grupo de amigos.
  11. No tiene claras sus prioridades e intereses.
  12. Su rutina ha cambiado.
  13. Tiene dificultad para caminar y parece desorientado.
  14. Se ha aislado o quiere estar solo gran parte del día.
  15. Habla mucho y muy lento.
  16. Ha descuidado su forma de vestir y su higiene.
  17. Roba dinero u objetos, comienzan a desaparecer cosas de valor en casa.
  18. Tiene náuseas.
  19. Ante situaciones, le dan crisis de miedo o temor.
  20. Tiene cápsulas, tabletas o pastillas que no fueron indicados por el médico.

Ya revisaste las señales de alerta y te diste cuenta que la persona cercana a ti presenta la mayoría, ¿ahora qué sigue? ¿Qué debes hacer?

Para la prevención, tratamiento y control de las adicciones; la prevención se refiere a un “conjunto de acciones dirigidas a identificar, evitar, reducir, regular o eliminar el consumo no terapéutico de sustancias psicoactivas, como riesgo sanitario, así como sus consecuencias físicas, psíquicas, económicas, familiares y sociales”.

Tips de protección

  1. Ayúdale a tener un estilo de vida saludable que incluya actividades deportivas.
  2. Permite y propicia que exprese sus sentimientos y emociones.
  3. Mantén una comunicación asertiva con la persona.
  4. Consulta con especialistas o instituciones que atiendan el tema de las adicciones, los efectos y consecuencias en la salud tanto a corto como a largo plazo.
  5. Fomenta valores como la honestidad, solidaridad y respeto.
  6. Aprende el valor e importancia de decir “NO” cuando te encuentres en situaciones en las cuales no te sientas cómodo.

Una adicción es un problema que afecta a la salud mental y física de la persona adicta; afecta a todo el sistema familiar; dificulta el desarrollo de actividades educativas y laborales; puede llegar a producir problemas legales en algunos casos, por ejemplo bajo el efecto del consumo de drogas, o para conseguir comprarlas.

Si tienes dudas o piensas que alguien de tu entorno puede tener un problema con estas características y que está siendo perjudicial para su salud y la de los que le rodean, no dudes en buscar ayuda profesional o bien, acércate a instituciones especializadas en el tratamiento con la finalidad de aclarar inquietudes y orientar de la mejor forma la forma de actuar ante esta situación.


Fuente: Compilador


martes, 5 de mayo de 2020

Depresión Masculina

La depresión masculina es una enfermedad grave, pero muchos hombres intentan ignorarla o no quieren recibir tratamiento. Infórmate sobre los signos y síntomas, y sobre qué hacer.

La depresión puede afectar a hombres y mujeres de manera diferente. Cuando la depresión ocurre en los hombres, puede estar enmascarada por un comportamiento poco saludable para sobrellevar la situación. Por varias razones, la depresión masculina a menudo no se diagnostica y puede tener consecuencias devastadoras cuando no se trata. Pero la depresión masculina generalmente mejora con el tratamiento.

Señales y síntomas de la depresión masculina

¿Te sientes irritable, aislado o retraído? ¿Te encuentras trabajando todo el tiempo? ¿Bebes demasiado? Las señales y síntomas de la depresión pueden ser diferentes en hombres y en mujeres. Los hombres también tienden a usar diferentes habilidades de afrontamiento (tanto saludable como no saludable) que las mujeres, pero no está claro por qué los hombres y las mujeres pueden experimentar la depresión de manera diferente. Probablemente involucra una serie de factores, que incluyen la química cerebral, las hormonas y las experiencias de vida.

Al igual que las mujeres con depresión, los hombres con depresión pueden hacer lo siguiente:

  • Sentirse triste, desesperado o vacío
  • Sentirse extremadamente cansado
  • Tener dificultad para dormir o dormir demasiado
  • No obtener placer de las actividades que normalmente se disfruta

Otros comportamientos en los hombres que podrían ser señales de depresión, pero que no se reconocen como tales, incluyen:

  • Comportamiento de escape, como pasar mucho tiempo en el trabajo o en deportes
  • Síntomas físicos, como dolores de cabeza, problemas digestivos y dolor
  • Problemas con el uso de alcohol o drogas
  • Comportamiento controlador, violento o abusivo
  • Irritabilidad o ira inapropiada
  • Comportamiento riesgoso, como conducir imprudentemente

Debido a que estos comportamientos podrían ser señales de o podrían solaparse con otros problemas de salud mental, o podrían estar asociados con enfermedades, la ayuda profesional es la clave para un diagnóstico preciso y un tratamiento apropiado.

En resumen ¿Cuáles son los signos y síntomas de la depresión en los hombres?

  1. Los síntomas varían de un hombre a otro, pero algunos síntomas comunes de depresión incluyen:
  2. Ira, irritabilidad o agresividad
  3. Sentimientos de ansiedad, inquietud o de “estar al borde del abismo”
  4. Pérdida de interés en el trabajo, la familia o actividades que antes resultaban placenteras
  5. Problemas con la libido o deseo sexual y con el rendimiento sexual
  6. Sentimientos de tristeza, "vacío" o de falta de esperanza.
  7. Dificultad para concentrarse o recordar detalles
  8. Fatiga, falta de sueño o demasiado sueño
  9. Comer demasiado o no querer comer nada
  10. Pensamientos suicidas o intentos de suicidio
  11. Dolores o malestares físicos, dolores de cabeza, retortijones en el estómago (cólicos) o problemas digestivos
  12. Incapacidad para cumplir con las responsabilidades del trabajo, el cuidado de la familia, u otras actividades importantes
  13. Participación en actividades de alto riesgo
  14. Necesidad de consumir alcohol o drogas
  15. Aislarse o alejarse de la familia y amigos

No todos los hombres que están deprimidos tienen todos los síntomas. Algunos hombres tienen solamente algunos síntomas mientras que otros pueden tener muchos.

¿Qué causa la depresión en los hombres?

 La depresión es uno de los trastornos mentales más frecuentes en los Estados Unidos. La investigación actual sugiere que la depresión es causada por una combinación de factores de riesgo que incluyen:

  1. Los factores genéticos: los hombres que tienen antecedentes familiares de depresión pueden ser más propensos a desarrollar la enfermedad que aquellos cuyos familiares no tienen depresión.
  2. El estrés ambiental: los problemas financieros, la pérdida de un ser querido, una relación difícil, cambios importantes en la vida, problemas laborales o una situación estresante pueden desencadenar la depresión en algunos hombres.
  3. Las enfermedades: La depresión puede ocurrir con otras enfermedades médicas graves, como la diabetes, el cáncer, las enfermedades del corazón o la enfermedad de Parkinson. La depresión puede empeorar estas enfermedades y viceversa. A veces, los medicamentos que se toman para tratar estas enfermedades pueden causar efectos secundarios que desencadenan o empeoran la depresión.

¿Cómo se trata la depresión?

Los hombres a menudo evitan enfrentar sus sentimientos. En muchos casos, los amigos y familiares son los primeros en reconocer que ellos están deprimidos. Es importante que los amigos y la familia apoyen y alienten a su ser querido a visitar a un médico o profesional de la salud mental para una evaluación. Un profesional de la salud puede hacer un examen médico o pruebas de laboratorio para descartar otros problemas médicos que pueden tener síntomas parecidos a los de la depresión. También puede saber si ciertos medicamentos están causando la depresión.

El médico debe tener la historia clínica completa de los síntomas, como cuándo empezaron, cuánto tiempo han durado, si están muy graves, si han ocurrido antes y, si es así, cómo fueron tratados. Es importante que los hombres que buscan ayuda sean abiertos y honestos sobre cualquier intento de "automedicarse" con alcohol o medicamentos de venta libre, juegos de azar o actividades de alto riesgo. Una historia clínica completa debe incluir información sobre cualquier historia familiar de depresión o de otros trastornos mentales.

Una vez diagnosticada, la depresión se suele tratar con medicamentos o psicoterapia, (ambos enlaces en inglés) o una combinación de las dos cosas. El enfoque cada vez más popular de "intervención integral de la atención o “atención colaborativa" combina la atención a la salud física y a la conductual. La atención colaborativa involucra un equipo de proveedores de atención médica y administradores, incluyendo un médico de atención primaria y especialistas.

Nota: La depresión masculina a menudo no se diagnostica

A menudo no se diagnostica la depresión en los hombres por varias razones, entre ellas:

  1. Falta de reconocimiento de la depresión. Tal vez pienses que sentirse triste o emocional es siempre el síntoma principal de la depresión. Pero para muchos hombres, ese no es el síntoma principal. Por ejemplo, los dolores de cabeza, los problemas digestivos, el cansancio, la irritabilidad o el dolor a largo plazo a veces pueden indicar depresión. También lo puede ser sentirse aislado y buscar distracción para evitar enfrentar sentimientos o relaciones.
  2. Minimizar los signos y síntomas. Es posible que no reconozcas cuánto te afectan tus síntomas o que no quieras admitir que estás deprimido, ni a ti mismo, ni a nadie más. Pero ignorar, suprimir o enmascarar la depresión con un comportamiento poco saludable solamente empeorará las emociones negativas.
  3. Negarse a hablar de los síntomas de la depresión. Es posible que no estés abierto a hablar de tus sentimientos con familiares o amigos, y mucho menos con un médico o un profesional de la salud mental. Como muchos hombres, puedes haber aprendido a enfatizar el autocontrol. Es posible que pienses que no es varonil expresar emociones y sentimientos asociados a la depresión y que trates de suprimirlos.
  4. Resistirse al tratamiento de salud mental. Incluso si sospechas que tienes depresión, puedes evitar el diagnóstico o rechazar el tratamiento. Puedes evitar recibir ayuda porque te preocupa que el estigma de la depresión pueda dañar tu carrera o hacer que tu familia y tus amigos pierdan el respeto por ti.

Depresión masculina y suicidio

Aunque las mujeres intentan suicidarse con más frecuencia que los hombres, los hombres tienen más probabilidades de suicidarse. Eso es porque los hombres:

  • Usan métodos que tienen más probabilidad de causar la muerte, como las armas de fuego.
  • Pueden actuar más impulsivamente ante pensamientos suicidas.
  • Muestran menos señales de advertencia, como hablar sobre el suicidio.

Si tienes pensamientos suicidas:

  • Si crees que puedes llegar a lastimarte o intentar suicidarte, pide ayuda sin demora. Si tienes pensamientos suicidas, pero no estás pensando en hacerte daño a ti mismo en lo inmediato, pide ayuda:
  • Acércate a un amigo cercano o un ser querido, aunque sea difícil hablar sobre tus sentimientos.
  • Ponte en contacto con un pastor, un líder espiritual u otra persona de tu comunidad religiosa.
  • Considera sumarte a un grupo de salud para hombres que se ocupe de la depresión.
  • Llama a la línea directa del centro de asistencia al suicida.
  • Pide una consulta con tu médico, otro proveedor de atención primaria o un profesional de salud mental.

Obtén ayuda cuando la necesites

Pedir ayuda puede ser difícil para los hombres. Pero sin tratamiento, es poco probable que la depresión desaparezca y puede empeorar. La depresión no tratada puede hacer que tú y las personas cercanas a ti se sientan miserables. Puede causar problemas en todos los aspectos de tu vida, incluso tu salud, carrera, relaciones y seguridad personal. La depresión, incluso si es grave, por lo general mejora con medicamentos o asesoramiento psicológico (psicoterapia) o ambos. Si tú o alguien cercano a ti piensan que puedes estar deprimido, habla con tu médico o con un profesional de la salud mental. Es una señal de fortaleza pedir consejo o buscar ayuda cuando la necesitas.

Depresión masculina y habilidades de afrontamiento

El tratamiento con un profesional de la salud mental, como la psicoterapia, puede ayudarte a aprender habilidades de afrontamiento saludables. Estos pueden incluir lo siguiente:

  • Metas. Establece metas realistas y prioriza las tareas.
  • Apoyo. Busca el apoyo emocional de tu pareja, familia o amigos. Aprende estrategias para construir vínculos sociales y poder participar en actividades sociales.
  • Afrontamiento. Aprende maneras de manejar el estrés, como a través de la meditación y la conciencia plena, y desarrolla habilidades para resolver problemas.
  • Decisiones. Posterga tomar decisiones importantes, como cambiar de trabajo, hasta que los síntomas de la depresión mejoren.
  • Actividades. Participa en actividades que normalmente disfrutas, como juegos de pelota, pesca o un pasatiempo.
  • Salud. Trata de respetar un horario fijo y hacer elecciones saludables para tu estilo de vida, como llevar una alimentación saludable y hacer actividad física periódica, para promover una mejor salud mental.

Psicoterapia

Hay varios tipos de psicoterapia o "terapia de diálogo" que pueden ayudar a tratar la depresión. Algunas formas de psicoterapia pueden ser tan eficaces como los medicamentos para tratar ciertos tipos de depresión. La psicoterapia ayuda al enseñar nuevas formas de pensar y comportarse, y a cambiar los hábitos que pueden estar contribuyendo a la depresión. La psicoterapia también puede ayudar a los hombres a entender y resolver situaciones o relaciones difíciles que pueden estar causando su depresión o empeorándola.

La terapia cognitivo-conductual, la terapia interpersonal y la terapia de resolución de problemas son ejemplos de terapias de diálogo basadas ​​en la evidencia que se usan para tratar la depresión.

El tratamiento para la depresión debe ser personalizado. Algunos hombres, pueden tratar primero la psicoterapia y añadir antidepresivos más tarde si los necesitan. Otros podrían comenzar el tratamiento con tanto medicamentos como psicoterapia

Existen muchos tratamientos efectivos para la depresión. Por lo tanto, no trates de combatir la depresión masculina tú solo; las consecuencias podrían ser devastadoras.