En un mundo en el que se valora la humildad, algunas de las personas más irritantes son aquellas que constantemente mencionan a personas importantes que dicen conocer, alardean, se adjudican éxitos y opinan sobre su propia brillantez.
Estas cualidades desatan
las alarmas de que tenemos cerca un narcisista, el tipo de persona que nos
exaspera y nos hace rechinar los dientes.
Es difícil sentir
compasión por alguien que está tan pagado de sí mismo, y en muchos casos no
está claro por qué querríamos simpatizar con las personas que más nos repelen.
Sin embargo,
investigaciones indican que, a diferencia de Narciso mirando su reflejo en el
lago, muchos narcisistas en realidad no están enamorados de ellos mismos.
Gran parte del tiempo, el
comportamiento de un narcisista no está impulsado por el amor sino por el odio hacia
sí mismo.
Nuevos hallazgos
refuerzan esta idea e insinúan que un comportamiento narcisista, como la
exhibición en redes sociales, puede tener su origen en una baja autoestima y
una constante necesidad de autovalidación.
El hecho de que algunos
narcisistas quizá no se gusten no solo desmonta lo que se suele pensar sobre
los fanfarrones, sino que también sugiere que quizá queramos repensar la forma
en la que interactuamos con los narcisistas.
"No se sienten
bien"
"Los narcisistas
tienden a ser encantadores y muy sociables y pueden causar muy buenas primeras
impresiones", dice Robin Edelstein, profesora de Psicología en la
Universidad de Michigan, Estados Unidos.
"Pero también tienden
a ser desagradables, sin empatía y manipuladores".
En un entorno laboral,
esto se puede poner de manifiesto en personas que se atribuyen éxitos por el
trabajo de otros, le echan la culpa de los errores a los colegas, se aprovechan
de otros para avanzar o responden con hostilidad a las críticas, explica
Edelstein.
Socialmente, esto se
puede manifestar presumiendo en redes sociales o robando la atención durante
una comida en detrimento de otros.
Una idea equivocada muy
común es que este comportamiento nace de un intenso amor propio, una obsesión
con uno mismo, el egocentrismo. Pero la causa podría ser la opuesta.
"Individuos
narcisistas están en realidad paralizados por la inseguridad y la vergüenza y
toda su vida es un intento de controlar su imagen", apunta Ramani
Durvasula, psicóloga clínica con licencia y profesora en la Universidad Estatal
de California, Los Ángeles.
"El narcisismo no es
una cuestión de amor propio. Es casi en su totalidad desprecio por uno
mismo".
Dos tipos de narcisistas
Desde hace tiempo se ha
establecido que hay dos tipos de narcisistas: los "vulnerables", que
tienen una baja autoestima y anhelan afirmaciones positivas, y los
"grandiosos", que genuinamente tienen un sentido de sí mismos
hiperinflado.
Un nuevo estudio de la
Universidad de Nueva York muestra que los narcisistas grandiosos quizá no sean
considerados narcisistas, porque su comportamiento puede parecerse a la
psicopatía, un trastorno en el que las personas actúan sin empatía para
beneficio propio.
El equipo investigador
sugiere que el otro tipo, el de los vulnerables, es el de los verdaderos
narcisistas, porque no buscan poder ni dominio, sino afirmaciones positivas y
una atención que eleven su estatus e imagen en la mente de los demás.
"No se sienten bien
hacia ellos mismos en absoluto", dice Pascal Wallisch, profesor clínico
asociado en la Universidad de Nueva York y autor del estudio.
"El documento no
está hecho para demonizar a los narcisistas, para nada. Al contrario,
necesitamos mucha más compasión".
En el estudio
participaron casi 300 estudiantes universitarios que respondieron a
cuestionarios que medían rasgos de la personalidad, como ser inseguro o no
tener empatía, con afirmaciones como: "tiendo a no tener
remordimientos" o "importa que se me vea en eventos
importantes".
Hallaron que, a
diferencia de los narcisistas grandiosos, los narcisistas vulnerables fueron el
grupo que manifestó más inseguridad y otros rasgos relacionados.
Así que, cuando veas a
alguien que cita nombres de gente importante en el trabajo, que llena Instagram
de selfies o parece muy sensible a críticas negativas, es posible que sea un
narcisista vulnerable (o "verdadero").
Su constante necesidad de
atención y su aparente obsesión consigo mismo viene de profundas inseguridades
que está intentando ocultar.
Un círculo vicioso
Obviamente, buscar
refuerzos positivos para sentirnos mejor es algo que todos hacemos de vez en
cuando y eso no convierte a una persona necesariamente en narcisista.
"Buscar una mejora
propia es un aspecto normal de la personalidad. Todos intentamos buscar
experiencias que aumenten nuestra autoestima", dice Nicole Cain, profesora
asociada de Psicología Clínica en la Universidad Rutgers, en Nueva Jersey.
"Pero el narcisismo
puede llevar a que el engrandecimiento propio se convierta en el objetivo
principal en casi todas las situaciones y puede que se busque de formas problemáticas
e inapropiadas".
En estos casos,
comportamientos que buscan alentar la validación externa se pueden volver en
contra, porque al final el individuo acaba cayendo peor.
Wallisch califica el
comportamiento resultante, cíclico y repetitivo, como una "cascada
inaceptable", un ciclo de comportamientos autolesivos que se produce en
tres fases.
Empieza con un narcisista vulnerable que teme que los demás no lo estén percibiendo de una cierta manera, por lo que se autoengrandece para calmar ese temor.
Pero, paradójicamente,
los demás sienten rechazo por ese comportamiento, lo que lleva al narcisista de
vuelta a la casilla de salida, y, de hecho, la otra persona puede tener una
opinión menos favorable de la que tenía antes.
Esto es lo que más
interesa a Wallisch: el narcisista claramente no está siendo recompensado por
su comportamiento, pero de todas formas lo adopta, porque erróneamente lo ve
como una forma de paliar el dolor y el miedo.
"Las personas
narcisistas tienen una idea de cómo quieren ser vistos y sienten que no llegan
a ese listón", dice Durvasula.
"Por tanto, se
tienen que retratar [de determinada manera] y entonces, como se comportan tan
mal para hacerlo, terminan experimentando el rechazo social de todas formas, y
el ciclo sigue ocurriendo".
Si bien esto rara vez
termina bien Wallisch sugiere que "no podemos tomar estos comportamientos
al pie de la letra, especialmente si alguien está alardeando y
jactándose".
Añade: "No quiere
decir que realmente se sientan bien consigo mismos. Algo falta en su vida".
Wallisch dice que este
tipo de narcisistas vulnerables posiblemente se odien a sí mismos.
"Es muy triste y
trágico. Sienten que nunca van a ser lo suficientemente buenos. Si se
convierten en multimillonarios, eso no les va a ayudar con el tema psicológico
[de raíz]".
¿Incomprendidos?
Todavía hay mucho que no
sabemos sobre los narcisistas en general.
Algunos expertos dicen
que el tira y afloja entre el amor propio y el autodesprecio y la idea de que
se promocionan a sí mismos porque quieren esconder inseguridades no explica
totalmente el comportamiento.
"Es una cuestión muy
difícil de comprobar", defiende Edelstein.
"¿Cómo sabes
realmente lo que una persona siente en lo más profundo que o no quiere o no
puede expresar?".
Tampoco queda claro cómo
el entender lo que impulsa el narcisismo nos puede ayudar a contener el
comportamiento.
La mayoría de los
narcisistas no se dan cuenta de que ellos son el problema, señala Edelstein,
algo que dificulta el poder abordar el asunto.
"Los narcisistas
tienden a ser resistentes al cambio porque ven el epicentro de la mayoría de
problemas en otros más que en ellos mismos", dice.
"Creo que una
persona necesita estar bastante motivada para que cualquier tipo de
intervención sea efectiva. Eso es así para cualquier rasgo de personalidad,
pero el narcisismo parece ser particularmente pegajoso".
Cain, que sugiere que la
psicoterapia intensiva es la mejor manera de tratar el narcisismo, opina que trabajadores
que lidian con colegas narcisistas deberían reconocer que es improbable que
puedan hacerles cambiar, persuadirlos o ganar una discusión con ellos.
"Fija expectativas
realistas para tus interacciones con ellos. En el trabajo, define claramente los
roles. No seas arrastrado a una competición con ellos", apunta.
Recordar que sus acciones
quizá procedan de un lugar de inseguridad puede también ayudar a que los mires
con más compasión.
"Creo que la mejor
estrategia para lidiar con narcisistas puede ser intentar entender de dónde
viene su comportamiento", indica Edelstein.
"Y que gran parte de
ese comportamiento procede de inseguridades profundamente arraigadas y de
intentar minimizar sus propias vulnerabilidades, en oposición a un reflejo de
tus carencias".
"Pienso que las
personas tapan bastante el dolor mental, con poses y otras actitudes",
sostiene Wallisch. "Esto se suma a la tragedia. Son incomprendidos".
Why some narcissists actually hate themselves - BBC Worklife