lunes, 20 de marzo de 2017

Ansiedad Infantil

Los trastornos de ansiedad no son exclusivos de los adultos. También están presentes en los niños y de hecho, son uno de los diagnósticos más comunes en la infancia y la adolescencia.
En la infancia un estado ansioso puede ser un mecanismo de defensa para afrontar problemas que el niño no sabe solucionar. Lo importante es prevenir que este trastorno se apodere, y al ser reconocido con tiempo, es posible evitar su evolución y empeoramiento.

Los niños que padecen TA experimentan importantes problemas relacionados con el fracaso escolar, la baja autoestima, la soledad y también, la salud física. Además, la ansiedad se asocia a un mayor riesgo de padecer trastornos en etapas posteriores de la vida, ya sean otros trastornos de ansiedad o bien depresión mayor o abuso de sustancias, entre los más comunes. Los niños no tratados tienen un mayor riesgo.

El TA a menudo se presentan con otros trastornos como la depresión, trastornos de la alimentación y el trastorno de atención con hiperactividad. Con el tratamiento y apoyo suficientes, su hijo aprenderá a gestionar con éxito los síntomas de un trastorno de ansiedad y vivir una infancia normal.

Clasificación y prevalencia

La tasa general de prevalencia de los trastornos de ansiedad durante la infancia es de un 18%, sin que se presente un mayor predominio en las niñas que en los niños. No es hasta la adolescencia, que las chicas alcanzan índices más altos que los chicos en este tipo de problemática, distribuyendo así los porcentajes de forma más semejante a los observados en la población adulta. Dentro del porcentaje citado, además, observamos que la ansiedad infantil se presenta de muy distintas formas. Se distingue entre los siguientes trastornos de ansiedad en la infancia:
  • Trastorno de ansiedad generalizada
  • Trastorno de ansiedad por separación
  • Trastornos fóbicos (Social. Escolar. Familiar)
  • Trastorno de pánico
  • Mutismo Selectivo
  • Trastorno obsesivo-compulsivo
  • Trastorno de estrés postraumático
  • Trastorno mixto de ansiedad y depresión
Tratamiento

Especificar que lo más importante de cualquier tratamiento, es su grado de adecuación a las particularidades de la persona a la que va destinado. En este caso, por tanto, es fundamental adaptar los procedimientos a la edad y características del niño. Se deben de tomar en cuenta los estresores ambientales, los factores de riesgos, la severidad, la disfunción que le ocasiona y la comorbilidad.

Para la intervención comúnmente se requiere de un equipo multidisciplinario conformado por el personal de salud: médicos generales o de otras especialidades, psicólogo clínico y psiquiatra. Entran en la detección del padecimiento los maestros, enfermeras y trabajo social. Se hace intervenciones psicosociales, psicoeducativas y psicoterapéuticas. La intervención farmacológica se hará dependiendo el cuadro y severidad por el psiquiatra.

Cualquier tratamiento tiene mayores y mejores resultados en los niños, cuando los padres y/o profesores colaboran para lograr los objetivos propuestos. Quizás los padres requieran terapia individual y ó familiar, y para el manejo conductual y afectivo del niño. La detección e intervención precoces pueden reducir la gravedad de los síntomas, estimular el crecimiento y el desarrollo normal y mejorar la calidad de vida de los niños con TA.

Las técnicas utilizadas para el abordaje de los trastornos de ansiedad en la infancia, son muy parecidas a las que se aplican en la población adulta.

Técnicas psicológicas sugeridas que se utilizan más frecuentemente y que han probado su efectividad (total o parcial) en los estudios experimentales llevados a cabo hasta la fecha:
  • Técnicas de exposición
  • Exposición en imaginación
  • Exposición in vivo con prevención de respuesta
  • Relajación
  • Práctica reforzada
  • Escenificaciones emotivas
  • Técnicas cognitivas
  • Auto-instrucciones
  • Terapia racional emotiva
  • Tratamientos psicofarmacológicos
Los trastornos de ansiedad pueden ser tratados eficazmente mediante una evaluación integral del niño y la familia. Los padres que advierten síntomas de ansiedad en sus hijos pueden ayudar procurando una evaluación y un tratamiento precoz. Generalmente, el tratamiento puede prevenir problemas futuros.

Curso o pronóstico

Depende del momento en que se le detecta, del tratamiento y de las condiciones ambientales del niño. Es muy frecuente que conforme transcurre el tiempo, el trastorno no tratado tiende a complicarse en severidad y comorbilidad. Factores que parecen predecir un peor diagnóstico son la edad de inicio más temprana, la larga duración de la enfermedad, la historia de hospitalizaciones previas, la presencia de rasgos de personalidad muy acentuados que son desadaptativos, la comorbilidad entre diferentes trastornos psiquiátricos, así como la severidad de los síntomas y la historia familiar positiva de TA.

Para nosotros los profesionales de la salud mental que tratamos TAI y otros trastornos infantiles se requiere seguir los aspectos, principios y pautas éticas, y de las consideraciones éticas en la relación del paciente y familia y el respeto de los derechos humanos del niño.