martes, 11 de diciembre de 2012

Se un buen Lider


Se han escrito muchos libros sobre liderazgo, técnicas de motivación y dirección de grupos pero… ¿qué es lo que convierte a una persona en líder? ¿Cómo podemos desarrollar nuestro potencial para liderar grupos de forma efectiva?. Aqui algunos puntos que podran ayudarte a ser un buen lider.
Algunas personas piensan que los líderes nacen, mientras que otras consideran que se hacen. Tal vez todas tengan parte de razón, pero lo cierto es que en la base del liderazgo se encuentran una serie de actitudes y comportamientos que pueden aprenderse.

¿Qué es el liderazgo?

El liderazgo es un proceso en el que una persona influye en otras para que cumplan una serie de objetivos y dirige la organización de un modo que la hace más coherente y cohesiva. Los líderes llevan a cabo esta tarea utilizando sus atributos de líderes. Es decir, una persona puede  estar al mando en una empresa, pero eso no la convierte necesariamente en líder. "No es lo mismo ser un jefe que un líder". El jefe puede lograr que los demás realicen sus tareas por obediencia, dinero, miedo a perder el trabajo, etc. mientras que el líder consigue que sus seguidores lo hagan porque lo desean. El jefe o jefa que consigue que sus trabajadores lo vean como un líder, está logrando que se sientan cómodos en su puesto de trabajo, que encuentren satisfacción en él, que se sientan parte de un equipo (de algo importante) y que confíen en su líder y su capacidad para dirigirlos correctamente.

Cuando una persona trata de decidir si confía en otra como líder, lo que hace es observar su comportamiento; determina si se trata de una persona noble y digna de confianza o de un egoísta que sólo sirve a sí mismo y utiliza su autoridad únicamente para ascender. Por tanto, para ser un buen líder has de ser una persona ética, preocupada por el bienestar de las personas que conforman tu equipo, interesada en hacer un buen trabajo y no sólo en ganar dinero o ascender.
Las personas quieren ser dirigidas por alguien que presente, sobre todo, las siguientes características:

1. Que sean personas éticas, dignas de confianza y nobles.

2. Que transmitan la sensación de que saben qué hay qué hacer y cuál es el mejor camino para lograr los objetivos.


La comunicación


La comunicación es muy importante a la hora de establecer la confianza, principalmente una buena comunicación en estas tres áreas:


1.- Ayudar a los empleados a entender la estrategia general de la empresa.

2.- Ayudar a los empleados a entender cómo contribuyen a lograr los objetivos claves de la empresa.

3.- Compartir información con los empleados acerca de cómo de bien lo están haciendo tanto ellos o su sección como la empresa a nivel general.


Las claves del liderazgo

1.- Conoce tus puntos fuertes y débiles y busca mejorar continuamente. Es decir, estudia, haz cursos, reflexiona, etc.
2.- Conoce bien tu trabajo y tus metas.
3.- Hazte responsable de tus acciones y haz que los demás se hagan responsables de las suyas, pero siempre centrándote en el futuro. Es decir, cuando algo se haga mal (que sin duda sucederá alguna vez), no evites responsabilidades, pero tampoco busques culpables. Céntrate en lo que ha de hacerse para resolver el problema y ponte en marcha, o empuja suavemente a la persona responsable a reconocer su error y subsanarlo, admitiendo que todo el mundo comete errores.


4.- Sé un ejemplo para los demás. No sólo deben escuchar lo que se espera de ellos, sino también verlo. Predicar con el ejemplo ha sido siempre una de las maneras más efectivas de liderar un grupo o una organización. No seremos buenos líderes si nuestros empleados perciben que no nos esforzamos, que trabajamos menos que ellos o que aprovechamos cualquier ocasión para asignar tareas ingratas que muy bien podríamos resolver nosotros.
5.- Conoce a las personas que integran tu equipo y preocúpate por ellas, por su bienestar general, cómo se sienten en la empresa, dificultades que puedan estar teniendo, etc. Conoce quienes son los líderes no oficiales, posibles problemas entre compañeros, cómo soportan el estrés, etc.
6.- Mantén informados a tus trabajadores.
7.- Ayuda a tus trabajadores a desarrollar comportamientos y actitudes que les ayudarán a realizar sus responsabilidades laborales.
8.- Asegúrate de que las tareas se entienden, se supervisan y se realizan.
9. - Trabaja en equipo. No sois sólo un grupo de gente que hace cada cual su trabajo, sino un equipo que hacéis un sólo trabajo entre todos. Ten esto en cuenta y trasmite esa idea a tus trabajadores.
10.- Adapta tu estilo de liderazgo a cada persona y situación. Distintas personas pueden requerir estilos diferentes. Por ejemplo, un nuevo empleado requiere más supervisión que un empleado experto; una persona con poca motivación requiere un estilo diferente que una con una motivación alta.
11.- Organización. líder desorganizado es como un perro persiguiendo su cola. Quiere decir que nosotros transmitiremos nuestra forma de trabajar al grupo. Si somos desorganizados, nuestro grupo será caótico; si hacemos lo posible por mantener el orden, el grupo se esforzará al máximo para que no haya imprevistos.
12.- Entusiasmo. El líder ha de creer en el proyecto común y debe transmitir su pasión y entusiasmo al resto del grupo. Un líder desganado o desmotivado no es la mejor imagen que que puede transmitir una empresa. El carisma y la acción son dos cualidades esenciales de todo emprendedor que aspire a ser un buen líder.
13.- Valor inquebrantable, autodominio, profundo sentido de justicia, desición, planear y trabajar el plan, trabajar más que los demás, buena personalidad, maestria en el detalle, voluntad, deseo, comperación, leal, no énfasis en su autoridad, no egoista, imaginativo, sin temor, honesto y transparente, etc...

lunes, 10 de diciembre de 2012

Los Celos En La Relación De Pareja


Es común que la gran mayoría de las personas crean que los celos son conductas negativas e inapropiadas, sin embargo no todos los celos son malos o negativos.

Para determinar si los celos son positivos y le hacen un bien a la relación de pareja, o si son un mecanismo de protector que surge como respuesta ante la presencia de algún tipo de amenaza que atente contra la estabilidad de la pareja, o si son psicopatológicos, es necesario clasificarlos según su intensidad, ya sea baja, media o alta.
La gran mayoría de las personas, si no es que todas, han experimentado diversos tipos de celos en algún momento de su vida. En algunos casos, ciertas personas dicen no sentir celos y comentan que quienes los sienten, es debido a inseguridad, miedos, falta de confianza, etc. Bajo este esquema, es probable que el no sentir celos pueda ser debido a un mecanismo psicológico de protección debido a una experiencia negativa en el pasado.


CELOS DE INTENSIDAD BAJA: son los celos positivos.

Echeburúa y Fernández comentan que no todos los tipos y formas de celos son malos o negativos. Los celos obedecen a un principio dialógico y homeostático, es por ello que dicha conducta no es mala ni negativa, siempre y cuando se manifieste dentro de los parámetros adecuados y aceptados en la relación de pareja. Esto significa que si los celos se manifiestan en bajas intensidades, de forma inofensiva, en forma de juego, causando sentimientos o emociones positivas como la felicidad, alegría, seguridad y producen un buen resultado para esa relación de pareja, estamos hablando de celos no psicopatológicos, es decir, celos positivos o equilibrados que producen un buen funcionamiento en la relación de pareja.

Cada relación de parejas posee ciertas características particulares que las hacen diferentes de otras parejas. Paradójicamente mientras que para una pareja manifestar los celos de cierta manera pueda resultar sano, positivo y mantenga la relación funcionando adecuadamente, otra pareja pueda percibirlo negativamente incluso si lo intentan imitar, pueda no funcionarles.

Una otra propuesta es que los celos pueden ser positivos cuando lo que se demanda es algo que se debe hacer sobre una base de igualdad en la pareja. En otras palabras, cada pareja crea sus propias reglas o lineamientos sobre lo aceptable o no aceptable, sobre lo permitido o no permitido y mientras que esa relación de pareja funcione sana y adecuadamente bajo esos términos, significa que están en lo correcto, independientemente si dichas reglas o lineamientos funcionarían o no para otras parejas.


CELOS DE INTENSIDAD INTERMEDIA: celos conflictivos.


Específicamente en el caso de que algún miembro de la pareja ya presentara conductas de celos desde un inicio de la relación sin motivo real fundamentado y a una intensidad intermedia, es altamente probable que obedezca a problemas de autoestima, seguridad y confunda el verdadero significado de amar. Por otra parte es posible que esa persona, haya tenido experiencias negativas y no las ha resuelto adecuadamente en su nivel cognitivo y emocional.

Cuando  el motivo de los celos se debe a una causa real presente, generalmente la persona que cela, observa mensajes de alguien más, enviados al celular de su pareja y que son poco apropiados moralmente, o al correo electrónico. También puede notar como su pareja responde a esos mensajes, o trata de manera especial a otra persona como si le gustara o como si se estuviera enamorando.


Si los celos se producen a causa de chismes de vecinos, amigos o familiares, o aparición de algunas enfermedades de transmisión sexual (si la pareja no las tenía), o por antecedentes de infidelidad, se puede decir que la aparición de los celos en la pareja es normal y obedece a una respuesta por proteger, cuidar y evitar perder al ser amado al mismo tiempo que es un mecanismo esclarecedor de dudas para llegar a la verdad.


Generalmente este tipo de celos que obedecen a una causa real se manifiestan en una intensidad mediana o moderada a diferencia de los celos positivos, los cuales se manifiestan en una intensidad baja e inofensiva.

Este tipo de celos de mediana intensidad que aparecen ante la sospecha de alguna amenaza real que atente contra la estabilidad y bienestar de la relación, se manifiestan mediante reclamos, cuestionamientos y discusiones en torno a esa tercera persona percibida como amenaza, si la vio, si le hablo, que si donde estuvo a tal hora, con quien, y si se mantiene este tipo de conductas por un periodo de tiempo prolongado, pueden incrementarse hasta la categoría más alta que son los celos de alta intensidad.

Cuando aparecen este tipo de celos a intensidad intermedia y comienzan hacerse rutinarios, la pareja suele decirse eres un celoso(a), estas enfermo(a) de los celos, ya me tienes arto(a), cansado(a), fastidiado(a), eres inseguro(a), no confías en mi, etc.


Independientemente si el conyugue que cela tiene o no la razón, se cree que el problema es de esa persona en particular tú eres el celoso(a), el inseguro(a), piensas mal, vez cosas que no son. Si ese conyugue que cela, antes no era celoso(a), y ahora si lo es, es muy probable que algo está fallando en la relación de pareja, algo no está bien, ni para uno ni para el otro y como resultado de un mal funcionamiento o problemas en algo de su relación, aparecen los celos en alguno de los conyugues, no como un problema, sino como un síntoma de un problema no identificado.

Bajo este esquema, los celos surgen a raíz de la interacción de esa pareja y cumplen una función: dar solución al supuesto problema de tal manera que él, o la conyugue se alejen de esa tercera persona percibida como amenaza, que pasen más tiempo entre ellos (la pareja), que sea detallista, cariñoso(a), etc.

Al intentar dar solución al supuesto problema de los celos, pueden suceder dos cosas: se soluciona el problema o simplemente los intentos por solucionarlo de esa manera no funcionan y entre más se intenta resolver, menos se resuelve, incluso empeora.

Al empeorar los celos van incrementando su intensidad y con esto, conductas más peligrosas como golpes, autoagresiones, amenazas, groserías, altos niveles de depresión, ansiedad, delirios, paranoia, etc.


LOS CELOS DE ALTA INTENSIDAD: celos psicopatológicos.


Los celos psicopatológicos tanto pueden aparecer como afán de evitar perder al ser querido ante una amenaza real, o como por ausencia de una causa real, ya que esta puede ser imaginaria y muy subjetiva.
Lo normal sería que cuando la amenaza que representa esa tercera persona ha desaparecido, o la pareja ha llegado a acuerdos en torno a los celos, la intensidad de los celos disminuyan y con esto la mayoría de los problemas de pareja que tenían desaparezcan. En los celos psicopatológicos esto no ocurre.


En caso de no haber una causa real para que aparezcan los celos como lo comenta Echeburúa y Fernández existen tres características elementales en los celos psicopatológicos: la ausencia de un factor desencadenante, la rara naturaleza de las sospechas y la reacción emocional irracional del sujeto afectado.


Ambos autores comentan que lo que está estrechamente relacionado con los celos psicopatológicos es la desproporcionada intensidad con la que se manifiestan.


Cuando los celos de intensidad intermedia no logran solucionar el problema (proteger lo que considera de su propiedad o alejar a la amenaza latente), entonces el organismo, tanto consiente como inconscientemente en su afán primordial de solucionarlo, incrementa la intensidad y fuerza de éstos.

Esto ocasiona que se desarrollen conductas obsesivas, círculos viciosos y repetitivos, golpes, delirios, paranoia, chantajes,  insultos, amenazas, depresión y ansiedad.

Cuando el celoso(a) ha alcanzado la intensidad alta, por añadidura se ha adquirido una pauta de conducta destructiva. Esto significa que el, o la celoso(a) psicopatológico(a), destruyen el amor, la paz, la armonía, la tranquilidad, el bienestar tanto de su relación de pareja, como de ellos(as) mismos(as) y de su conyugue.


Una relación de pareja impregnada por conductas destructivas de celos en intensidad alta, terminara tarde que temprano en la separación o en una tragedia.


TRATAMIENTO

El tratamiento psicológico a seguir obedecerá a cada caso en particular.


Por ejemplo si el psicoterapeuta identifica que el problema viene desde tiempo atrás en un conyugue. Entonces deberá enfocarse a ese conyugue en particular, para realizar el análisis y tratamiento correspondiente.


Si el terapeuta nota que el problema surgió a nivel interaccional, entonces sus focos de atención deberán enfocarlos a dichas interacciones por medio de una terapia de pareja. De igual manera si nota que los celos son un síntoma de un problema oculto o disfrazado, deberá enfocarse a identificarlo y corregirlo.


En algunos casos puede requerirse que el paciente sea medicado por un psiquiatra, esto con el objetivo de disminuir los altos niveles de ansiedad y obsesividad o paranoia, delirios, etc., según sea el caso.



 Conclusion


Los celos son un sentimiento de temor a perder a la persona amada. Los celos, de forma controlada y en pequeñas dosis, pueden ayudarnos a potenciar la relación pero, cuando los celos son enfermizos nublan la razón de quien los padece. Sus sospechas se basan, la mayoría de las veces, en hechos infundados y, el constante temor a ser abandonados les lleva a ejercer un continuo temor sobre la pareja. Aunque conviene saber que cuanto más seguros nos sentimos de nuestra pareja y de nuestra relación con ella menos intensos y duraderos son

No controles o quieras controlar a tu pareja, desarrolla y trabaja  mejor tu autoestima y seguridad, confronta tus miedos, cambia los pensamientos destructivos por positivos de seguridad y confianza, aprende a diferenciar los hechos reales a la manipulación de la imaginación, se tolerante y respeta su espacio, no idealices a tu pareja, evita la rutina, reafirme su relación con amor, respeto y buena comunicación.


Puedes ver mi blog sobre Celos Patológicos publicado en el mes de Junio.