jueves, 22 de enero de 2015

Telaraña Mental

El problema de los problemas, no es tener un problema, es dejarse atrapar de un problema, y eso es una telaraña mental. Una forma de pensar ininteligible.
Para Matar a la Araña, Deshaz su Telaraña
De alguna u otra forma, todos tenemos metas que queremos alcanzar, en el corto, mediano o largo plazo, objetivos que nos hemos propuesto realizar, lo que es igual que ir de un lugar a otro, de una situación actual a una situación deseada. Debemos lidiar con los obstáculos más difíciles de superar, y son precisamente las telarañas mentales, esos pensamientos, esos paradigmas, esas ideas arraigadas en nuestro interior, de forma consciente o inconsciente, que muchas veces no nos dejan actuar, arrancar, ir tras lo que deseamos. Estas telarañas mentales son un auto sabotaje a nuestros sueños.

"A veces siento que nadie me escucha, que nadie me entiende... que mi corazón se encuentra invadido de telarañas, de confusión, de soledad... Parece que a nadie le importa si río o si lloro... si existo o si dejara de respirar”. Confesiones de una paciente. (Telaraña en el corazón).

Las telarañas son creadas por nosotros mismos. Empiezan sutilmente con una simple arañita (algún suceso) y nosotros, al no sanar esa experiencia, le damos más poder y empezamos a entretejer una gran telaraña invisible que nos impide ser objetivos y lo peor del caso es que muchos piensan que esas telarañas son fuertes muros imposibles de traspasar. Y por eso deciden quedarse con ellas. Así muchos se dan por vencidos y experimentan los conflictos mentales de un infierno viviente. Uno puede engancharse en ellas y convertirse al cabo de un tiempo en su víctima.

¿Cómo saber si tenemos telarañas mentales? Un ejemplo claro son las personas que viven amargados, sin una sonrisa, quejándose, a favor de nada y en contra de todo. Podrían creerse muy inteligentes con sus postulados sobre la violencia, la inseguridad, los "castigos de Dios", que es una utopía siquiera imaginar que podemos estar mejor, que para lograr cosas hay que sufrir, pasarla mal, ven pasar la felicidad y no la toman, etc. Sólo es cuestión de pasar tu mano sobre ellas y te darás cuenta que detrás, muy en el fondo son personas tan, pero tan necesitadas de amor y atención. 

El primer paso para quitarlas es reconocer todo lo que hemos vivido, evitando la culpa y acercándonos a la responsabilidad; aprendamos a sanar y perdonar para seguir creciendo. Lo que has vivido pudo haber sido algo fuerte, difícil o complicado. Pero lo que sigue después de ahí, dejar que la telaraña crezca u observar la luz del aprendizaje, sólo depende de ti.

Dirigir nuestros pensamientos en forma positiva y controlar nuestras emociones, al hacerlo estaremos regulando nuestra actitud. Recuerda que las actitudes son proyecciones de nuestra mente.

Limpiar las telarañas mentales, significa tener la atención plena, dejar de pensar obsesivamente y empezar a ser conscientes. Es vivir el “aquí y el ahora” de nuestra experiencia, en vez del “allí y el entonces” de nuestros pensamientos. Sal de la rutina, relaja la mente y dosifica cualquier tensión, eso te ayudara a disipar las preocupaciones, haciendo ver la vida con más amor y positivismo.

Podemos elegir en tener una actitud positiva frente a un determinado problema, elegimos como confrontarlo porque tenemos el poder de adoptar la decisión de influir, utilizar, controlar o estar en armonía con los cambios que se produzcan en uno mismo y en nuestro ambiente. Y de esta manera estaremos encauzando nuestro destino.

Siempre hay que quitarse las telarañas mentales, ya que éstas no nos dejan avanzar y nos bloquean la información que quisiéramos recibir, en reconocer todo lo que hemos vivido, evitando la culpa y acercándonos a la responsabilidad, aprendamos a sanar y perdonar para seguir creciendo.

Las emociones negativas, las costumbres deshumanizadas, las creencias falsas, los prejuicios y la pereza son telarañas mentales que impiden tu progreso. El saber, aprender, reconocer y aceptar es tener una mente abierta y positiva, una donde el camino es imaginable.

Lo importante para ti es que el éxito o el fracaso que puedan producirse al afrontar los desafíos del cambio, dependen de “tu actitud mental”, reconoce tu verdadero potencial y descubrirás cómo desarrollarlo y utilizarlo, sólo así encontrarás el verdadero cambio de toda tu vida.

“No dejes que aniden en tu mente los pájaros del infortunio”

lunes, 19 de enero de 2015

Amigos con Derecho

Las relaciones de pareja suelen clasificarse en las investigaciones en formales y no formales. Las relaciones formales son típicamente el noviazgo y el matrimonio. Estas están mejor definidas en el imaginario. Las relaciones no formales no están claramente definidas, al punto que es difícil saber si los otros nombres que existen son sinónimos de amigos con derechos o constituyen relaciones con características distintas.
En el complejo mundo de las relaciones humanas, hay quienes se las arreglan con una amistad para satisfacer sus instintos básicos. Algunos sobreviven, otros terminan por enamorarse.

Por tonto que parezca, definir un término como éste, “aventuras de una noche”, o cualquier otro tipo de relaciones en donde se involucra sexo casual, es importante para nosotros los psicólogos, la cual no podemos estudiar las relaciones sin definirlas. Las "relaciones de una noche", relaciones de “amigos con derecho” y relaciones a largo plazo, contienen cada una de las cuatro funciones: gratificación sexual, estatus social, apoyo emocional, "periodo de prueba" para una relación seria o como algo para evitar el aburrimiento.

Hay varios factores que ejercen influencia, por un lado, estamos en un mundo donde cada vez las personas quieren más tiempo para sí mismos y una relación seria necesita la dedicación que algunos no están dispuestos a dar. Por otra parte, los roles han cambiado, las mujeres trabajan y aportan, mientras que los hombres han tenido que aprender a desenvolverse en las labores de la casa. Ya no son tan dependientes el uno del otro en esos aspectos. La mujer vive su sexualidad con mayor libertad y puede elegir estar con uno o varios hombres sin un vínculo estrecho, pero también están las personas que aunque no estén convencidas del todo, aceptan estas relaciones para sobre llevar su soledad o sencillamente le tienen pánico al compromiso.

Las personas se involucran con otras por muchas razones: sexo, compañerismo o amor, e incluso para impulsar su autoestima. Los resultados, podrían explicar por qué la gente puede involucrarse en una relación informal, en una aventura de una noche o en una relación a largo plazo.

Se ha estudiado a las relaciones aventureras, aquellas en las que se mandan mensajes o se llaman sólo para tener un encuentro casual, y encontró que la gente encuentra más emoción que en una sola noche, pero son mucho menos "sentimentales" que las relaciones a largo plazo.

De acuerdo a los últimos resultados de investigaciones:
  • La función predominante de relaciones a largo plazo fue de apoyo social, seguido por ser un periodo de prueba o un marcador de estatus social, acompañado por el sexo.
  • Las “booty calls" fueron principalmente para el sexo, con un marcador de estatus social como la segunda función.
  • El sexo y el marcador de estatus social empataron en primer lugar como la principal función de los “amigos con derecho”.
  • Por último, las aventuras de una noche se relacionaban sólo con sexo, en primer lugar, en segundo lugar con el estatus social y en tercero con apoyo emocional.

Amigos con Derecho

La amistad con derecho es una relación de pareja que intenta combinar la vinculación afectiva, los comportamientos y actitudes típicos de una amistad, con la posibilidad de mantener relaciones íntimas o sexuales. La amistad con derechos tendrá menor vinculación afectiva y menores obligaciones que un noviazgo, aunque, como sucede en una amistad, no será completamente carente de ellos.

“Un amigo con derechos es alguien para pasarla rico, sin tener que rendirle cuentas de todo. Cuando uno quiere está con él y cuando no, pues no”, explica Valentina, una estudiante de último año de colegio, mientras sus otras dos amigas se ríen y respaldan su afirmación.

Las personas que usan el concepto destacan la libertad, la ausencia de compromiso, de estabilidad y de responsabilidad, la menor implicación afectiva y que su finalidad es el placer erótico/sexual.

Hay que tomar en cuenta los riesgos, el hecho de que el individuo puede adoptar esta conducta como un comportamiento permanente, y tener más de un amigo o amiga en esas condiciones, volviéndose promiscuo y exponiéndose a enfermedades de transmisión sexual o embarazos no deseados, sobre todo en los jóvenes que inician su exploración en el campo sexual.

Muchas personas aseguran preferir los “amigos con beneficios”, porque es una forma de evitar el sufrimiento que con lleva enamorarse.

Como resultado de esa filosofía, muchos amigos deciden dar el siguiente paso, escalar al siguiente nivel, y subir la adrenalina, sin caer en las trampas, en las retorcidas manías y en los enredos de una relación estable. De hecho, satisfacen una necesidad física y sus niveles de rendimiento en otros campos se incrementan, se sienten con una persona de confianza, que busca lo mismo y el resto ya se lo pueden imaginar.

Los nuevos tipos de relaciones como los amigos con derecho, toman fuerza cuando las personas empiezan a temer al compromiso y a todo aquello que limite la libertad propia. Este discurso hacia la libertad también ha sido tomado por instituciones como la escuela y la familia que eran los entes reguladores en otros tiempos. Todo esto ocurre en una época donde se han derribado antiguos paradigmas y han caído antiguos absolutos y la humanidad busca construir un propio espacio, un propio mundo.

Dentro de una relación amorosa, la amistad es uno de los elementos necesarios para que la pareja funcione de la mejor manera. Sin embargo, al amigo no se le ama. Se le aprecia, se le quiere, el vínculo afectivo es totalmente distinto. "Independientemente de nuestra edad, el amor es siempre un sentimiento que puede nacer y crecer". La amistad no nace y crece con tanta facilidad.

En toda buena relación amistosa existen al menos dos de los tres componentes se proponen en toda relación amorosa: Intimidad y compromiso. En el amor se necesitan el tercero, la pasión y un cuarto: La atracción.

La intimidad no se refiere a intimidad sexual, sino más bien a la intimidad emocional, que es la capacidad de revelar tus secretos más profundos, con todas sus imperfecciones, a la otra persona. Este tipo de intimidad no es la del amor. El problema es que en la amistad entre sexos opuestos muchas veces lo primero que sucede es la atracción, aunque a la larga se logre sublimar este sentimiento o manejarlo a través de la comunicación, lo cual permitiría disminuir la tensión sexual entre ambos.

No obstante, es fácil comprender que muchas amistades le agreguen los últimos componentes y surjan entonces los denominados "amigos con derecho" que se hacen amantes y a la vez son los mejores amigos, con todo su pro y sus contras. Todo porque ambos sentimientos se pueden dar simultáneamente con la misma persona.

Suelo pensar que los jóvenes aún creen en las relaciones estables, pero quizás se han ido atemorizando con la diversidad de creencias conflictivas a su alrededor y a lo mejor el universo de los “amigos con derechos”, más que una tendencia destructiva, sea un periodo de transición para tratar de reinventar el amor.


“el amor es una elección absolutamente inconsciente, no eres dueño en tu elección”